Capítulo 23

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"El escepticismo suele ser el resultado de negarse a ver aquello que la mente no está preparada para comprender, olvidando que para ver, también es necesario creer, mirando a través de los ojos del alma."

- Nawja Wilde

El tic tac del reloj de pared de mi habitación era lo único que impedía que el silencio se asentara por completo haciendo de ese momento algo mucho más aburrido, llevaba tanto tiempo sentada estudiando que los números y letras plasmados en el libro comenzaban a carecer de sentido ante mis ojos y el hecho de que Ciaran estuviera pasando de un lado al otro las páginas del libro en el que me apoyaba para recordar las fórmulas definitivamente no me era de mucha ayuda.

—¿Podrías dejar de hacer eso? Estoy tratando de estudiar.—Reclamé con hastío mientras detenía el pasar de las páginas.

Hacer garabatos con los resaltadores de colores no es estudiar, es auto-engañarte cínicamente fingiendo que estudias para después poner cara de sorprendida cuando te entregan un examen aplazado.—Sentenció con ironía.

—Es mi forma de liberar estrés, si estoy estresada no puedo estudiar, pero a la vez no estar estudiando me estresa más—Justifiqué en mi afán por no darle la razón al tiempo que garabateaba un espiral en mi cuaderno con el resaltador azul—Llevo toda mi vida esperando el momento en que mis habilidades para poder calcular la sombra que proyecta un edificio en la avenida sirvan de algo.—Me quejé.

Eché un vistazo a mi temario mientras comenzaba a contar por enésima vez las hojas que me faltaban para terminar el tema en el que me había estancado horas atrás, a veces solía pensar que todos habían encontrado un camino a excepción de mí, yo todavía me sentía flotando en la nada con el propósito de seguir existiendo y la esperanza de llegar a alguna parte, como el rompecabezas que solía armar cuando era niña al que se le había perdido una pieza, pasé tanto tiempo buscando la parte faltante hasta que finalmente me hice a la idea de que ese pequeño hueco permanecería vacío siempre, tal vez en ocasiones eso ocurre con las personas en ciertas circunstancias de la vida, tenemos que aprender a seguir adelante aún sin algunas piezas e incluso tal vez acostumbrándonos a perder más en el camino. 

Pasas más tiempo hablando y quejándote de cuánto tienes que estudiar, del que realmente pasas estudiando—Replicó, interrumpiendo mi momento filosófico.

—No es verdad—Alegué mientras me recogía el cabello en un moño despeinado al tiempo que jugueteaba con el lápiz en la boca—He avanzado mucho en los últimos días.

Díselo al temario pegado en la pared que tiene tachado un solo tema.

—¡Olvidé tachar el resto, he avanzado casi la mitad!—Comenté, restándole importancia.

Ajá. La mitad del segundo tema—Obvió sarcásticamente—Puedes engañar a quien quieras menos a mí que llevo aquí todo el día viendo cómo te levantas cada cinco minutos porque se te ocurrió una nueva excusa para evadir tus responsabilidades.

—Es bueno tomar pequeños descansos y justo ahora acabo de dar inicio a uno de ellos—Afirmé mientras me ponía de pie, caminando en dirección a mi cama para dejarme caer sobre ella.

Tu última semana ha sido un descanso ininterrumpido—Alegó.

—Dice la persona que no tuvo ni una sola asistencia en la clase de deportes—Argumenté sarcásticamente, mirando el techo de mi habitación.

No me gusta perder el tiempo en cosas inútiles—Respondió—Pero ahora me arrepiento de no haber asistido a deportes para ver en primera fila las consecuencias de tu nula agilidad cuando practicaban deportes de pelota.

Mi vida a través de ti  [COMPLETA ✓]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora