¡Hoonie! ‹𝟹 Sungsun

09

Sunghoon ya se encontraba en la cancha junto a sus compañeros esperando que el juego de inicio, se encontraban jugando: Lee Taeyong, Lee Heeseung, Choi Soobin, Han Jisung y por último el gran Park Sunghoon.

En el otro equipo se encontraban: Song Mingi, Kang Minhee, Lee Geonu, Yang Jungwon, y la estrella de su universidad y gran rival de Sunghoon desde siempre, Kang Taehyun.

Park lo quería acabar, porque no era sorpresa que Sunoo y Taehyun eran buenos amigos desde pequeños y eso solo trajo celos a Sunghoon, pero lo que más lo enloqueció fue descubrir hace un par de meses que Taehyun estaba enamorado de su novio, Sunghoon ya lo sospechaba pero escucharlo salir de los propios labios de Kang lo hizo enfurecer.

Oh, iba a haber una masacre en la cancha si Taehyun se atrevía siquiera a pensar en su Sunnie.

El juego dió comienzo y los dos aprovechaban para darse empujones y miradas de muerte, los dos querían ganar el juego y los dos querían a ese lindo pequeño solo para ellos...

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El partido ya casi terminaba iba ganando el equipo de Sunghoon y faltaban 6 minutos para que finalice, el marcador mostraba el resultado hasta ahora que era: 108/104 Sunghoon había hecho 58 anotaciones, Taeyong 25, Heeseung 21 y Soobin 4, sin duda eran un equipo enérgico.

Debían serlo si querían ganar...

Sunoo desde su lugar un poco cerca de la cancha disfrutaba ver a dos de sus personas favoritas en un mismo lugar, no podía esperar a que el juego termine y así felicitar a Sunghoon por su excelente trabajo y a Taehyun también, hace mucho que no lo veía y tenía ganas de abrazarlo mucho.

El juego por fin terminó y todos en el equipo de Sunghoon celebraron entre todos juntos abrazándose y gritando, los estudiantes de la universidad y secundaria perteneciente al equipo ganador gritaban junto a ellos.

Sunoo vió de lejos a Taehyun fuera de la cancha cabizbajo, corrió sin pensarlo hacia él y lo abrazó cálidamente sorprendiendo al mayor quien cuando lo vió sólo se tranquilizó y le sonrió, Sunoo le devolvió el acto separandose del abrazo pero rió dulcemente cuando el mayor lo atrajo de nuevo a él agarrándolo de la cintura.

— Hola Hyung —dijo Sunoo alegre de ver a su amigo, mientras pasaba sus brazos alrededor del dorso del mayor.

— Hola Sunnie ¿como estás? —le preguntó fingiendo curiosidad algo clásico de él en su niñez solo para hacer reír a su menor, y vaya que eso todavía funcionaba muy bien.

Sun rió tierno— Ya no soy un niño hyung.

— ¿Ah no? —el menor negó— pues para mi eres todavía un bebé —Dijo acercando su cara al menor y apretarle las mejillas— Me encantas Sunnie —dijo el mayor sonrojando a Sunoo.

— H-hyung —dijo Sunoo mientras abrazaba de nuevo a su amigo— debo irme —susurró tímido.

— Muy bien. —lo abrazó por última vez y le dió un beso en la frente— Adiós Sunnie.

— Adiós —dijo Sunoo.

Cuando se dió vuelta para buscar a su novio, se encontró con demasiada gente dispersada que eran entre los estudiantes y los jugadores de los dos equipos, pero no llegó a divisar a Sunghoon.

Caminó un poco más entre la gente, hasta que una fuerte mano lo tomó de la muñeca rápido y lo hizo correr detrás de él hacia el patio trasero donde se detuvieron, la figura pelinegra se dió vuelta y Sunoo juró haber visto al mismísimo lucifer en la cara de su novio.