Irresistible ~ SakuIno ~

Siete 💝

Sakura presentó la renuncia en la empresa y compró un pasaje de avión rumbo a Uzu donde planeaba quedarse definitivamente. Lejos de esa traidora infiel de Ino y sus mentiras. Ya tuvo suficiente con ella.

No pensaba volver a Konoha nunca más, aunque se le rompiera el corazón. Estaba harta de ver a Ino en los brazos de Karin maldita sea. Si esa rubia no planeaba ser suya quedándose a su lado para siempre, nada tenía ya que hacer en Konoha.

Con lágrimas en los ojos aguardaba en el aeropuerto mientras recordaba lo feliz que había sido con Ino la noche anterior al punto de haberle creído una vez más. Hasta pensó quedarse a su lado.

Que idiota había sido en verdad al creer en una infiel como ella. Después de todo Ino siempre fue coqueta y se destacó por tener mucho dinero de su familia.

Eso la hizo creer que podía hacer lo que quiera sin importarle los sentimientos de los demás. Sakura se sentía frustrada, en verdad había creído que Ino la amaba maldita sea. ¿Cómo pudo equivocarse tanto?

Las lágrimas humedecían su rostro con gran pesar. Sakura siempre fue muy sensible, por eso creía en el amor. Quizás su problema sea que lo buscaba en personas de su mismo sexo.

A lo mejor deba empezar a experimentar con el sexo opuesto. Pero a ella le daban asco los hombres, nunca soportaría ser besada por alguno. Por muy hermosos que sean.

No tenía que engañarse, estaba condenada a permanecer sola por siempre. Cuando llegó su turno tomo su bolso y se encaminó hacia la salida.

Cuando cruzó sintió que su alma se partía en dos, se sentía peor que la primera vez en que se hubo marchado de Konoha.

Nunca dejaría de amar a Ino, nunca. Pero eso no significaba que deba soportarle su infidelidad. Eso jamás podría hacerlo ya que Sakura era en extremo posesiva y deseaba que su pareja sea exclusivamente suya.

A lo mejor se estaba equivocando en eso pero ella era así. Cuando el avión partió, la pelirosa tomó un calmante para dormirse y evitar seguir pensando en Ino y en su dolorosa infidelidad.

Seguiría el resto de su vida con narcóticos y quizás asi obtenga el valor para suicidarse más adelante.

La pelirosa había acabado con toda esperanza de un futuro junto a Ino y sin esa rubia sentía que no valía la pena vivir. Pensando aquello se durmió profundamente mientras el avión se perdía en las altas y lejanas nubes.