¡Me gusta Señor Lee!

✳️Capítulo 15✳️

Hyungwon entró a la casa con una enorme sonrisa y bolsas con pollo frito. Dejó su mochila y zapatos en la entrada yendo directo a su habitación donde muy seguramente Kihyun lo esperaba.

-¿Y esa cara de idiota?

-¡Hola Kiki! ¿Cómo está el amigo más hermoso y divino del universo? -exclamó abrazando al bajito que salía del baño. -Te ves radiante.

-Y tú te ves como un completo estúpido -espetó enrollando la toalla en su cintura.

-También te quiero -dijo sin borrar su sonrisa.

Se sentó en la cama comenzando a desnudarse para ponerse su pijama de ranita.

-¿Dónde estabas? Son casi las nueve de la noche -cruzó sus brazos golpeando el piso con un pie. -Tienes suerte que tu madre no haya llamado. Últimamente andas muy descarriado...

-Estaba con Hoseok.

-Otra vez con ese -rodó los ojos abriendo las bolsas de comida. -Al menos cumpliste tu palabra.

-¿No vas a preguntarme por qué estoy tan feliz?

-No.

El pelinegro menor hizo un puchero al terminar de ponerse una sudadera inmensamente grande, no había encontrado su pijama. Con las lágrimas de cocodrilo, el puchero, las mejillas redondas y el hooddie rosa Won se veía muy tierno y Ki no tuvo otra opción más que cumplir con lo que quería.

-¿Por qué estás tan feliz? -Llenó sus mejillas de pollo acostándose en la cama pues si la historia era muy aburrida tendría un lugar seguro para dormir.

-Le dije a Hoseok que mi madre se molestó por besarnos -abrazó sus rodillas sin dejar de sonreír. -Y él en lugar de asustarse o terminar conmigo.... ¡Quiere hablar con mis padres! ¿¡Puedes creerlo!?

-¡Genial! -Ki fingió emoción antes de comer otro trozo de pollo.

-Eres el peor amigo... -rodó los ojos poniéndose de pie.

-Hey, Hyungwon.

Won salió de la habitación siquiera decir adiós. El castaño lo siguió llamando por los apodos más tierno pero no funcionó. Hyungwon se lanzó al sofá de dos plazas ahogando un grito en el cojín.

-Perdóname. Solo estaba jugando...

-Vete a comer pollo -murmuró. -Es lo único que te importa.

-Tú me importas más.

-No soy Hyunwoo para que me engatuses con tus frases de internet.

Ki se sintió un poco herido pero lo dejó pasar. Con mucho esfuerzo levantó el torso de Won ocupando el espacio vacío. Peinó la cabellera oscura susurrando la canción de cuna que siempre calmaba a Hyungwon esperando a que funcionara. Y así fue. Won se sentó con un semblante triste.

-¿Por qué eres así conmigo? ¿En qué momento nuestra amistad cambió tanto? -jugó con el borde de su sudadera rosa mirando directamente los ojos color miel de Kihyun. -Yo daría la vida por ti. No estoy chantajeándote pero siempre he estado junto a ti cuando nadie más lo hace. ¿Tan difícil es hacer lo mismo por mí?

-Es difícil -murmuró.

Wonnie bajó la cabeza asintiendo a duras penas.

-Es difícil porque te amo -confesó con firmeza.

-También te amo...

-No Hyungwon, yo en verdad te amo.

Kihyun se sentó recto acunando el rostro de Hyungwon, lo acercó a él quedando a solo centímetros de rozar sus narices. Con el ceño fruncido Won trato de separarse pero Ki afirmó más el agarre.