•••Cada día era una nueva persona, o como decía yo, un nuevo olor. Trabajar en esta pastelería tenía más ventajas de la que uno podría imaginar. Al encontrarse en el límite del pueblo donde vivía, siempre llegaban nuevas personas, por lo tanto nuevos aromas, lo cuales algunos iban a visitar el pueblo donde vivía o simplemente pasaban hacia el otro lado. Muchas veces había caras conocidas, pero siempre había más de una que era nueva.
A pesar de que siempre era casi todo igual al día anterior y anterior, no me quejaba. Eso era lo que más me gustaba de este trabajo. Todo era correcto, simple y sin ninguna sorpresa.
—¿Crees que hoy pasará algo?— me preguntó mi mejor amiga, quien trabajaba conmigo
Siempre antes de abrir, y voltear el cartel de la entrada de "cerrado" a "abierto" hacia la misma pregunta. Y siempre tenía mi misma respuesta.
—Que pase lo que tenga que pasar— y así era, no había nada emocionante, intrigante o difícil. Nada más gente entrando a la tienda, comiendo y luego pagando, nada más
—Bueno, espero que ese algo, sea algo importante— termino de decir para volver a la cocina
Y no le conteste; pero una parte de mi, todos los días anhelaba que alguien abriese aquella puerta que me era tan conocida y ocurriese ese algo.
•••
El día paso como lo había previsto, sin más que gente entrando, comprando, comiendo y pagando; y nosotras dos con otra chicos atendiendo; como siempre.
—Sabes, si en este instante o ultima hora no aparece nadie, que no se tenga dos cabezas, te juro que me desmayare del aburrimiento—
Yo solo me reí mientras negaba con la cabeza. Donde desde mis adentros, mi loba y yo estábamos igual. Lo único que era diferente hoy, es que teníamos esta sensación de ansiedad, esa misma en la cual tienes un hormigueo en el estomago debido a la emoción, pero no sabíamos la razón.
Así, estuvimos esperando durante veinte minutos más mientras terminábamos de limpiar todo para el siguiente dia.
—Bae, me tengo que ir a ver a mi hermano, ¿puedes cerrar esta noche?— me preguntó
—Si. No hay problema— ella solo me sonrió a lo que se encamino hacia la puerta con su mochila y antes de que se fuera agregue— ;envíame un mensaje cuando llegues—a lo que ella solo asintió con la cabeza y así se marcho.
Faltaban solo siete minutos para cerrar. En el lapso de tiempo desde que se fue Hari y mis otros compañeros, no habia venido nadie, y ahora tampoco vendría nadie. Nada podia llegar a cambiar en tan solo siete minutos. Nada cambiaba durante horas, ¿Por qué habría que hacerlo en tan solo en segundos?
Y así lo hizo, a tan solo cinco minutos llego un auto negro que aparco frente al local y se encamino hacia la puerta, donde en el momento de abrirla, no solo se escucho es minucioso tintineo de la campanilla y con ello también un chico casi de mi edad, que vestía todo de negro y que me miraba fijo en lo que se acercaba; pero lo que más me llamo la atención, no solo a mi; sino aún más a mi loba fue su aroma. El cual ahora mismo estaba inundando todo el espacio haciéndome sentir mareada por lo fuerte que era.
«él»
«¿Qué?»
«Él. Es él»
Cada vez que se acercaba más al mostrador, donde me encontraba, sentía aún más su aroma. Era chocolate. Pero no cualquier chocolate. Parecía ese tipo de chocolate, de cuando tomabas una taza de chocolate caliente con crema en un día muy frío. Era demasiado reconfortante aquel aroma. Pero aún también, se podía percibir que el aroma no era solo chocolate, sino también de lluvia, que solo te podías dar cuenta de ello si le prestabas atención. Donde aquel conjunto se sentía como si estuviera en casa.
—Buenas tardes...—
Ni bien termine de decir aquellas palabras que parecían haber quedado en mi garganta, vi como sus ojos se tornaron a un dorado intenso. Sabía muy bien lo que significaba; su lobo estaba presente en este instante. A pesar de que me debería dar miedo, con él no fue así. Mi loba estaba muy cómoda, más de lo normal, y lo único que me repetía una y otra vez «es él» lo que me generaba un poco de confianza.
—¿Qué desea ordenar?— le pregunté nuevamente a lo él cerró los ojos un minuto para luego abrirlos y volver a su color natural
—A t..— se corto lo que iba a decir, pero estaba más que claro y aún más por sus ojos y cerro la boca con una mueca para luego decir—Me gustaría un latte de caramelo y croissant, por favor—
Al escucharlo por primera vez hablar, senti como mi loba emociono aún más de lo que ya estaba mientras me hacia miles de preguntas «¿nos estará oliendo? ¿A su lobo le gusta? Obvio que si, ya lo se» y yo solo estaba sorprendida de lo que me habia generado solo su voz, a lo que luego de un rato de mirarlo, solo asentí para luego decile el importe y una vez que pago el importe comencé a realizar su pedido. Durante el tiempo que preparaba su pedido sentía su mirada; de vez en cuando me giraba para verlo y él rápidamente desviaba su vista a otra cosa, lo que generaba que mis mejillas se enrojecieran aún más y aumentaba mi nerviosismo al estar a solas con él. Si no fuera por la musica que suena de fondo, estaría muy segura que solo se podria escuchar nuestras respiraciones y la tensión en el aire.
En el momento que coloque el caramelo en la bebida, vi como el inspiro el aire y sus ojos volvieron a ser dorados, al notar aquello comprendí algo, y mi loba se emociono aún más; él le gusta el caramelo.
«¿Le gustara nuestro aroma? Es a caramelo, seguro que si.»
Cuando fui al mostrador para entregarle su bebida sentía mi cara arder debido a lo que me habia dicho mi loba, este me sonrió y mi corazón solo se aceleró aún más ¿como era esto posible?
—Gracias...— me agradeció y antes de hablar de nuevo lo dudo un poco—¿Cual es tu nombre?
—Bae, Min Bae, ¿el tuyo?—
—Jungkook, Jeon Jungkook.
Yo solo sonreí un poco para luego bajar la cabeza, y cuando volví mi mirada a él me siguia mirando y sonriendo.
—Nos vemos, caramelo— se despidió al llegar a la puerta y me volvió mirar con los ojos dorados
—Nos vemos— le respondí y vi su cara de sorpresa y sabia la razón. Mis ojos también habían cambiado de color, lo notaba.
Aún no creía en lo que había ocurrido. Había sentido lo mismo que mi loba sintió, esa emoción y felicidad plena de encontrar a tu mate, era algo demasiado reconfortante y de un sentimiento inexplicable. Solo esperaba volver a verlo, solo eso. Nunca lo había visto en el pueblo que vivía, tal vez era del otro lado. Solo esperaba volver a verlo. Solo tenia que esperar, y que pase lo que tenga que pasar.
Nuestros lobos ya habían hecho una conexión, solo faltaba que nosotros tuviéramos la misma.
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Holaa, cómo están?
Espero que se encuentren bien 💕
Después de varios, varios y varios meses actualice ✨ les pido disculpas por la tardanza pero me agarraron varias cosas y además un bloqueo con este capítulo porque bueno es ✨omegaverse ✨ y es la primera vez que escribía algo así, soooo
Que les pareció? Con toda sinceridad necesito saber si escribí bien este tipo de género.
Así mismo se me ocurrió, hacer una mini historia aparte de omegaverse donde este sería el primer capítulo; les gustaría? Díganme Sii o comenten un emoji y lo voy a entender
Pd: me recomiendan historias de Tae o de Jungkook omegaverse? Necesito de esas historias
Intentaré traer el otro capítulo lo más pronto posible, espérenme pls ☺️
Pd2: si quieren seguirme en ig como itsjustgguk, ahí digo cuando actualizo y subo videos de tiktok ✨
En fin... nos vemos (pronto) ❤️
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- 𝐣𝐮𝐧𝐠𝐤𝐨𝐨𝐤 𝐫𝐞𝐚𝐜𝐭𝐢𝐨𝐧𝐬 -
Fanfiction[historias cortas] - Mini situaciones cotidianas de cómo creo que reaccionaría Jungkook - [fluff] [pedidos abiertos]