─ Johnny, espera, ¡ah!~─ el rubio besaba su cuello como fiera y Daniel trataba de separarlo un poco para decirle lo siguiente─ t-tenemos hijos, mis padres me matarán si me ven contigo─ logró decir entre jadeos.
─ No importa Danny, solo es algo de sexo, no creo que afecte mucho─ Daniel bajó la mirada y empujó al rubio para voltear e intentar salir del coche.
─ Abre la puerta─ ordenó y el rubio frunció el ceño.
─ ¿Qué es-?
─ Mira Johnny, no me parece justo que hayas peleado por la custodia de Robby después del divorcio, solo para que vengas y me quieras usar de nuevo─ explicó con molestia y el rubio sonrió burlón.
─ Bueno, si te parece, podríamos casarnos de nuevo─ comentó el rubio con una sonrisa pícara─ soy incapaz de vivir sin probar tu piel.
─ T-Tú, ¡¿hablas en serio?!─ preguntó el azabache con genuina sorpresa y el rubio asintió─ pero mis padres-
─ Ellos me valen una mierda Daniel─ LaRusso esta vez tomó la iniciativa y besó al rubio.
Su repentino movimiento, provocó que la radio se prendiese.
"Asesinato en los departamentos de Reseda, se dice que una mujer entró por odio a una familia ahí y asesinó a la familia LaRusso, exceptuando a una bebé que se encontraba ahí. Al final la mujer se suicidó".
Daniel se separó para comenzar a hiperventilar y Johnny prendió el coche.
─ Dejé a Robby en casa, vámos por Sam y los llevamos con mamá, ¿de acuerdo?─ preguntó Lawrence y Daniel asintió frenéticamente.
El rubio condujo a toda velocidad sin fijarse que un semáforo se había puesto en rojo de su parte y lamentablemente ambos fallecieron ese mismo día.
(...) 5 años después...
─ ¡Samantha!, ya llegó el señor Silver por ti─ la castaña se apresuró a empacar y al ver a una de las trabajadoras del orfanato, se despidió para correr a conocer a su nuevo padre.
Al llegar y mirar al hombre de coleta, sonrió.
─ Pequeña Sam, ¿estás lista para ir a tu nuevo hogar?─ la castaña asintió con emoción y el mayor tomó su equipaje para guiarla hacia el auto─ bien, ¿qué quieres hacer primero?, ¿te parece bien si vamos a comer?─ la niña asintió algo apenada por tener hambre y el mayor sonrió con ternura para acariciar suavemente la cabellera castaña.
Se metieron al auto y el mayor se encargó de ponerle el cinturón a la pequeña niña.
─ Señor Silver, ¿por qué me adoptó?─ preguntó la castaña y el mayor se sorprendió, pero decidió responder.
─ Porque eres la niña más dulce que he conocido, además... siempre quise una niña─ la pequeña sonrió y siguieron su camino a algún lugar para comer.
(...)
─ Robert, ¡ya despierta!, vinieron por ti─ le gritó su compañero de habitación y Robby abrió los ojos con una sonrisa.
─ ¡Si!, ¡gracias Kevin!─ se sentó en la cama para proceder a bajar la escalera de su litera.
─ Te deseo suerte viejo─ Robby rodó los ojos burlón y sacó su maleta que había preparado el día anterior.
─ Igualmente, ¡te extrañaré!─ al estar listo, abrazó a Kevin siendo correspondido y salió de la habitación.
Se dirigió con el hombre que lo había adoptado y cuando estuvo de frente, sonrió contento.
