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—Mmh... más. —gimió Sunoo, quien estaba saltando en el palpitante miembro de Park.

Sunghoon gruñó ronco, se sentía tan bien hacerlo en la cama de sus padres.

¿Por qué nunca lo había intentado?

No lo sabía, pero lo que si sabía era que si su madre terminaba de trabajar los encontraría en pleno acto sexual... en su propia cama.

Sun siguió saltando hasta que se vino manchando su estómago, entonces dejó de moverse.

—Yo no he terminado bebé, vamos salta más.

—Hoonie, estoy cansado. —jadeó su pequeño novio.

—Salta Sunnie. —insistió Hoon mientras movía las caderas de su pequeño sensualmente.—Oh mierda. —gruñó cuando se vino duro dentro del menor.

—Sunghoon estoy en casa. —gritó su madre desde abajo.

Sunghoon solo rió entre dientes mientras que Sunoo se escondía detrás de él.

—Vamos pequeño, cámbiate, no querrás que llegue mi madre y te vea así todo desnudito.

Dicho esto Sunoo se sonrojó a más no poder y rápidamente se vistió, Sunghoon se sentó en la cama y tranquilamente se cambió.

Llevó a Sunoo a su antiguo cuarto que estaba en frente del de su madre no sin antes armar la cama lo más que pudo.

Cuando su madre los fue a ver, solo vio a Sun muy nervioso mirando hacia abajo y a su hijo tranquilo con el celular.

Algo había pasado entre los dos...

¡Hoonie! ‹𝟹 SungsunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora