13.

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Capitulo 13.

La semana ha sido terrible, por más de que no halla vuelto a mis clases de conducción no dejó de pensar en el, en Matias. Y aparte he tenido que soportar a Sophia todo el tiempo, esperando a que la perdone, suficiente hice con escucharla ¿no?
No me contó nada que no supiera, espero que no se siga viendo con Edwuard, lo bueno es que ninguno se ha ilusionado. De pronto sea hora de perdonarla, pero no de volver a salir con ella.

El sábado por la mañana me despierto a las 10am, siento un vacío horrible en el pecho, es increíble como en tan poco tiempo cambia todo, me he quedado sin "amigas", sin novio, aunque bueno, novio no tengo hace mucho, Logan ha cambiado del cielo a la tierra y a duras penas me habla, no entiendo a que se debe su cambio, pero tampoco quiero averiguarlo. Pero lo peor de todo, es que perdí a mi madre, seguramente ella me diría que hacer, pero no esta, tengo que aprender a llevar mi vida sin ella. Aparte debo de pensar en donde voy a estudiar psicología, siempre me han gustado las carreras relacionadas con ciencias de la salud. Nunca me había detenido a  pensar en mi futuro.

Mi padre llega de trabajar a las 2pm, es raro que halla tenido que trabajar un sábado, llega con una caja y supongo que es mi almuerzo y asi es, término de almorzar comida china y prendo mi portátil para comenzar a mirar las universidades cercanas a casa ya que me debo de mudar allí y no quiero alejarme tanto de casa.
Encuentro varias opciones entre esas University of Notre Dame, Wake Forest University, Brandeis University, Yale University, entre otras muchas, tal vez lo mejor sería alejarme de casa, igual todas las que me han gustado quedan a Kilómetros de mi casa.
Me dan las 9 mirando los programas que ofrecen las universidades, cuando siento que los ojos no me dan más bajo a la cocina, caliento leche, la subo a mi cuarto y por fin logro dormirme temprano un sábado.

—–––

- Bueno ¿quien habla? - el sonido de mi celular me saca de mi sueño profundo, y como puedo miro la hora que es
¿las tres de la madrugada? ¿quien me llama a esta hora?

- Soy... Soy... yo.   -   en cualquier lugar y bajo las circunstancias que sean reconocería esa voz.

- ¿quien habla? No escuchó bien.  -  lo mejor es hacerme la boba para estar segura de que si es el.

- ...heeee. Soy yo Vico, Matias  -  esta tan borracho que hasta aquí le siento el olor a alcohol.

- ¿Que quieres? Estaba dormida.

- Disculpame, no se a quien acudir en esta situación.

- ¿donde estas? ¿de que situación me hablas? ¿estas bien?  -  no entiendo porque me preocupó por el, debería colgar y que busque a una de sus novias.

- En donde, no te importa.

- Seguiré durmiendo.
Y le cuelgo, no voy a trasnocharme por alguien que me trata como si fuera lo peor que ha pisado la tierra.
Mi celular sigue sonando unas ocho veces, cuando deja de timbrar me preocupo y le devuelvo la llamada al número que ha marcado.

- ¿que quieres Victoria, restregarme tu vida perfecta?  -  De que esta hablando Matias, eso no tiene sentido.

- Soy una imbécil, no se porque me preocupó por ti, ni siquiera se porque me odias tanto. Y cuando quieras abrir tu bocota di cosas con sentido, mi vida no es perfecta. Tarado.

- ¿te preocupas por mi? 

- Si, hace diez segundos, pero ya no.  Me importas una mierda.

- ¿podrias venir por mi? Por favor, prometo no volver a llamarte

- ¿a donde quieres que valla por ti?

Me dice del sitio donde esta, no tengo ni idea donde se ha metido así que despierto a mi hermano para que me lleve. Me demoro media hora rogándole hasta que por fin se levanta de la cama y se coloca una sudadera, un buso y unas zapatillas deportivas.
Nos subimos a mi auto y le digo para donde vamos.

- Espera, espera ¿quieres que te lleve a las carreras?

- ¿en esa dirección quedan las carreras?

Mi hermano asiente y yo me revuelco en el asiento de copiloto pensando en todo lo que le puede pasar a Matias conduciendo borracho y recuerdo a Adele mi madre, al taxista que la estrello, aquel hombre que me la quito. 

- Vicky, ¿por que vamos a allá y por que estas llorando?

Si le cuento a mi hermano, lo más seguro es que quiera matar a Matias, mi familia le tiene cierto odio a los conductores borrachos y creo que tenemos motivos de sobra, pero no puedo decirle la verdad.

- Un amigo de mi escuela me ha rogado que lo acompañe. Estoy llorando porque se me metió algo al ojo.

- Pero no es para correr un auto ¿o si?

- ¿crees que soy tonta? No se conducir y ya me voy a poner a correr en una cosa de esas clandestinas.

- Menos mal, porque tu no imaginas cuanta gente muere en dichas carreras.

¿en serio tenia que decir eso mi hermano? Ahora tengo los nervios al cien que digo cien al doscientos. Quiero llegar ya, quiero ver que Matias esta bien, ya no me interesa si esta ebrio o no.
Mi primo tenía razón, estoy peor de lo que el imaginaba, estoy muerta por Matias, por alguien que conozco hace tres semanas ¿como es posible que me interese alguien que me trata tan mal? Aunque bueno, dicen que así es el amor... de un momento a otro te enamoraste, para mi el amor era una cosa que nace del corazon, que ni siquiera te das cuenta en que momento llega , y al notarlo ni lo entiendes...¿por que pasan las cosas como pasan cuando tienes esta extraña sensación? Terminas nunca entendiéndolo ni pudiéndose lo explicar a otra persona, eso es para mi el amor, como si se expresara en cada persona de manera distinta y nadie pudiera entenderlo ¿yo que tengo en común con Matias? Nada, al parecer mi significado de amor es el equivocado.

Sobreviviendo al Destino. [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora