☠•● CAP 20: UN FINAL PRÓXIMO ●•☠

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Salís de la habitación de hospital. Caminais por el pasillo cuando una chica vestida de enfermera os detiene.
-¿Dallas?
Este la mira. -¿Emma?
La chica lo abraza. -Dallas, cuanto tiempo.
-Si, si.
-Me alegro de verte.
-Y yo, y yo, pero si me disculpas. -intenta dar se la vuelta pero ella lo detiene.
-No te apetece... No sé, que te enseñe una habitación, o algo? -dice poniendo su mano en el pecho de tu novio.
En ese momento tenías ganas de romperle la muñeca, pero tu estado actual te lo impedia.
-Lo siento Emma, pero no me interesa. -se gira hacia vosotros. - Vamos.

Subís al coche.
-¿Quien era esa? -pregunta Jhonny desde el asiento trasero.
-¿Me lo estás preguntando enserio?
-Sí.
Dallas te mira en el asistente del copiloto. Estas seria y sin habla. Pensativa.
-No es nadie.

Cuando llegáis a la casa de Dallas lo primero que haces es cambiarte de ropa y acostarte en la cama.
-¿Estás mejor? -te pregunta Dally que estaba de pie junto a ti.
-Más tranquila.
Las manos de Dallas suben tu camiseta, te acaricia el abdomen sobre las vendas de la doctora Cooper.
-¿Te duele mucho?
-Estoy bien, y Jhonny?
-En su habitación, durmiendo.
Dallas se sube a la cama de modo que su rostro está en tu abdomen, donde empieza a dejar suaves besos por los vendajes.
Le acaricias el pelo, y sueltas una pequeña risa.
El chico levanta la cabeza y te pregunta entre risas -¿Qué?
-Me estás haciendo cosquillas.
-¿Oh, enserio? -vuelve a besarte el abdomen.
Empiezas a reírte. -Dallas, para. -dices bajando la voz, no querías despertar a Jhonny.

El castaño sube por la cama hasta quedar cara a cara contigo. -No te haces una idea de lo feliz que estoy de que estés aquí.
-Yo también estoy muy contenta. -lo besas.
Dallas se acomoda a un lado tuyo.
-Dally... Quién era esa chica? La del hospital.
Dallas suspira. -Nadie. No tiene importancia.
-Era guapa.
Te mira. -¿Estás celosa?
-No. -pero tu negación solo confirma lo que es verdad, estás celosa.
-Oh cariño, solo una chica de tantas, pero toda y cada una de ellas dejó de tener el más mínimo valor para mí desde la noche en la que... -te mira con un brillo reflejado en sus ojos. -En fin, ESA noche.
Le besas.
-Te quiero, preciosa.
-Yo también te quiero, duendecillo.
Los dos os reís.

𝘿𝘼𝙇𝙇𝘼𝙎

Sin poder pegar ojo, el castaño abre los ojos en su cama, y con mucho cuidado se gira para poder mirar a la chica que descansa a su lado.
Le acaricia las vendas, preguntándose como es posible que haya sobrevivido a ese infierno durante tantos años, que a pesar de todo siga entera, lista para afrontar lo todo, como una auténtica guerrera.
Con cuidado de no despertar ni lastimar a su novia el chico se levanta de la cama.
Se sienta en el borde del colchón, escondiendo la cara entre las manos intenta desesperadamente despejar la ira de su cabeza. No soporta la idea de ese horrible hombre, al que por desgracia podía llamar suegro, golpeando a la a chica que él tanto ama, con un solo objetivo, hacer daño, tanto a la chica como a lo que podía estar creciendo en su interior. En una situación normal habría cogido el coche y se habría ido a dar una vuelta, pero no podía dejar sola a T/N, ni a Johnny.

Intentando abandonar sus pensamientos y su ira, Dallas se vuelve a recostar en la cama y cierra los ojos, intentando coger el sueño.

𝙅𝙊𝙃𝙉𝙉𝙔

En la otra habitación un adolescente con un ojo morado miraba al techo, por fin se habían ido de ese infierno, pero qué pasaría ahora? ¿Sus padres los buscarían? ¿Y si el padre de Dallas aparece? Se levanta de la cama y se arrastra hasta la ventana de la habitación. -Tranquilo Johnny. -piensa mientras ve su reflejo en el espejo.
-Centrate en el aquí y en el ahora, os habéis ido, estáis con Dallas, él nunca dejaría que algo malo nos pasara, a veces podra ser un capullo, pero jamás deja que alguien toque a sus seres queridos.

Y con esa idea en la cabeza vuelve a la cama, donde empieza a vencer le el sueño.

𝙋𝙊𝙍 𝙏𝙐 𝙇𝘼𝘿𝙊

Abres los ojos de golpe y te sientas veloz en la cama. El sudor frío y las lágrimas recorren tu rostro. Empiezas a sollozar.
-¿T/N? -dice Dallas dándose la vuelta.
Tú solo lloras.
-T/N. -Te abraza mientras que con una mano te acaricia el pelo y con la otra te seca las lágrimas. -¿Qué pasa?
-He tenido una pesadilla. -dices entre sollozos.
-¿Qué has soñado para estar así?
-No quiero hablar de eso.
-Vale, tranquila. Quieres que te prepare un chocolate caliente?
-Por favor. -dices entre lágrimas.

Pasan un par de minutos y Dallas entra con una taza de chocolate caliente.
-Toma.
Coges las taza. -Gracias.
-¿Quieres hablar de la pesadilla?
Niegas con la cabeza.
-De acuerdo. -te da un beso en la frente.

A duras penas consigues dormir.

Al día siguiente estabas bebiendo un poco de chocolate en la cocina cuando ves a Dallas entrar por la puerta.
-¿De dónde vienes?
-Estaba comprando unas cosas. ¿Estás mejor?
Asientos con la cabeza. -Si, ya estoy más tranquila.
-¿Quieres hablar de la pesadilla?
-Preferiría que no, enserio que no quiero pensar en eso.
-De acuerdo cariño. -te da un beso en la mejilla. -¿Y esto qué tal? -dice tocando las vendas que rodean tu cuerpo.
-Aún me duele un poco, pero estoy mejor.
-Siempre dices lo mismo.
-Esta vez es enserio, siento que este es el final de una triste historia, en la que a partir de ahora va a ver felicidad por todas partes.
-Eso espero. Te quiero mucho preciosa.
-Y yo duendecillo. -lo besas.
-¿Y Johnny? -dice apartándose.
-Aún sigue durmiendo.
-Voy a despertarlo.
-No, por primera vez en muchos años lo veo dormir en paz, deja lo que disfrute de sus sueños un ratito más.
-De acuerdo.
Llaman a la puerta.

 EL FUCKBOY, DALLAS WINSTONDonde viven las historias. Descúbrelo ahora