¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
JUNGWON'S POV:
Desperté por el ruido de la alarma de un celular, o para ser específicos, la alarma del celular de Ni-ki, quién se había quedado en mi casa a pasar la noche (de nuevo).
—Ni-ki. — le hablé tratando de despertarlo. —Nishumura.
Entre más lo jaloneaba para levantarlo, menos respuesta de él obtenía.
—¡NISHIMURA RIKI, DESPIERTA!
Cuándo por fin despertó se sentó en la cama viendo hacia los lados confundido tratando de saber en donde se encontraba.
—Hyung, Buenos días. —dijo sobando su ojo con el dorso de su mano.
—Ni-ki te quiero fuera de mi casa para las nueve.
—¿Qué? ¿Saldrás?
Asentí mientras salíamos de mi habitación y nos dirigíamos a la sala.
—Visitaré a mi abuela, y saldré con Dan-i.
—De nuevo esa. Desde que la conociste ya no me prestas atención, solo es ella y nunca soy yo. ¿Acaso...? —decía dramáticamente mientras se quitaba la pijama que le había prestado por su ropa. — ¿Acaso ya no me amas?
Rodé los ojos ante su estupidez y lo llevé a la puerta. — Yo jamás te amé. —dije mientras el se ponía sus zapatos. —Además cuando estamos juntos no dejas de hablar de tu Sunoo Hyung, así que, ¿por qué mejor no te vas con él?
—Sunoo Hyung volvió a Daegu hace meses.
—Que pena. — dije sonriendo mientras lo sacaba por la puerta de mi casa. —Adiós. —dije azotando la puerta frente a su cara... Aunque segundo después la volví a abrir, el seguía donde mismo. —Ten cómprate algo para desayunar. —dije tendiendo mi mano y dándole dinero.
—Gracias Hyung, te amo.
Volví a cerrar la puerta y me dirigí a mi habitación, para así buscar ropa y tomar una ducha.
Después de la ducha me vestí y desayuné. Salí de mi casa en marcha a visitar a mi abuela.
『••✎••』
—Las cosas con Dan-i han ido bien, abuela. —dije sentado frente a ella. — Hace dos meses entramos a la escuela, eso ya te lo había contado. Aunque no estemos en el mismo salón, nos vemos todos los días en el recreo, y nos esperamos hasta que el otro termine sus clases para ir juntos a casa. Y los fines de semana nos reunimos y tenemos citas.
Mientras hablaba con mi abuela las horas parecían no pasar, ella es como un diario para mí, le cuento todo sin el miedo de ser juzgado.
—Pronto cumpliremos cincuenta días de novios, ¿debería regalarle algo? —dije llevando mi mano a mi mentón y recargando mi brazo en mis piernas cruzadas.— Me alegra que tu y Dan-i se hayan conocido, ¿ella es bonita, verdad abuela? No es muy inteligente, pero tampoco es tonta. Le va muy bien en geografía, pero no sabe nada de matemáticas. —dijo riendo. — Ahora que lo pienso, es como si me acompletara, yo no soy bueno en geografía.
