CAPÍTULO 9: TREGUA

5 1 2
                                    

- ¿Pero hace tanto calor?- preguntó asombrada.

- Sí mamá, aquí la temperatura es cálida casi todo el año, aunque dicen que cuando llueve, llueve bien...

- Pues aquí hace muy bueno, ¿no echas de menos estar en tu casa?- me preguntó mi madre cambiando de tema.

- Mira mamá, valoro mucho que me hayas llamado pero no quiero volver a discutir sobre ese tema. Estoy feliz aquí y por el momento no quiero volver. ¡Solo llevo una semana!- respondí con impaciencia.

- ¿Y qué tal la casa? ¿y el trabajo?.

-La casa es genial, aunque del trabajo prefiero no hablar. Los niños se portan bien pero sabes que me cuesta tratar con ellos. Además, su madre me está dando tareas que se salen de lo que habíamos hablado, así que estoy buscando otro trabajo. Como sabe que necesito el dinero, se está aprovechando de mí todo lo que puede por poco más que una propina.

- Veo que estás haciendo tu vida poco a poco y aunque te echo de menos, creo que esta experiencia te va a venir muy bien. Espero que realmente encuentres lo que has ido a buscar allí y vuelvas hecha toda una mujer independiente- me dijo con sinceridad.

- Sé que está siendo duro para vosotros, pero os prometo que estoy bien y que no me olvido de vosotros ni un momento. Para mí tampoco está siendo fácil.- confesé.

- ¿Sabes algo de Carla y Lucas?- preguntó.

- Pues no he vuelto a saber nada de ellos. Con Lucas no tengo ningún problema, pero con Carla... la última vez que hablamos acabamos a gritos y no he vuelto a saber nada más de ella. Al menos, espero que estén bien.

- El otro día les vi. ¿Sabías que están juntos?. Iba por la calle a ver a tu abuelo a la residencia y me los encontré. Me saludaron tan simpáticos pero no me preguntaron por ti. Iban cogidos de la mano.

- Creo que no me sorprende. Digan lo que digan se gustan desde hacía tiempo pero nunca habían dado el paso. Me alegro por ellos. Lo que no entiendo es porqué han tenido que esperar a que yo saliera de sus vidas para tener una relación. Igual les estorbaba o algo- contesté molesta.

- No seas mal pensada, las cosas pasan cuando pasan. No sabes lo que ha ocurrido entre ellos, así que no saques las cosas de quicio, que nos conocemos- ya había activado el modo madre de nuevo- ¿Y Miguel?

-¿Qué pasa con Miguel?- me puse alerta.

- Nada, te pregunto si te ha llamado.

- No y no creo que lo haga.

- ¿Y eso por qué?- preguntó.

- Mira mamá, prefiero no hablar del tema.

- Algún día me tendrás que contar qué ha pasado entre vosotros. No me creo que no hayas hablado con él desde que te pidió tiempo. Que no soy boba.

No sé qué cable se me cruzó, pero aproveché ese mismo momento para contarle lo que había pasado el último día que nos vimos en el centro comercial. No te voy a engañar, se quedó bastante sorprendida.

- Espera, ¿dices que te pidió tiempo porque tenía miedo a dar un paso más en vuestra relación?

- Eso mismo. Según él, tenía miedo a que yo quisiera algo más serio, porque él dice que no tiene tan claro tener hijos o casarse.

- ¿Y no hubiera sido más sencillo hablar las cosas en vez de salir corriendo?- preguntó.

- Eso mismo le dije yo. Así que después de hablarlo me pidió que volviéramos a retomar la relación donde la habíamos dejado.

- Siempre le he tenido cariño, pero me estás dejando helada con lo que me estás contando. Parecía más listo el chico. Pues, ¿sabes qué? Creo que has tomado la mejor decisión. Vive tu vida y piensa lo que realmente quieres hacer con ella, no dependas de él.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jun 07, 2022 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

A UN PASO DE MI FELICIDADDonde viven las historias. Descúbrelo ahora