♧♡ ¡Enamorándome de un Ángel! (Lector X Azazel x Harem) ♡♧

Capitulo 5.- Apuestas de vida.

Era el momento, las cartas estaban en la mesa, el alcohol se sentía en el aire y las miradas se cruzaban entre ambos.

— Viéndote más pareces más un jugar de estrategia que uno  casual... —

La chica demonio que en ese momento desconocía su nombre real parecía estar fija en mover sus cartas y armar una buena jugada contra mi.

— Muy bien, sabes... El póker es más bien un juego de estrategia por turno que solo azar — el rubor se dejaba apreciar en las mejillas de la dama que al instante se me asomó a hablarme al oído — Este tipo de juegos me ponen de un humor muy especial ~ —

Cayendo en un momento de debilidad esta logro ver mis cartas ganando la primera ronda de tres con un fuerte combo.

— Ella usa métodos cuestionables pero debo decir, es buena en esto — narraba Azazel apoyando su brazo en mi hombro con total confianza mientras grababa nuestra partida.

— Será mejor que te rindas, muchacho — decía Modeus mientras ambas intentaba observar  la segunda ronda.

En esta ocasión contuve mis expresiones logrando beber un poco para endurecer mi carácter respirando profundamente y concentrandome.

— Sabes, si decides acompañarme podría conseguirte  una consola de juegos de tu tipo, claro, con algo de tu apoyo monetario —

La demonio pensó la idea por un momento moviendo la boca con duda y tomando otro sorbo de la botella. 

— Los humanos son sencillos en este estilo, solo saben divertirse y eso lo respeto — la partida paso rápida y la victoria fue mía.

— Estoy buscando más demonios para crear el Harem, ¿Sabes donde podría estar otra de ustedes? —

— Conozco a una y no le gusta que la molesten pero será mejor tenerte aquí trabajando —

La situación me mantenía aferrado al asiento mirando con detenimiento mis cartas y pensando mientras todo se preparaba para lanzar todo por la victoria. Ella solo bebía la botella confiada.

— 1, 2... ¡3! — ambos mostramos las cartas a la vez notando que la victoria se levantó a mi favor.

Frunciendo el ceño con decepción la chica solo suspiró aceptando el trato pero con una mirada de respeto extendió su mano.

— Malina, ese es mi nombre, eres un chico afortunado, no muchos logran ganarme una partida de poker —

— ¿Como afirmas eso con tanta calma?  — preguntó Azazel sonriendo de emoción al saber que podría obtener más información de esta demonio.

— Solo digamos que la suerte siempre está de mi lado en estos juegos — su expresión gruñona volvió rápidamente sus murmurando y tomando su botella para salir del casino.

En el camino mientras intentaba enviar un texto a Pandemonica justificando el café que no pude entregarle siento una textura frotándose en mi antebrazo. Era suave, como tocar un globo pero más cálido y suave, al instante supe de que se trataba.

— Ayudante, gracias por conseguirme más demonios para investigarlos — su antes curiosidad por mi parecía haber cambiado a un tipo de aprecio demasiado difuso o diluido — Modeus me comentó que esto es un tipo de agradecimiento aunque investigando bien ella no reconoce bien entre romance y erotismo.

Su aspecto angelical volvió tras salir del lugar, arreglando su uniforme blanco seguía pegada a mi como una sombra. 

— Seamos sinceros, ¿que pasará cuando yo envejezca y no puedo apoyarte con la investigación? —

Azazel que siempre mantenía una mirada alegre y despreocupada me dirigió una mirada confundida que dejaba claro su ignorancia que no soy inmortal.

— Cierto, los humanos no viven para siempre, la verdad me resulta difícil imaginarme investigando sin tu compañía —

<<¿Es algún modo de confesarse para ella?, no es posible, apenas llevamos un par de meses en mi casa.
Además, es un ángel, esta al servicio del de arriba.  >>

Mi mente se perdía entre pensamientos y mis ojos solo miraban al suelo.

— Ahí arriba era muy torpe, todos me dejaban en claro eso, recuerdo haber investigado a una familia para saber de la compañía humana — comentaba ella como si de recuerdo ameno se tratara — Asuste al hijo de la familia que me encontró en el basurero y eso llamó la atención de mis superiores.

Sus ojos disminuyeron su brillo por unos segundos tomando mi mano para entrelazarla con la mía, no podía contener los latidos de mi corazón que al instante se aceleraban.

— Fui degradada a otra investigación, acabando en tu basurero... lo único bueno todo fue que pude encontrarte —

Ese brillo volvió en ella mirándome a los ojos que esa expresión de ternura y cálida compañía. Mis manos se movían solas a acariciar su mejilla y detener nuestro andar.

— Se que es algo apresurado y no está bajo el contrato de asistente pero... ¿te gustaría tener una cita? —

Las mejillas de Azazel se cubrieron de rubor mientras con emoción sacaba su grabadora de voz acercando esta a milímetros de mi boca.

— Claro que acepto, será una buena manera de conocer técnicas de seducción de demonios —

Moviendo la cabeza negando esas palabras tomo de las manos a Azazel intentando hablar sin poder sacar las palabras.
Viendo lo ocurrido Malina se acerca golpeando mi espalda con fastidio. 

— Lo que el tonto trata de decir, es que quiere tener una cita contigo, fuera de la investigación o lo que sea — diciendo eso ella se adelanta con botella en la mano siendo detenida por un oficial.

— Es lo que trataba de decir, solo nosotros, no micrófonos o cámaras — decía con más valor notando una total emoción por azazel sacando su vieja libreta para inmortalizar este momento.

— Día 82, interés romántico, mi asistente me invito a salir, gustosa acepto por la misión y por gusto personal — el sudor corría por la piel de la chica mientras sus brazos temblaban de la emoción.

Sabiendo que sería aún un camino complicada de avanzar decidí cambiar mi objetivo, juntar a todas las demonios de la ciudad y enamorar a ese ángel.
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Espero halla sido de su gusto estos capítulos y agradecimiento a su apoyo, pueden dejar sus sugerencias.