Atrévete el tiempo es corto.

9. Vidas entrelazadas.⌛

KIARA
Octubre.

—¿Qué tanto piensas, Kiara? - me pregunta, Bell, luego de actualizarle el chisme- hablen y vean como va todo.

— Suena todo tan sencillo, si todo fuera así, creo que nos ahorraríamos tantas cosas y fuéramos al grano de una.

— ¿Coger es ir al grano de una?- doy una mirada de pocos amigos. - estoy segura que ahí no es, querida amiga.

—Estoy consiente que ahí no es ni será- me observa y antes que agregue algo más a un tema con punto y fin prefiero tocar otro mejor (chismesito) - ¿Qué tal, Daniel?

Un, tómate, se queda pendejo delante de Bell.

—Este mm... Él está bien mm... sí, muy bien.

—Sí, lo sé está buenísimo... MM le debería acept...

—¿¡Aceptar que mierda!? Kiara la Veneca no mires a Daniel.- me parto en risas, pero  me cubro la boca para opacar un poco el sonido de mis risas porque, Bell mantenía su cara roja y muy seria.

—¿Cómo pretendes darme una advertencia de alto calibre con ese "Kiara, la Veneca" eh?- niego con la cabeza- el abogadito no me interesa y lo sabes.

—Ese "veneca" nos hizo amigas, estúpida- dice entre risas y mucho más relajada, todo fue broma- ¿recuerdas eso?

—¿Como olvidar el día que conocí a la persona más perfecta en un grupo de frikis de la universidad? Me caías realmente mal, pero sabía que nos llevaríamos bien por todas las cosas que le decías a la ignorante de Kat... Amaba verla molesta.

— Esos días nadie te quería cerca porque todos pensaban que tenías juguito de fresa- ¡No puede ser! Todos me ven como una loca, ¡me encanta!- bueno no hay mucha diferencia de esos días a estos, pero bueno tú amas estar así, Kat fue quién nos unió.

— Kat me cae mal como todos, pero ella es la primera en mi lista y todo iba bien hasta ese día que me quiso tragar y vomitar como si de un insecto se tratará y pues se equivocó de persona.

— Justo me nombró a mí, no pude evitar hablarte y convertirnos en los 6'fantásticos, aunque mis amigos, los frikis y tú no se lleven del todo bien todos te queremos, Kai.

—Lo sé, lo sé. - hago un movimiento con mi mano colocando mi cabello a un lado, pero con estilo tratando de hacerlo como lo hace Bell, a quién le provoca mucha risa y durante nuestras dos horas de descanso nos mantenemos hablando y recordando la anécdota de como fue la  primera vez que hablamos.

«Pasado»
5 Meses antes/ abril.

—¡Voy a llegar tarde a la clase! Esa bendita alarma de mierda nunca suena, es la tercera vez que llego tarde.

—Cálmate, Kai, llegaremos los dos tardes ¿Recuerdas que te fui a levantar y te esperé? Yo perdí mi tiempo, pero aquí estoy, tranquilo...

— El día que a ti te altere algo, yo me volveré un amor.- negó varias veces con la cabeza entre  pequeñas risitas, pero no comento más.

Voy caminando tan rápido que cuando giró a ver, Antonio me tropiezo soltando dos de mis libros que llevaba en las manos y justo con la persona más "intocable del campus".

—Idiota, fíjate por dónde vienes... Hoy definitivamente es el día de los estúpidos

Y se acaba de explotar la bomba nuclear.

— Oh, ¡Felicidades a ti! Que eres la estúpida mayor.

Se escuchó un gran" wooow" por todo el pasillo, otra persona con dos dedos de frente está consiente que no puede hacer eso y bueno luego estoy yo que hago lo correcto.