A la mañana siguiente, Tomas despierta a Marta.
-despierta, despierta! mira Marta, mira! los reyes me trajeron un regalo.
Marta sonríe.
-Ábrelo.- dice levantándose de la cama.
Tomas se acerca, lo toma en las manos, poniéndolo encima de la cama de Marta, y lo abre. Marta lo mira. Está ilusionado, contento. Cuando ve que es un coche teleridijido, salta de amoción.
-Marta, puedo jugar con el? Puedo? Porfa.
-claro Tomas. Hago el desayuno y lo tomamos aquí.
-gracias. Pero... Porque a ti no te trajeron un regalo?
-porque yo ya lo tengo.
-y que tienes?
-yo lo que pido siempre es tenerte a ti. Y te tengo. Tomas desayunamos, nos vestimos y vamos a ver a papá vale?
-si si si.
-pero no se lo puedes decir a mamá.
-Marta, ella no es mi madre-dice.
Marta sonríe.
-venga, juega un rato.
Tomas coje la caja y la pone encima de su mesita. Agarra el mando y dirije el coche por la habitación. Mientras, en la cocina, Marta prepara el desayuno. Coje una bandeja, y pone el colacao, ya caliente, y las galletas. Abre la Lacena de arriba de todo, y, apartando algunas cosas, coje el zumo de Tomas. Marta resopla. Odia tener que esconder las cosas de Tomas para que su madre no se las coma. Va a la habitación.
-venga. Aparca el ferrari y sienta en la cama.
Tomas obedece. Se sientan y toman el desayuno mientras hablan. Cuando terminan, se visten y meten el coche en su caja, y después en una bolsa pequeña.
-vamos. Coje tú abrigo.
Salen. Antes, Marta mira si su madre todavía duerme. Si. No se porque mira, si total no le importa. Pero bueno. Ella lo hace de todas formas. Ya en la calle, Marta coje su móvil y llama a su padre.
-hola papá.
-cariño! Que tal?
-bien. Oye podríamos quedar?
-por supuesto. Pero no me lo preguntes. Venís hasta casa?
-vale.
-papá, papá! Los reyes me trajeron un coche teleridijido!-dice Tomas ilusionado.
-como me alegro mi vida. Era lo que querías. Ahora lo veo y jugamos vale?
-vale papá.
Se despiden y cuelgan. Marta coje a Tomas de la mano y se dirigen a casa de su padre. Vive unas manzanas más lejos que ellos, así que van siempre que pueden. Cuando llegan, timbran. Les abre. Cuando suben al tercero ya les está esperando en la puerta.
-papá!-tomas va corriendo hacia el y le abraza.
Marta sonríe. Ella también le abraza. Entran, y Tomas le enseña el coche. Manuel señala el árbol.
-a ti también te trajeron regalos?-dice Tomas.
-son para ti pequeño.
Tomas va corriendo hacia el árbol y mira los regalos. Hay tres. Los coje y los lleva al sofá.
-uno es para tú hermana. Supuse que no te habías comprado nada-le susurra a Marta.
-gracias papá-y le da un beso.
Marta lo abre. Cuando lo ve no se lo puede creer. Un móvil. Y táctil! El suyo es de los viejos, de esos con los que solo puedes llamar y mandar mensajes. Es un samsung galaxy ace 2. Era muy bonito. Lo coje y lo pone a cargar. Sabe como funciona, porque veía a sus amigas y a su padre.
-gracias papá.
-es de prepago, porque yo no puedo pagarte todos los meses. Está pagado ya el móvil. Tiene veinte euros cargados.
Marta le da un fuerte abrazo.
Tomas coje su regalo y se lo enseña a Marta. Uno, es un abrigo de cars, muy bonito y abrigoso. Y el otro, es un pijama de batman, y cuando te lo pones, al estirar los brazos, parece que tiene alas. Además de eso, en la misma caja, hay un peluche de batman.
-bien!-dice Tomas-los reyes me hicieron caso en todo.
Marta y Manuel se miran, sonriendo.
-quedaros a dormir.
-si porfa si.
-vale.
-vamos a la calle?
CONTINUARÁ...
