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Bueno, decir que no estaba ansioso por más acción, seria una total mentira

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Bueno, decir que no estaba ansioso por más acción, seria una total mentira.

Y su polla aun erecta y necesitaba no ayudaba a disimular las ganas que tenia de continuar con aquello que dejaron pendiente.

Bueno.

Con lo que Hoseok comenzó y el quería concluir.

—Entonces...—. Bacilo un momento, observando a su bello suegro sacar un cuchillo — Vamos a terminar lo que empezamos ¿No?—. Pregunto, mientras se colocaba frente  Hoseok, quien cortaba el postre sin dejar de mirarle.

Hoseok suspiro, apartando la mirada mientras tomaba un pedazo recién cortado para colocarlo en un plato.

—Pequeña mierda—. Sonrió Hoseok con coquetería— No te quieras pasar de listo, sientete afortunado.

Dijo con pesadez, llevando un dedo a sus labios para darle una lenta y muy atrevida lamida. Jungkook sintió su polla  palpitar necesitada, solo con recordar como esos labios habían estado sobre su polla hace unos minutos.

Joder, quería follarse otra vez esa linda boquita acorazonada.

—Afortunado de que Jung Hoseok te haya dado la mamada de tu vida—. Tan vulgar y obsceno.

Hoseok siempre había sido así, directo y sin altos, un doncel que conocía el doble sentido y lo utilizaba sin medida, a veces grosero como un albañil y otras muy educado como una damisela en épocas victorianas.

Todo lo perfectamente dulce y egocéntrico que resultaba ser.

Jungkook vio la sonrisa, esa sonrisa traviesa acompañada de hoyuelos que le enamoraban el alma.

Pero no era tonto, podía ver la excitación sobre esas orbes almendradas.

Y bueno, Hoseok ya podía sentir su entrada palpitar ansiosa y mojarse tanto como hace mucho no lo hacia. De hecho, llevaba ya bastante tiempo que no tenía contacto sexual alguno, casi cuatro años, pues Jimin lo había ligado únicamente a ser amo de casa y dedicar tiempo completo a sus hijos. Ah... y a serle infiel, cierto. Maldito egoísta y maldito idiota. Quizás en ese tiempo debio aprovechar y acostarse con Taemin, el hermano mayor de Jimin quien estaba dispuesto a colaborar. Pero, bueno, tiempo pasado es tiempo pisado.

Y su futuro estaba ahí.

Frente a él, con enormes musculos tatuados, cabello sedoso, apuesto y con una enorme verga entre las piernas.

Se habia concentrado tanto en su labor de padre y divorciado que tampoco habia hecho el intento de salir de esa zona, hasta que Jungkook hizo aparición.

Jungkook habia sido su sueño morboso y humedo. Ese que le obligaba a darse consuelo en su privacidad.

Dios, lo habia deseado tanto, tanto, desde el momento en que lo conocio, de hecho, aun conserva en su libro favorito (Imperfecto) una de las flores ya secas  que le habia regalado.

Junghope_ 🚫MI DELICIOSO SUEGRO🚫Donde viven las historias. Descúbrelo ahora