¿aún me amas?

capitulo 13: a tu lado

Pasaron cinco semanas y obtuvimos nuestra nueva y linda casa, estábamos muy atareados por la mudanza, y estábamos empezando a ver, detalles de nuestra boda.

Ambas familias y amigos, estaban muy contentos por nosotros, y por nuestra linda relación.

Creo que al fin todo sería normal.

Otra vez.

...

Solo unas cuantas horas para mi boda, estaba nerviosa, asustada, feliz, emotiva, era un mar de sentimientos.

Noticias Martha está embarazada, de un niño, y se mudo otra vez, pero ahora a una cuadra de mi casa.

—te ves tan linda— me felicitó mi cuñada rose

—muchas gracias

Martha estaba arreglado mi cabello, miranda y mi madre, se estaban asegurando de que todo estuviera en orden.

—hija— me habló mi madre —ya es hora tu padre te espera justo antes de la entrada

Me levanté y todas me ayudaron a acomodarme en mi vestido.

Queríamos algo sencillo.

—oh esperen— dije y fui a el tocador

Encontraste el juego de collares que me regaló James el día de mi cumpleaños y me lo coloque.

Salí de aquel cuatro y me fui hacia la entrada.

Mi padre me entrego a James.

Fue una linda ceremonia, al final firmamos y por fin entrabamos casados por lo civil.

Nos fuimos al salón donde sería nuestra fiesta.

La fiesta fue tranquila y divertida, acabo alrededor de la una de la mañana.

Nos estábamos despidiendo de nuestra familia, para tomar nuestro vuelo a Italia.

—yo y mi hijo de vamos a extrañar— le dijo Martha tocando su vientre
—yo también, cuidado muy bien

—claro

James me abrió la puerta del auto y nos fuimos al aeropuerto.

—fue una linda noche— le dije sonriente

—si, estoy muy feliz, tu me haces feliz, gracias

—gracias a ti, por dejarme volver a amar

...

Llegamos a un lindo hotel en el centro de Italia.

Subimos por el ascensor con nuestras maletas.

—te dije que sería lindo

—tenias razón, ¿que quieres hacer?

—por ahora dormir, ya mañana veremos qué hacer

—¿qué hacías mientras estabas aquí?

—paseaba por las calles, me perdí más de diez veces— le conté riendo —conocí restaurantes, tiendas de ropa, un lugar de artesanías, y otros lugares

Entramos a nuestro cuarto y empezamos a acomodar nuestras cosas, cuando terminamos nos dormimos, y despertamos al medio día.

James me llevo a un lindo restaurante, con una rica comida.

—¿qué te parece la comida?— me preguntó

—esta deliciosa— le sonreí —gracias por traerme aquí

—es lo menos que puedo hacer, eres mi esposa y quiero hacerte feliz

—mientras estés cerca de mi, estaré feliz

—que cursi es mi mi esposa

Le pegue con la servilleta de tela, haciendo reír más.

...

Las dos semanas en Italia, fueron grandiosas, pero ya era hora de regresar.

Mis padres, Martha y Lucas, y los padres y hermana de James nos recibieron haciendo una cena.

—¿como se la pasaron?— preguntó el padre de James

—genial

—me alegra tanto verlos juntos— dijo mi mejor amiga —desde la universidad supe que los dos terminarían juntos

Todos en la mesa rieron.

—James a veces era tan obvio— dijo mi madre

—pero Olivia no se daba cuenta— dijo Lucas

Volvieron a reír todos.

...

Llevamos seis meses de casados, todo cambio, Martha y Lucas se volvieron padres del pequeño Will, mi madre se tomó un respiro y regreso a su país natal, londres.

La hermana de James, rose, se mudo a Canadá, y pues yo y James estamos de maravilla, tenemos un trabajo estable, y con muy buen sueldo.

Un viernes, estaba preparando un poco de comida para el desayuno.

Oí los pasos a lo lejos, James aprecio con un traje.

—buenos días amor— me dijo, y me besó

—buenos días, tu desayuno ya está en la barra

—gracias

Nos sentamos a comer, pero note a James un poco nervioso, definitivamente me quería decir algo.

—¿me quieres decir algo?

—no, no,...— tomo un poco de agua —bueno si, pero prométeme que no te enojaras

—depende de lo que me digas

—bueno surgió un viaje de negocios imprevisto, te lo juro amor apenas me avisaron ayer por la noche

—¿y cuando te irás, y a dónde?

—me iré a medio día, viajaré a Manhattan

—ve tranquilo James— le sonreí

—¿estarás bien?

—si, vamos te ayudo a empacar

Lo ayude a subir las maletas a su auto.

—te recompensaré lo prometo— dijo y me dió un beso en los labios

—no importa, ten cuidado— sonreí

—vuelvo en una semana

Lo ví irse.

Es la primera vez que estaremos tiempo separados, tenía que irme acostumbrando, su trabajo implica muchos viajes.

¿y ahora que aria toda la semana?

Bueno prácticamente solo cuatro días, por qué los otros tres estaría trabajando en un nuevo caso.