Los niños quieren un momento de diversión, ¿te unes a la aplicación?
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NCT Dream - AU!
Advertencia: menciones de uso de drogas, violencia verbal y física, un poco gráfico y desagradable, canibalismo, ficción general y agresiones sexual...
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— Y esperó que alguien me educara como él no hizo—concluyó RenJun.
En lo que a HaeChan respecta, no imaginó que Mark y RenJun se llevaran tan bien, lo que sí cruzó su mente fue la imagen de Mark hecho añicos.
— Eso es terrible—dijo Mark. HaeChan estaba a unos metros de ellos con JiSung y ChenLe, quienes se mantenían entretenidos hablando en voz baja entre ellos—. ¿Eso es lo único que recuerdas de tu padre, RenJun?
— Mi creador—corrigió Doll, quien horas antes había exigido que le llamaran por su nombre: RenJun—. No recuerdo mucho de nada, a decir verdad.
— Perder la memoria no es algo que le desee a alguien—. Ante ese último comentario, HaeChan explotó.
Estuvieron horas sentados en unas malditas rocas con poco oficio para cojín, y ahora iban hasta el pasado sólo para charlar cuales comadrejas, ¡él no iba a esperar hasta que las amiguitas terminaran su reencuentro! Porque sí, resultó que Mark había conocido a RenJun de antes.
— Que estúpido—soltó en voz alta. Su cuerpo se despegó de la superficie de la roca, donde yacía desparramado segundos antes, intentando no dormirse de aburrimiento. Mark elevó la vista hacia él y RenJun siguió con la misma vista perdida en a saber qué—. Perder la memoria le sucede a personas pendejas, que son tan débiles que le encuentran excusa a cualquier puto drama. ¿Perdiste la memoria? ¡Já! No eres más que otro estúpido haciendo de las suyas porque no quiere cargar con su pasado.
— Ni siquiera sé por dónde empezar a regañarte, HaeChan—, Mark rodó los ojos, volviéndose hacia RenJun, que siguió quieto—. Ignóralo, él siempre es tan encantador.
— Sí, muy hijo de puta que soy—. HaeChan avanzó hasta ellos, entornando la mirada a medida que se acercaba—. ¿Ya hicieron su reunión de ex mejores amigos? Necesito saber si el muñequito va a colaborar, o hay que darle un incentivo.
— RenJun...—murmuró Mark—, necesitamos de tu ayuda.
— Ellos son humanos—señaló RenJun. Mark y HaeChan se quedaron en silencio observando la escena, RenJun mirando fijamente en dirección a JiSung y ChenLe, quienes reían en silencio por alguna cosa que dijo el otro. Eran tan ausentes, tan despreocupados, tan felices. RenJun supuso que era porque eran humanos, y algo en su interior le indicó que tenía el deber de protegerlos—. Si convencen a Degustador, me tienen de su lado.
