Abundaba el silencio en la sala, aún estaba algo avergonzada. Minutos pasaron y a lo lejos se oía que me llamaban, me acerque hacía allí y pude darme cuenta de quien provenía esa voz, era el médico. Su cara estaba algo rara, mas triste que de lo normal, mi corazón se acelero y cada vez mi preocupación aumentaba.
-Oriana: doctor que pasó?
-Vernad: tengo que hablar con usted.
-Oriana: hable por favor se lo pido, pasó algo con Olivia?
-Vernad: tengo dos noticias para darle.
-Oriana: por favor hable.
-Vernad: la primera es que Olivia va a quedarse unos días mas, necesito hacerle una serie de exámenes que son necesarios.
-Oriana: pero es normal?
(Dijé algo preocupada)
-Vernad: si, es para controlar su evolución y la segunda noticia es que ella al ser tan débil por sus pocos meses de vida va a tener que tener cuidados especiales por que es posible que tenga que quedarse.
-Oriana: si yo entiendo, a mi hija la voy a cuidar.
-Yo también la voy a cuidar-
(Dijeron desde mi costado, al girar era la misma persona de siempre, Julián)
-Julián: podemos verla?
-Vernad: si, pero solo unos minutos.
-Oriana: es mejor que vaya yo.
(Mencioné caminando hacía la sala)
-Julián: NO! Yo también voy a ir.
(Dijo levantando su tono de voz y sujetandome fuertemente el brazo)
-Vernad: siganme.
Y exactamente eso hicimos, llegamos al lugar en absoluto silencio, abrí la puerta lentamente para no producir ruido y despertarla. Julián caminaba detrás mio, siguiendo mis pasos.
Al entrar, cerré la puerta con la misma intensidad que la había abierto, a penas miré a Olivia mis ojos se inundaron de lágrimas, ella en ese momento no tenía a nadie mas que a mí y aunque me cueste decirlo estaba Julián, que a pesar de tantas peleas, jamás se alejo de mí, y eso lo voy a tener presente por el resto de la vida.
Eramos solo los tres dentro de la sala en que estaba ella.
Tomé a Olivia de una de su pequeña manito, acariciaba su piel delicadamente y Julián, enfrente mio tomado de la otra manito de ella, depositaba besos en ella, me generaba tanta ternura que no podía quitar mis ojos de él, Julián levantó su rostro y intercambiamos un juego de miradas, que me transmitían tanta paz, que no pude evitar quebrarme. Él con una de sus manos seco mis lágrimas, produciendo que mi piel estremeciera al sentir contacto con él.-Oriana: no hace falta que te quedes acá.
-Julián: yo quiero quedarme.
-Oriana: no quiero que te quedes porque te pago.
-Julián: yo nunca hable de plata, no me importa, todo esto lo hago de corazón, porque lo siento.
-Oriana: no te quedes por obligación.
-Julián: ya te dije y te lo voy a seguir diciendo que lo hago porque lo siento y no quiero que me pagues nada.
-Oriana: si lo voy a hacer porque es tu trabajo, para eso te contrato mi mamá, aunque yo no estaba de acuerdo.
-Julián: no querias contratar a nadie pero si no fuera por tu mamá vos ahora estarías sola, o me equivoco?
(Me dejó sin palabras, después de todo tenía razón)
-Oriana: no se tal vez no.
-Julián: por que siempre me llevas la contra?
-Oriana: será porque me gusta hacerte enojar.
-Julián: y a mi me gusta...
-Oriana: shhhh no grites.
(Le dije interrumpiendo su oración)
-Julián: esta bien, perdón.
(Susurro en voz baja)
-Oriana: que me decías?
-Julián: no nada, nada olvidate.
-Oriana: te puedo hacer una pregunta?
-Julián: si decime.
-Oriana: pero respondé con la verdad.
-Julián: te dije que si.
-Oriana: te vas a quedar hasta que mi mamá regresé de viaje o nos vas a abandonar para irte con tu novia?
Perdón por tardar tanto en subir el capítulo y hacerlo tan cortito, pronto subiré otro. Espero que les guste. No olviden votarlo!!
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Un padre para mi hija
RomansLa vida parece dura al criar a una hija con 18 años de edad, pero cuando aparece él todo cambiará. ORIAN.