CAPITULO 8

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Astrid:

Amanecí.

Al parecer nadie intentó entrar a mi cuarto anoche y lo agradezco . Me levanto y voy directo al baño , me miro en el espejo y ya las marcas casi ni se notan. Me ducho y me visto con unos jeans , una blusa rosa , una chaqueta blanca y unos tenis del mismo color , arreglo un poco mi pelo pues al ser corto no es como que pueda hacerme muchos peinados y no aplico nada de maquillaje.

Me asomo y ya todos están desayunando en el comedor y no quiero incomodar con mi presencia por lo que me voy a la cocina , una señora mayor muy amablemente me sirve mi desayuno el cual deboro de inmediato, anoche no cené y me moría de hambre .

—Selena puedes avisarle a Astr... ¿que haces desayunando aquí?—Alisson al parecer no notó mi presencia al entrar porque venia con el teléfono.

—No quise interrumpirlos o incomodarlos —termino lo que queda y dejo el plato en el fregadero.

—No sabía que eras de ese estilo—me detalla de arriba a abajo con determinación, ella trae un conjunto Versace de falda y blusa blanca y negra , una chaqueta de cuero y unas botas a mitad de piernas .

— La verdad soy más de ese estilo que traes pero por ahora prefiero usar esto , no quiero que se me vean las marcas que aún son visibles, bastante tengo con las pocas que quedan en el rostro.

Su expresión cambia a una de lastima y no me gusta que sientan ese sentimiento hacia mi pero no digo nada .

Me encamino con ella hasta el jardín donde nos sentamos y me cuenta que vendrán unas estilistas a arreglarnos para el evento de esta noche , son de toda confianza , se supone que iríamos al salón pero Eros no lo permitió por lo de ayer y yo lo prefiero así también .

Veo a Eros pasar para su despacho y no puedo evitar detallarlo en ese traje que trae «virgen santísima».

La mañana pasa tranquila , Alisson se fue a no se donde , su abuela salió y su hermano no ha salido de su despacho , tampoco he visto a los hermanos, me la he pasado en el columpio del jardín leyendo el libro que comencé ayer , me gusta mucho la fantasía.

—¿Entretenida?—Marcos llega a mi lado y se sienta.

—La verdad si , mejor que estar colgada— suelta una risita y mira la portada del libro .

—Ya lo leí, no te lo recomendaría .

—Demasiado tarde , ya voy por la mitad — le muestro la pagina por la que voy y niega decepcionado.

—Eres muy inteligente Astrid , no se que hiciste para que Eros aceptara casarse contigo pero lo que sea te salvó de una muerte bastante dolorosa de la que ni mi abuela te hubiera salvado—sin más se levanta y se encamina hasta la casa.

Yo por mi parte prefiero seguir leyendo en mi cuarto así que me voy hacia allá.

[——————————]

Eros:

—Se me acaba de ocurrir una gran idea— el menor de mis primos entra a mi oficina sin tocar como cada ves que se le da la gana mientras yo trabajo con su hermano , lo miro con mala cara haciéndole saber que no me interesa ni un poco lo que dirá.

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