SEIS

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ChanYeol miraba fijamente a BaekHyun nadar de un lado a otro en el lago, la primavera había llegado sin estragos y con ello, la mejor temporada de su pequeño pueblo, pero las noticias de la guerra seguían acabando con las esperanzas de un mejor futuro.

Al mismo tiempo, la ansiedad que lo carcomía por dentro, lo dejaba en noches enteras en vela, mirando a Baek dormir a su lado, cómo si los males del mundo nunca pudieran alcanzarlo estando tan lejos de su lugar de nacimiento.

-¡ChanYeol!- Baek agitó sus manos, sacándolo de sus pensamientos -¡Ven!-

-No me gusta el agua fría de este lago- le dijo con una sonrisa y Baek haciendo pucheros, se acercó un poco más.

-¡Anda!- las súplicas como siempre, funcionaban, entonces se pusieron de pie, abriendo su camisa. No estaba seguro de cuando había sido la última vez que alguien lo había visto con poca ropa, probablemente había sido hace mucho, por eso estaba nervioso.

BaekHyun ahogó un suspiró, ChanYeol era un hombre mayor que él, pero eso no quería decir que más abatido por el tiempo. Poseía un fuerte cuerpo, saludable y que por tanto trabajo que hacía en su casa y en su pequeña tienda, estaba trabajado, una piel poco bronceada debido a que no parecía mostrar mucho todo el tiempo, sin embargo, él parecía que había tomado color y engordado lo suficiente para verse más saludable.

ChanYeol entró poco a poco el agua una vez dejo sus ropas dobladas al lado de la canasta que habían llevado para el almuerzo. BaekHyun sonrió nadando para acercarse a él.

-No sé cómo te puede gustar esto, está helada- dijo ChanYeol, sumergiendo su cabeza y cabello para que así, tal vez la temperatura no lo afectará tanto. El menor, se abrazó a su cuello, acercándose hasta pegar su torso desnudo contra el de él, proporcionando otro tipo de calidez.

-Es bueno para la piel, evita que te arrugues-

-En ese caso, habrá que venir más seguido- Yeol picó los labios de Baek con los suyos, haciéndolo sonreír y que se sostuviera más cerca. Era lo increíble lo hermoso que su rostro podía verse de cerca, sin imperfecciones, sin falta de color como cuando había llegado hasta él, simplemente estaba viendo lo mejor de él. -¿Puedo decirte algo?-

-Depende que tan bueno o malo sea- ChanYeol había estado pensando en eso mucho tiempo, a lo largo de esos meses y la pecaminosa relación. Quería convencerse que no era un deseo carnal simplemente por esos meses en soledad, quería estar seguro, pero al ver a BaekHyun simplemente haciendo cualquier cosa o tarea, su corazón se agitaba de la misma manera que cuando su rostro sonrojado y desesperado, pedía por más. -¿Es algo malo?-

-Estoy pensando en irnos de aquí- el rostro de Baek demostró todas sus dudas, ChanYeol sabía que debía ir más allá -Me refiero a dejar el país, irnos a otro sitio, donde las cosas no sean tan malas como aquí-

-Oh, entiendo ¿Qué pasa con Joy y sus padres?- Esa era la parte complicada. -Es que...nosotros no...-

-¿No tenemos una relación formal?- la pregunta hizo que BaekHyun sintiera ese nudo en el pecho que siempre sentía si lo pensaba con cuidado. -La idea de irnos es justamente hacer esto más formal, Baek-

-¿Qué quieres decir? No soy tonto pero...necesito saber si es lo que estoy pensando o ya me ahogué y estoy alucinando de camino a la luz- ChanYeol sonrió, alejando el cabello de la frente del menor para que su rostro quedará al descubierto por completo, en la tranquilidad del sitio, con el sonido del agua levemente agitada, el aire pasando por las ramas de los árboles, el canto de las aves, para que su pureza resaltará aún más el momento.

-Quiero que nos quedemos juntos, BaekHyun- el menor parpadeó incrédulo, aun sosteniéndose de sus hombros. -No solo ahora, cuando esto termine y el tiempo que venga después de eso-

TaciturnoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora