8. El refugio.

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Pronto nos juntamos con el resto del grupo y juntos nos dirigimos al refugio, cuyas instalaciones son inmensas desde el exterior.

—¡Muy buen trabajo, Hayley y Harry!— nos felicita la guía por haberles conducido hasta aquel lugar.

—Quizás no deberíamos estar aquí, este sitio no me gusta nada— indica Jake mordiéndose una uña. Está nervioso y asustado, y es comprensible.

El chico de pelo rizado silba a mi lado mientras contempla el gran edificio de hormigón que hay frente a nuestros ojos.

—Desde allí arriba parecía más pequeño— asiento a sus palabras.

Pensaba que los refugios debían estar bajo tierra y ser pequeños pero resistentes. Este es casi del mismo tamaño que nuestro Resort.

—Además, está en ruinas. ¿En qué año se construyó?— pregunta la pelirroja, arrancando otra flor de las raíces de un árbol cercano. Harry rueda los ojos ante dicha acción y yo sonrío ligeramente.

—No es mucho más viejo que el hotel. Tan solo no ha tenido un buen cuidado.

El oji-verde da varios pasos hacia el frente, y gira su cuerpo para enfrentarse a nosotros.

—El objetivo de un refugio no es ser estéticamente agradable, es ser seguro por dentro. Vamos— ordena más que sugiere y de pronto se ha convertido en nuestro nuevo guía. A Lily no parece importarle. Es más, parece aliviada.

Harry empuja las grandes puerta de metal y revela el interior del edificio. Un largo y desgastado pasillo, pequeñas chispas que se generan por algún cable roto de la electricidad encima de nuestras cabezas y un fuerte olor a humedad nublan mis sentidos. El sitio me suena, pero no puedo descifrar de qué.

Aparte de eso, no hay nada ni nadie más.

—Ahora que estamos aquí, concuerdo con Míster Miedica. Este sitio me pone los pelos de punta— murmura Harry, dando unos pasos hacia delante y contemplando las instalaciones.

—¿Por fin me pones un mote y no se te ocurre nada mejor que "Míster Miedica"?— indica Jake decepcionado. El rizado no responde, está examinando el suelo.

—Aquí hay huellas con barro, y parecen recientes— se ha agachado y está inspeccionando el fango.

—Eso quiere decir que los huéspedes estuvieron aquí— concluye Lily.

—Bueno, alguien estuvo aquí. De eso no hay duda— comenta el chico justo antes de que un claro sonido se escuche más allá de su posición.

—Vosotros también ha-habéis oído eso, ¿verdad?— pregunta en un susurro Jake, quien se ha aproximado a mi cuerpo. No lo aparto, yo también me he asustado.

El ruido proviene de algún lugar tras girar la esquina y es Harry el primero que se acerca a examinar la zona. Pega la espalda a la pared y descubre su cabeza rápidamente para ojear el pasillo contiguo.

—Chicos, tenéis que ver esto— murmura el rizado saliendo de su escondite.

Los cuatro restantes nos acercamos a él, que está posicionado frente a un gran agujero en una de las paredes, del que nacen varias enredaderas con las flores mágicas del exterior. Los trozos de hormigón derrumbados están a nuestros pies. Al final del corredor me fijo en una puerta metálica con un pequeño candado y me anoto mentalmente que después deberíamos investigar esa zona del refugio.

—El sonido ha tenido que venir de aquí— indica Ciara, que está mirando por encima de mi hombro, protegida por mi espalda. Todos detrás del cuerpo de Harry.

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⏰ Última actualización: Jun 01, 2022 ⏰

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