It had to be You || El empezar

Capítulo 6

Al día siguiente llego con Zac al instituto y me toca clase de Literatura, así que me despido de él y me dirijo a la clase. Justo en frente veo que Bruno pasa corriendo por el pasillo y le tira los libros a un chaval, me paro para ayudarle.

-Madre mía, siempre pasa como loco por los pasillos-digo mientras recojo las hojas esparcidas por el suelo.

-Algún día se topará con la Srta. Miller y el castigo será poco-dice el chico sarcásticamente.

Me levanto para darle las hojas, me fijo especialmente en una de ellas en la que aparece un dibujo de la bandera de la comunidad LGTBIQ+, rápidamente me quita la hoja de las manos y resulta que todo esto era de Noah.

-No te han dicho nunca que no se debe cotillear las cosas de la gente- dice Noah un poco molesto.

-Perdón, no sabía que tu...-

-Ni se te ocurra decir nada-dice y acto seguido se va.

Al fin y al cabo es un Davis, demasiado orgullosos para asumir la verdad y para que nadie les eche una mano. Me quedo paralizada en medio del pasillo, no me esperaba así la reacción de Noah sobre ese tema, debe de estar pasándolo bastante mal.

-Como sigas aquí parada vas a llegar tarde a clase-oigo una voz a mis espaldas.

-¿Tienes Literatura?-le digo a Marc que era quién estaba detrás de mí.

-Por desgracia sí, la odio-veo que se queda quieto a mi lado- Tengo que esperarte, no sé donde está la clase-

-¿Me vas a usar de guía a partir de ahora?-le digo y me río.

-Puede ser-veo que se le escapa una sonrisilla.

Qué mono está cuando sonríe,...¿Pero qué estoy diciendo? En fin, soy subnormal ya está.

Voy con Marc a la clase de Literatura y cuando entramos ya está el profesor hablando.

-Tegan, Thompson, llegan tarde-dice.

-Lo sentimos, soy nuevo y no sabía donde estaba la clase, entonces Rebecca me ha ayudado- nos defiende Marc.

-Que no se vuelva a repetir-dice el profesor.

No me ha hecho falta hablar, qué maravilla. Sólo quedan dos asientos al final de la clase, genial. Me gusta ponerme delante en Literatura porque el profesor habla super bajito, aquí no se le va a escuchar nada.

-Bueno, como iba diciendo...-continúa el profesor.

Al rato de que el profesor empiece a explicar a Calderón de la Barca, noto que Marc me toca el brazo, le miro y le hago una seña con la cabeza para ver que quiere, me resbala una notita por la mesa.

En la notita pone "¿Te puedo hacer una pregunta?", le respondo con un ¨sí, aunque ya me la estás haciendo¨, le vuelvo a resbalar la nota y le sonrío. Veo como escribe en el papel, super concentrado, me fijo en sus rasgos faciales: tiene las cejas pobladas, las pestañas bastante largas, su nariz es perfecta, tiene unos labios gruesos pero que se compaginan con su boca, ya que es grande,...

-No soy ningún asesino para que me mires tan fijamente-dice casi susurrando y me mira.

Me giro de nuevo a mirar al profesor y noto como poco a poco me ruborizo. Marc vuelve a resbalar la nota por la mesa, "Zac y tú, ¿estáis saliendo o algo?", leo, me río y niego con la cabeza, ¨no somos pareja, jajaja, todo el mundo nos lo dice, somos mejores amigos desde pequeños¨ escribo y noto como todo este tiempo me ha estado mirando.

-Yo tampoco soy ningún asesino-digo susurrando mientras le paso la nota.

Me mira con sus ojazos azules, en ellos tiene una mezcla un poco curiosa de amarillo y verde que se aprecia bastante bien.

-Tegan, espero que estés tomando apuntes en mi asignatura-dice el profesor de repente y hace que me asuste.

-Sí, no se preocupe-contesto.

Menos mal que es una de mis asignaturas favoritas y en la única en la que no me hace falta tomar apuntes. Al finalizar la clase, en el pasillo, escucho la voz irritante de Arya insultando a la nueva, lo hace con todos. Me dirijo hacia ellas.

-Que sea la última vez que no me traes hechos los deberes de Química-dice Arya- Te dije que se me da fatal, tía, ahora me han puesto un negativo por tu culpa, que zorra eres-

-Arya no sé cuando te vas a cansar de usar a la gente para tu beneficio-digo y se gira de mala gana- Así que aquí la única zorra eres tú-

-Rebecca, no te conviene hablarme así, ya que...-

-Mi madre es la directora del instituto- la imito- Me la suda quien sea tu madre, no tienes derecho a tratar así a la gente y menos a una chica nueva que no sabe lo que mandaron en Química la clase pasada-

-Esto no va a quedar así, se lo diré a mi madre para que hable contigo-dice y yo la imito haciendo aspavientos con las manos.

Las personas que estaban en el pasillo me miran y por sus caras puedo ver que tenían muchas ganas de que alguien le dijera eso a Arya, no entiendo como no se da cuenta de que todo el instituto la detesta.

-Gracias...-dice Meghan tímida.

-No me las des, lo haría por cualquier persona porque Arya es un demonio-digo- Por cierto, soy Rebecca-

-Encantada Rebecca, yo soy Meghan-dice.

-Si no tienes nada que hacer, vente a las gradas en el recreo-la invito- Estaré ahí con mis amigas-

-Vale, allí estaré, gracias-dice sonriendo.

Llega la hora del recreo y como siempre voy a las gradas.

-¡Princesa, espérame!-

Me quedo quieta para que Zac se acerque.

-Zac-digo- Marc me ha preguntado si somos pareja o algo- le digo riéndome.

-A mi me lo preguntó ayer-dice y se descojona- A ver si ya vas a tener a tu Principito y tendré que dejar de llamarte Princesa-

-Eso ni de broma-le abrazo.

Zac me empezó a llamar Princesa cuando éramos pequeños. Un día en el parque estábamos jugando los dos mientras nos tirábamos por un pequeño tobogán, resulta que había un señor mayor en el parque cuidando de su nieta, ese señor tenía problemas de vista y cuando se fue a ir con su nieta, me confundió a mi con ella y dijo "Vámonos Princesa, que tu madre nos está esperando en casa", Zac empezó a decirle al señor que yo no era su nieta y que ella estaba subida en el columpio, el señor se disculpó y fue a por su verdadera nieta, desde ese momento, Zac, empezó a llamarme Princesa a todas horas y ahora me lo tomo como un mote cariñoso.

Antes de llegar a las gradas pasamos por la cafetería a comprar algo de comida para Zac, porque se había dejado el bocadillo en casa. Mientras estoy esperando fuera a que salga, me choco con Marc.

-Eyy, cuidadito por dónde vas enana, que algún día te piso-dice.

Me ha llamado enana, ENANA, mido 1,65m, no soy una enana.

-Perdone usted rascacielos-le digo con una media sonrisa.

Se ríe y se remueve el pelo

-¿Qué haces aquí?-pregunta.

-Esperar a Zac que está dentro comprándose algo-respondo.

-¿Te apetece que te haga compañía?-dice- Esta vez no me puedes decir que me quedo porque no sé donde está el campus, porque me lo enseñaste ayer-

-¿Y por qué querría yo la compañía de alguien que me ha llamado enana?-digo de broma.

-Porque quien te la está ofreciendo es tu rascacielos favorito-dice y me da en el hombro.

-¿Qué habláis de rascacielos?-pregunta Zac que acaba de llegar.

Marc y yo nos echamos a reír.

-Bueno, ya me contaréis-dice Zac- ¿Nos vamos?-me pregunta.

-Os acompaño-dice Marc- Total, voy para el mismo lado-