𝘍𝘶𝘤𝘬 𝘠𝘰𝘶 𝘔𝘪𝘭𝘬𝘰𝘷𝘪𝘤𝘩 | 𝘚𝘩𝘢𝘮𝘦𝘭𝘦𝘴𝘴

D I E C I S É I S

El verano finalmente había dado la vuelta y Madi ya deseaba que fuera invierno. Ayudó a Ian y Lip a montar la piscina hace semanas, lo que significaba que era oficialmente verano. Madison miró fijamente a todos los niños que jugaban en la piscina desde la ventana de su dormitorio, le gustaba ver a Debbie ser independiente y cuidar a los niños del barrio. No solo practicaba la crianza de los hijos, sino que también juntaba dinero para la casa, que siempre se necesitaba. "Sigue mirando fijamente y te verás como un acosador", dijo Ian juguetonamente mientras se unía a Madi en su cama. Ella lo empujó ligeramente y se sentó a su lado, los dos riéndose. "Estoy pensando en volver a la escuela por un tiempo, siempre estoy aquí o en el Kash and Grab y, francamente, es aburrido", se encogió de hombros Madison. Solo terminaría este año y luego terminaría con la escuela secundaria, aunque no podría ir a la universidad. Sus notas son demasiado bajas. "Deberías, eres inteligente. Ser inteligente en la calle es una cosa, pero ser académicamente inteligente es más útil", se rió Ian, Madi se unió.

"¡Vamos Lip! ¡Golpéalo duro!" Madison gritó tan fuerte como pudo a su hermano. Lip estaba luchando contra un tipo al azar, la gente apuesta por ello. El tipo le dio un golpe al torso de Lip y lo empujó hacia Mandy, Ian y Madi, Ian logró atraparlo. "Dale un buen golpe, lo estás golpeando como un maricón" Ian lo empujó de vuelta al círculo, Lip siguió su consejo. Madi se sentó en el suelo junto a Mandy, sudor goteando por su cara. Ella golpeó la parte inferior de la pierna de Mandy para llamar su atención: "Voy a salir antes de desmayarme en este lugar, dime si Lip gana", asintió Mandy.

Madison se sentó fuera del edificio con una botella de agua en las manos. Los tres salieron corriendo del edificio, una sonrisa en la cara de Lip dando a Madi la impresión de que había ganado. "¿Has ganado?" Le preguntó mientras se ponía al día con ellos, uniendo los brazos con Ian como solía hacer. Agitó la cabeza: "No, pero me las arreglé para conseguir algo de dinero de las otras peleas", mostró los billetes de varios dólares. Los 4 corrieron por la carretera, Madi tratando de fumar mientras lo hacía.

"¿Mickey sale pronto?" Madi le preguntó a Mandy cuando ambas entraban en la casa de Milkovich. Madison no podía molestarse en caminar una cuadra extra hasta su propia casa, Mandy dijo que podría quedarse en la suya. "En una semana más o menos si no apuñala a nadie más. El tenedor de plástico apenas rompió la piel del niño. Le consiguió otros 30 días" Mandy suspiró exhausta mientras se quitaba la camisa y se ponía una sudadera. "Iré contigo a recogerlo, no tengo nada mejor que hacer", se rió y se subió a la cama. Mandy y Madi habían estado compartiendo una cama cada vez que dormían durante todo el tiempo que podían recordar. "Muy bien, buenas noches"

"¿Quieres que te ayude con la guardería hoy? Hay muchos niños que cuidar para una niña", preguntó Madi mientras veía a Debbie hacer una gran cantidad de sándwiches de mantequilla de maní y jalea para la horda de niños que se harían cargo de la casa. "Corta la corteza de estos sándwiches y nos hemos quedado sin jugo de manzana, así que hoy es agua", ordenó Debbie antes de correr a la sala de estar donde al menos 6 niños llorando estaban sollozando. Madi se rió e hizo lo que se le ordenó, cortando las cortezas de los sándwiches. Apiló todos los sándwiches en un plato y agarró tantas tazas de sorbo como pudo, dejando el resto en el mostrador. "Aquí tienes, jefa, hay como cuatro tazas de sorbo en el mostrador", se agitó el pelo y se tiró al sofá junto a Liam y a algún otro bebé de nariz mocosa. Liam señaló el plato de comida en la mesa, mirando entre eso y Madi. "¿Quieres uno?" Cogió uno del plato y se lo entregó, "aquí tienes", sonrió a su hermano menor.

"Es un ángel, nos encantaría tenerla de nuevo" Madi mintió con los dientes apretados a uno de los últimos padres en venir a recoger a su hijo. Observó cómo los padres salían de su camino hacia su coche. "¿Más niños?" Madi gritó a Debbie en la sala de estar. "¡No!" Me gritó. Madi cerró la puerta cuando se alejaba. Madi solo había estado ayudando durante 4 horas y sintió que su cabeza explotaría. Debbie seguía limpiando juguetes y libros de todo el suelo.