Irresistible ~ SakuIno ~

Cinco 💝

Sakura tenía que posar para Ino mientras ella leía o trabajaba en su computadora. A su vez debía llevarle todo lo que la rubia le solicitase.

Se sentía tan estúpida haciendo aquello que la frustraba, debido a que ella no había dedicado noches y días enteros a su carrera universitaria en Uzu para acabar siendo la modelo tarada de Ino.

Apretaba los labios de la frustación en esos momentos cuando la rubia, al verla así le dijo:

- Relaja el semblante Sakura y procura mostrarte más hermosa de lo que puedes ser.

La pelirosa cerró los ojos sintiendo que si aquello se prolongaba demasiado seguramente enloquecería. Pero obedeció a Ino, ya que también le gustaba saberse contemplada por ella.

Estaban en el jardín de la mansión de Ino cada una sobre una silla. Ino tenía su noteboock con ella, ya que había ciertos detalles de la empresa que ella no podía ignorar, por más que se encuentre de vacaciones.

El sol era cálido esa tarde de verano. Sakura tenía puesto un vestido rojo que apenas cubría sus muslos y zandalias rojas tacos bajos. Su larga cabellera rosada cubría sus hombros.

Ella tomó una copa de refresco pero cuando quiso beber, Ino volvió al ataque. Usando un tono de voz molesto exclamó:

- Por dios Sakura ¿dónde quedó tu elegancia? - la aludida la miró sorprendida - Una dama fina, elegante y hermosa bebe con delicadeza y sensualidad. O bebes así o directamente no beberás nada ¿entendido?

-¿Qué? ¿Hablas en serio Ino?
- Absolutamente Sakura, esas son las reglas que toda amante debe seguir - la pelirosa la miraba asombrada en verdad - Así que atente a las reglas ¿de acuerdo?

- Yo....
- Recuerda que tienes prohibido decir no y si pronuncias esa palabra o alguna similar tendré que castigarte y creeme que no te gustará. ¿Estamos?

- Estamos
- Dime Yeas, my lady. Suena muchisimo más excitante, y como seguramente recordarás Sakura, amo los detalles.

Sakura sentía que iba a explotar de furia, roja de ira tuvo que morderse la lengua ya que era conciente del tipo de castigo a la que seguramente la sometería la muy maldita de Ino.

-Sí ¿cómo olvidarlo Ino? Adoras los detalles.
- Esfuerzate si quieres beber, y cambia de pose, me aburre verte en la misma posición.
- Yeas....yeas, my lady.

Roja se ira Sakura se quitó las zandalias y estiró las piernas mostrandose mushisimo más sensual de lo que ya estaba, además se desprendió los dos botones del vestido que llevaba puesto, justo para dejar al descubierto sus senos.

Ino no pudo seguir concentrandose al verla hacer aquello. Sakura era una chica muy obediente y hermosa. Maldita sea ¿por qué demonios se tuvo que ir así hace seis años traicionando aquel amor que las unía?

Si bien no tenía respuesta alguna a eso, lo que sí empezaba a tener era su hermosa venganza teniendola en extremo vigilada.

Al verla beber la limonada con tal delicadeza, la rubia empezó a excitarse al punto de no poder seguir así. Por lo tanto apagó la computadora y se acercó a esa preciosa pelirosa con hambriento deseo.

Sus miradas se cruzaron en un silencioso instante, hasta que Ino se colocó sobre de Sakura quien yacía recostada ahora.

-¿P-Pero qué....?
- Estás aquí en calidad de amante Sakura ¿recuerdas?
- Yeas, my lady
- Entonces a disfrutar.

La rubia la beso mientras masajeaba sus senos, sientiendo que ella la rodeaba con sus brazos respondiendole con intenso deseo. Sakura siempre fue coqueta y seductora.

El atardecer llegó pronto sorprendiendolas a ambas bailando la danza del amor tras haberse olvidado de todos y de todo.

El problema radicaba que en ambas el corazón se estaba involucrando más de la cuenta para pesar de las dos.

Ino fue acariciando el cuerpo de Sakura incomodándola una poco aunque a la rubia no le interesaba aquello.

Ino besaba el cuello de Sakura mientras le sujetaba las nalgas para presionarla contra su propio cuerpo. Aquellas en verdad serían una magníficas vacaciones para la rubia.