REVOLUCIONARIA

Al Mejor Postor

-. ¡AQUÍ! ¡AQUÍ! ¡DOY 100MIL BELLIS POR LA NIÑA!

-. ¡NO! ¡POR AQUI! DOY 200MIL BELLIS!

-¡OFRESCO 500MIL!

-. Vaya parece que tenemos algunos interesados en nuestra nueva mercancía -. El anfitrión de la subasta había subido a una tarima para que los compradores pudiesen verlo mejor -. No se preocupen mis estimados nobles, tenemos suficiente para que ustedes puedan llevar buenos esclavos a sus hogares .

La mayoría de los presentes en la subasta eran nobles y reyes del bajo mundo, estos aunque quisieran comprar esclavos más exóticos no lo iban a hacer.

-. Que pase el primer lote de mercancía porfavor -. Pidió el presentador , por un lado de la tarima comenzaron a subir hombres, mujeres y niños. Todos encadenados de pies, manos y cuellos, con las cabezas agachadas y miradas sombrías -.  Estos que pueden ver acá, son mercancía estándar, todos valen el mismo precio .

' solo deben llenar el formulario de compras a sus derechas, en dicho formulario deben especificar la cantidad de esclavos a comprar, si solo serán hombres o mujeres, si quieren niños o ancianos, en la parte posterior de la hoja colocarán la dirección a donde será trasladada su compra . Coloquen su firma y el monto a pagar, Gracias por su atención ' .

( . . . )

En una jaula bastante grande, se encontraba la pequeña hinata, acompañada de otros niños. Estos tenían aspectos bastante diversos, desde niños con escamas coloridas y aletas, dos codos, plumas, cuernos y muchas otras características que los hacían fascinantes a la vista

Ella por su parte miraba asustada a los guardias que custodiaban su jaula. Aún no entendía porque estaba allí, ella no era bonita ni llamativa .

-. Tengo miedo -. Escucho un sollozo a su lado una niña tan pequeña como ella, de plumas en brazos y espalda -. Quiero a mis papás -. Volvió a llorar

-. Nunca vamos a salir de aquí -. Dijo, esa vez una niña se veía un poco mayor que ella y tenía los brazos largos con dos codos en cada uno -. Van a vendernos, nunca vamos a salir de aquí .

-. Y-yo cr-creo que si dal-saldremos -. Hinata intento mantener el optimismo, aunque tuviera lágrimas en sus opalinos ojos .

Los otros niños no le respondieron, simplemente bajaron sus miradas hasta los grilletes en sus muñecas.

Un ruido fuerte, de metal abriéndose los asustó mucho, tanto que se juntaron en una esquina, temblando como pollitos bajo la lluvia .

-. Es hora de que salga la mercancía cara -. Un hombre enmascarado había abierto la reja de la jaula donde estaban los menores -. Los tenryūbitos ya han llegado aquí vamos no los hagamos esperar.

El hombre halo una gruesa y pesada cadena hacía el, haciendo caer a los niños al frente. Los grilletes lastimaron la tierna piel de los menores, pero el verdugo no pareció tomarlo en cuenta .

Los llevo hasta la escalera que daba con el escenario, desde donde estaban se podía escuchar la voz del anfitrión.

-. Ahora con ustedes damas y caballeros! Les presentamos una mercancía exótica traída desde mares lejanos! -. Decía mientras se movía enérgicamente para animar a los compradores -. Desde increíbles hombres pez, hasta rostros fantasmales con ojos perlados! Todos estos podrán verlos a partir de ahora. . . Pero antes demos la bienvenida a nuestros gobernantes supremos!

Los compradores se levantaron de sus asientos y se inclinaron en fila para darles la bienvenida .

Hombres y mujeres, vestidos con pulcros trajes blancos de telas muy suaves a la vista, con burbujas de cristal sobre sus cabezas. Se veían repugnantes con sus gordas papadas en los hombres y mejilla huesudas en las mujeres.

-. Bienvenido sean mis estimados nobles -. El anfitrión se arrodillo ante los seres que que veian con desagrado a los demás.

-. Ahórrate las charlatanerías, solo muéstranos la mercancía -. Hablo uno de los seres, tenía cabello castaño y unas gafas de sol.

-. U-uh claro sus altezas -. El presentador sudo frío ante las miradas -. Primero tenemos. . ¡ A los impresionantes niños pez !

Uno a uno los niños fueron siendo separados para subirlos al escenario.

De a poco la niña de ojos ópalos fue quedando sola en la oscuridad, tampoco es que quisiera salir. La seguridad que sentía allí en la oscuridad le agradaba, porque cada vez que un niño era puesto a la luz de los reflectores, todo quedaba en silencio para seguidamente escuchar aquel espantoso grito de dolor.

Ni siquiera tenía el valor de activar su Byakugan para ver la razón por la que gritaban y lloraban de esa manera.

-. ¡Y ahora con ustedes! ¡Les presentamos a la especie mas rara del día! Traída desde uno de los más tormentosos mares del nuevo mundo ¡Los ojos perlas! -. La voz del presentador resonó se escuchó en el recinto, emocionando a los seres ¡Nueva mercancía! Este año si que se esforzaron .

A la luz del escenario fue puesta, una pequeña niña de ojos perlas. Visiblemente asustada pero eso ellos no podían verlo, frente a ellos estaba algo que sus ojos ambiciosos jamás vieron.

Era una criatura hermosa, de piel blanca como leche ( algo sucia pero nada que un baño no arregle ) cabello azulado brillante como una noche estrellada y finalmente unos ojos exóticos como perlas. O esos carísimos ópalos extraídos del kauroseki. Su aspecto en si , aunque sucio seguía siendo hermosos.

-. ¡Ah! Que linda cosita, cariño quiero esa nueva eclava para mí colección de muñecas y la quiero ahora! -. Una de las mujeres de aspecto calaverico exigió al que aparentemente era su marido .

Aunque está no era la única, todos querían a la nueva criatura en sus manos. Por eso los números empezaron a subir de forma rápida .

-. Cariño no dejes que me quiten a mi nueva muñeca! -. Grito la misma mujer de hace un rato .

-. No te preocupes esposa mía, conseguiré la muñeca -. Hablo con calma el ser -. ¡Ofrezco 2,5billones de bellis por la muñeca!

-. ¡Vendida a Saint Dominic! ¡Porfavor suba la tarima para marcar su muñeca! -. Exclamó él presentador.

Ambos tenryūbitos Saint Dominic y su esposa subieron al escenario para reclamar su premio.

Hinata los vio sacar de una forja,una barra de metal al rojo vivo , la punta final de dicha barra tenía forma de  garras . Caminaron hasta ella con esas espeluznantes sonrisas en sus rostros.

-. Muy bien esclava es hora de marcarte para que mi esposa tenga su juguete nuevo -. El malvado ser se acercó a ella con la barra caliente en manos, la pobre niña solo pudo retroceder y negar ante el miedo que sentía -. Tks ¡Alguien tráigame un látigo! Es mejor si empiezas a obedecer a partir de ahora -. El hombre ignoro el látigo que uno de sus lacayos le estaba dando y simplemente la pateó.

Hinata sujeto su estómago pateado con fuerza, escupiendo algo de saliva por el dolor, ella quiso levantarse pero . . .

¡AAAAAAAAAAAAAHHHH!

La sensación de que su pequeña espalda estaba siendo desgarrada desde dentro fue abrumadora .

La pequeña se retorció en el suelo llorando y gritando, salpicando todo con su sangre. El daño estaba hecho, no había vuelta a tras.