•[°~43~°]•

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La noche era especialmente fría, el viento soplaba y no había casi ningún habitante por la zona. La mayoría se encontraban ya cenando con sus familias o solos en sus casas. Todo era hasta cierto punto, tranquilo; a excepción de una casa en particular, la casa del héroe azul. El ambiente adentro era muy tenso; a pesar de que los hermanos habían dejado de discutir, aún estos se reusaban incluso a verse a los ojos de la pura ira que aún sentían.

El zorrito de dos colas se encontraba sentado frente a ambos intentando hacer que estos se disculparan el uno con el otro por los comentarios crueles que se habían lanzado, pero, a pesar de que la hermana mayor había accedido a una disculpa, el menor de los erizos solo le seguía lanzando insultos.

—Manic por favor, Sonia quiere disculparse— habló Sonic de pie entre ambos, lo último que quería era algún enfrentamiento físico

—Pues no me interesa. No pienso aceptarlas— hablaba Manic frente a su hermano, lo suficientemente cerca como para que Sonic retrocediera un poco

—Sabes por qué no las quieres aceptar? Porque en el fondo sabes que tengo razón, ese tipo no es nada bueno para tí, ya madura y acéptalo. Solo lo quieres porque te estás dejando llevar por tus hormonas— esta vez habló Sonia, ya un poco más tranquila de la discusión aunque aún en tono firme

—Perdona y tú cómo sabes que putas es lo mejor para mí?!—

—Manic!— regañó Sonic

—QUÉ? Agh miren, saben qué? Me largo, estoy harto de que me digan que hacer. Esto fué en primer lugar lo que hizo que me largara por completo de sus vidas— Manic empezaba a señalar a todos mientras retrocedía. Miró directo a Sonic con claro signo de molestia, y aún peor por la cara de preocupación que este tenía, eso solo lo quebró más —Y TÚ DEJA DE VERME ASÍ! Odio que me vean como si estuviese loco. PORQUE NO LO ESTOY! Solo estoy harto de que me traten como la oveja negra de esta familia. Cosa que tampoco soy— Sonic intentó acercarse

—Manic, tranquilo, no sé porque enloqueces así. Sí, Sonia no usó las palabras correctas pero ella está preocupada por tí, como todos en este lugar—

—PUES NO QUIERO QUE SE PREOCUPEN! Solo quisiera... QUISIERA DESTROZAR ALGO E IRME DE AQUÍ— el de púas verdes sujetó un jarrón y lo estrelló contra el suelo frente a Sonic, sacando un grito de susto de su madre y su hermana —Y tú sigues sin hacer nada al respecto— señaló a su madre la cual lo miraba asustada sin saber realmente qué decir o hacer.

De repente la puerta se abrió dejando ver a Scourge preocupado mirando a todos lados intentando ver qué había ocurrido

—Escuché el estruendo, que mierda pasa aquí?— Manic solo lo hizo a un lado y empezó a correr alejándose de la casa

—MANIC!— gritó el de púas azules intentando que se detuviera pero en lugar de eso este solo usó su supervelocidad para alejarse más

—Yo voy por él!—

—Espera Scourge no puedes sal- ir—

Scourge corrió detrás de Manic a toda velocidad dejando a Sonic con las palabras en la boca y a los demás presentes en un terrible silencio en el que nadie sabía muy bien como todo había escalado de esa forma y en tan poco tiempo

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El viento era helado, tanto por la hora como por la estación, sumado a eso, ir a toda velocidad solo empeoraba la cosa. Scourge ahora se lamentaba de solo tener un simple suéter que ni era suyo, ahora sentía helada su respiración, le molestaba la garganta y sus ojos ardían un poco, aún con todo eso, no dejó de gritar llamando a Manic, pero no lo encontraba, por lo que su preocupación lo hacía olvidar un poco el malestar que le generaba el clima.

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