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Días después. Me toca presentar el reporte de la semana junto con Valac Clara.  Quizás sea por las vividas escenas que no me dejaron dormir en todas las malditas noches o el hecho de que estoy parado frente a su oficina a segundos de verlo que me siento ansioso. Tengo que calmarme no es la primera vez que me encuentro con el. ¡ahh! esto es una mierda.

— ¿Te sientes bien,Azu-azu? — pregunto Valac.

— Claro que me encuentro bien, todo al contrario de ustedes.— respondí.

— jejeje puede que nos hayamos pasado un poco, pero fue muy divertido.

Valac es una excelente demonio; con la cual comparto la mayor parte del tiempo, pero aveces puede ser muy pesado y molesto estar con ella. Aun así la considero alguien importante.

— si,si. Lo tu digas.

— jejeje vamos,entremos.

No puedo evitar sentirme nervioso. Es la primera vez que me voy a encontrar con Iruma-sama después de esa noche. Me recorre un escalofrío por el cuerpo al recordar como me apretaba con sus manos el cuello, la sensación de su lengua pasando por mi abdomen y llegar a mi pecho para chupar de ellos, y también cuando.....¡tks! lleve mi mano hacia mi corazón, ya que este había comenzado a latir con velocidad, tanto que podía sentir como iba a salir por mi garganta. ¡Mierda! contrólate Asmodeus  ya no eres un demonio que no pueda controlar sus impulsos. Respire profundo para controlarme y así impedir que ocurran accidentes no deseados.

— No puede reconocerme de todos modos. ¿verdad?. — murmure.

Recuerdo que me habían puesto maquillaje y peluca; cosas que nunca había usado, ademas de usar un velo para ocultar la mitad de mi rostro. Así que es mas probable que iruma-sama no me recuerde. Con eso en mente puedo estar un poco mas tranquilo, aunque no puedo relajarme por completo.

— por favor que me haya olvidado.

Entramos a su oficina y unos sirvientes demonios nos saludaron con la cabeza cuando se retiraron. Iruma-sama se encontraba con la espalda encorvada sobre el escritorio revisando algunas carpetas. Por un momento levanto la vista cuando entramos. Sus ojos se encontraron por un breve instante con los míos y pensé que me había reconocido; pero volvió a su actividad de siempre.

— Respira con calma Asmodeus. — me murmure 

¿Que mierda esta pasando conmigo? creí que temblaría de miedo al tenerlo enfrente, que no podría ni siquiera respirar; pero es todo lo contrario. Solo puedo recordar su respiración grave en mi oreja, aquellos gemidos que salían de mi boca como respuestas a sus acciones, el roce de su piel con la mía y como el calor de nuestros cuerpos aumentaba, y el como me tocaba durante toda la noche. Esa mierda debe de ser la causa de que mi corazón este latiendo sin cesar.

— ¡tks!

Al ver su cara todo volvió a revivirse. ¡Demonios! no puedo creer que el hombre que tengo al frente, tan frío y despiadado, sea el mismo que jadeaba a mi lado. Siento como el calor de mi cuerpo va en aumento,mis orejas deben de estar rojas  y algo empieza a querer crecer. ¡ugh!.. Quiero llorar. Estoy condenado. Pero no es momento para hacerlo, así que trato desesperada mente de frenar mis lagrimas. De repente escucho que Clara es interrumpida por iruma-sama y este empezó a hablar.

— Es tarde pero, ¿se lo pasaron bien en el festival?

¿Qué? era una pregunta que nunca esperaríamos que saliera de la boca de iruma-sama. ¿Por qué ahora? siempre había mantenido una distancia hacia nosotros todos estos años. Y ahora se le ocurre preguntar. ¿Que mierda pasa por su cabeza?.

— Me la pase estupendo, todo estuvo divertido. Fue gracias a su amabilidad que todo saliera magnifico su majestad.— respondió Clara. 

—Nadie va a creerte si lo dices con esa estúpida expresión — le murmure a clara.

Valac había respondido con una estúpida sonrisa es su rostro,solo le faltaba que empezara a lanzar caramelos y todo se terminaría. Pero a iruma-sama pareciera no importarle, así que pude suspirar de alivio y descartar el derramamiento de sangre que pudo haber ocurrido. 

— ¿ Y tú?

Esta vez iruma-sama me estaba preguntando directamente. ¿Que mierda quieres que diga? Al principio estuvo bien,pero luego me emborrache y termine en la cama con su majestad. Ahora tengo miedo de que me descubra y termine perdiendo la cabeza. ¿ Eso quiere que le responda?.

— No lo sé. No asistí al festival su majestad. — respondí

Puedo sentir la mirada de incertidumbre que tiene Clara sobre mí. Ella es la única aquí presente que sabe que estoy mintiendo. Agradecí a todos los grandes demonios que Valac no allá dicho nada y mantuviera la boca cerrada. 

— ¿sí?.. Ya veo.

Iruma-sama se levanto de su asiento,rodio su escritorio para luego apoyarse sobre este y cruzar sus brazos. Sus ojos parecen recorrerme el cuerpo vorazmente. ¡carajo! creo que terminare colgado a este ritmo. Luego levanta uno de sus brazo llevándolo hasta su boca y ocultar una picara sonrisa con la mano.  Es mi fin.

— ¿Qué les pareció la noche del festival? — suelta iruma-sama.

— ¿La noche? — pregunte frunciendo el ceño. — 

—Para ser preciso. De un par de demonios que se conocieron en el festival,que intercambiaron miradas y pasaron la noche en una posada juntos.

Mi mente quedo totalmente en blanco. ¿¡Qué mierda!?.. lo descubrió, ahora puedo sentir como una soba rodea mi cuello. Un sudor frió recorre por mi espalda.

— ¿¡Que cara...— clara me interrumpe

— No veo el problema, aun mas si ambas partes están de acuerdo.

¿Qué pasa aquí? era una respuesta totalmente inesperada,especialmente viniendo de la boca de la tonta de valac. En este momento te has convertido en mi salvadora. Pero la mirada de iruma-sama seguía puesta sobre mí.

— Yo.. — vamos asmodeus inventa alguna respuesta. — Creo que fue el destino quien los cruzo en sus caminos. — que pendejada mas idiota acabo de soltar, no se lo va a tragar.

— ¿Destino? — sus ojos azules tiene un extraño brillo ante mi estúpida respuesta.

— Si. Creo que fue cosa del destino que ambos demonios se conocieran y que sus cuerpos terminaran respondiendo ante su encuentro.

— Ya veo.

Iruma-sama termino su interrogatorio con una extraña sonrisa. Volvió a su asiento y continuo revisando los papeles pendientes que tenia sobre el escritorio. Mientras que yo me pase todo el día aterrado cada vez que él abría su boca esperando que no preguntara nada mas.

El día continuo con normalidad, seguí a iruma-sama a donde quiera que vaya haciendo mi trabajo. Aun así era lógico que cometiera algunos errores. Si valac no hubiera estado conmigo estoy seguro que mi cabeza hubiera rodado por los pasillos hace tiempo ya. Iruma-sama aunque no dijese nada tenia su molesta mirada puesta sobre mí. Era jodida mente molesto.

Y de este modo pasaron los días. Continué negando cada pregunta o comentario que tiraba Iruma-sama al respecto. Había momentos en los que me sentía acorralado y abrumado por el miedo de ser atrapado por él, por lo que mi cuerpo comenzó a sentirse pesado. A este ritmo firme de negación era obvio que terminaría por olvidarme y ese seria mi momento para que vuelva a mi vida normal. Desde entonces ya ha pasado un mes.


666 [Iruazz]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora