3 de noviembre de 1981, cementerio de Valle de Godric.En otros años Sirius se sentía mucho más alegre porque llegaba su cumpleaños pero en ese momento él no se sentía alegre, feliz o emocionado. En cambio su corazón estaba roto ante la falta de dos de sus amigos, los extrañaba y los extrañaría demasiado el resto de su vida.
No notó cuando había comenzado a llorar pero las lágrimas salían de sus ojos sin poder detenerlas, el dolor que sentía era demasiado y no sabía que se supone tenía que hacer. Era un adulto pero en el fondo se sentía como un niño pequeño buscando a alguien que lo guiará en todo ese dolor.
Una mano sujetó la suya y le dio una suave caricia para reconfortarlo. Era Remus, su novio y el único amigo que le quedaba en esos momentos lo que lo hacía sentir solo un poco menos solo.
Estaban en el cementerio de Valle de Godric para el entierro de James y Lily; Minerva y Remus se habían encargado de todo para que pudiera estar listo rápido. En el lugar estaban Mary McDonald, amiga de Lily, Amos Diggory, Alice y Frank Longbottom con el pequeño Neville en brazos y algunos profesores de Hogwarts además de algunos miembros de la orden del fénix.
Justo como Dumbledore había dicho cerca de donde estaban Sirius y Remus con los mellizos había varios aurores para cuidarlos, aún no se habían logrado capturar al grupo de mortifagos así que la única ocasión en que habían salido era esa.
Tenían preparada una ceremonia para honrar la memoría de los dos magos y así poder despedirse como era debido. Sirius y Remus escuchaban lo que se decía de sus amigos, cada uno con un bebé en brazos, Alina en los brazos del hombre lobo y Harry en brazos de Sirius.
Estaban por terminar la ceremonia cuando se escucharon unos pasos apresurados por el sendero principal, los aurores se pusieron en alerta de inmediato y Sirius pasó su mano hacía su bolsillo listo para sacar su varita. Al darse vuelta encontraron a una chica rubia muy delgada caminando hasta donde estaban, los aurores estaban por atacar cuando Dumbledore se acercó hacía ella.
—Petunia, querida —a todos los presentes se les hizo raro ver a Dumbledore saludar a esa joven que nadie parecía conocer.
Remus reconoció a la mujer como Petunia Evans, la hermana de Lily que había visto en varias fotografías de Lily.
—Lamento la tardanza, yo... estaba lejos —dijo a Dumbledore pero Remus y Sirius la alcanzaron a escuchar.
—No pasa nada —la guió hacía Sirius y Remus—. Ellos son los padrinos de Alina y Harry.
Petunia los miro con atención, Sirus intentaba pensar en que decirle.
—Hola, un placer soy Remus Lupin —dijo Remus adelantándose y tendiéndole una mano.
—Un placer —dijo Petunia en voz baja estrechando su mano.
—Sirius Black —la saludó estrechando su mano.
Después de algunas presentaciones más siguieron la ceremonia. Sirius se apoyó en Remus cuando bajaron los ataúdes, primero el de James causando que ambos amigos comenzaran a llorar en silencio.
Harry, cómo si estuviera consciente de lo que sucedía, comenzó a llorar en brazos de Sirius. Este comenzó a arrullarlo con suavidad intentando que se calmara un poco, se calmó luego de unos momentos y cuando comenzaron a bajar el de Lily, Alina empezó a llorar mirando el ataúd.
Remus y Sirius sabían que eran demasiado pequeños para entender que pasaba o demasiado pequeños para poder recordar esto cuando crecieran pero suponían que sentían la ausencia de sus padres, que sentían que algo les faltaba pero no podrían saber que hasta que crecieran.
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The new marauder family
FanficLa guerra contra el mal ha terminado con el sacrificio y batalla de Lily Evans y James Potter. Juntos lograron terminar con el mago tenebroso Lord Voldemort pero sus hijos, Alina y Harry quedaron solos, ahora alguien tendrá que cuidarlos. Remus Lupi...