CAMPEONES

Anticlímax

Los nervios de Harry estallaron cuando su mano agarró el mango del trofeo, la otra se cerró alrededor del eje de su escoba. Claramente sintió el gancho que lo arrancó del centro del laberinto. Cada instinto que tenía le gritaba que esto estaba mal .

Sabía que era demasiado fácil, se quejó mentalmente.

Mientras el viaje continuaba más allá del primer o segundo segundo, supo que no estaban siendo transportados simplemente a los jueces. Dondequiera que fueran, era probable que fuera el objetivo de todo el ejercicio. Desde el momento en que se ingresó su nombre, hubo un propósito, y ahora iban a saber cuál era.

Posiblemente a su gran costo.

Sin embargo, todo lo que podía hacer en este momento era contar mentalmente la situación. Podía sentir a su esposa chocando contra él por un lado, y podía ver a Viktor y Cedric directamente al otro lado, también cargando sus escobas. Esto era un pequeño consuelo: fuera lo que fuera lo que estaba pasando, era probable que quienquiera que estuviera al otro lado del teléfono solo esperaba a una persona, no a cuatro.

Unos momentos después, todos golpearon el suelo y se desplomaron.

"¿Que demonios?" se quejó Cedric.

Harry, sin embargo, no estaba escuchando. Mientras ayudaba a Fleur a ponerse de pie, estaba ocupado observando su entorno, y lo que vio estaba lejos de ser prometedor. Estaban en un cementerio, probablemente a millas y millas de distancia de Hogwarts.

Una vieja mansión en ruinas era visible en la cima de una colina en la distancia, y una vieja iglesia a un lado, pero aparte de eso, no había nada más que árboles y lápidas hasta donde alcanzaba la vista. Bueno, eso y una niebla siniestra que se aferra al suelo, como algo sacado de un especial muggle de Halloween.

"Esto no es parte del torneo", señaló Viktor.

"Non", estuvo de acuerdo Fleur en voz baja. Y luego, mostrando que estaban totalmente en la misma página, agregó: "Sea lo que sea zis, debe ser por lo que se ingresó 'arry".

"Estoy de acuerdo", dijo Harry. Aunque no veo a nadie más por aquí.

"Probablemente no esperaban que fuéramos tan rápidos", señaló Cedric. "Salgamos de la vista hasta que descubramos qué hacer".

No hubo necesidad de más incitaciones. Cedric rápidamente tomó la delantera, atrayéndolos hacia y luego detrás de un mausoleo considerable. Harry podía decir que había pensado en entrar a la estructura pero decidió no hacerlo.

Sin embargo, no importaba; lo que importaba era lo que estaba escrito en una lápida que Harry vio a lo lejos. No podía quitarle los ojos de encima. Deletreaba Problema, con T mayúscula.

"¿Arry?" incitó Fleur, finalmente arrastrándolo, casi a la fuerza, detrás del mausoleo con el resto de ellos. "¿Qué ee ee?" preguntó nerviosa.

"Sé dónde estamos", dijo débilmente.

"¿Dónde?" preguntó Cedric.

Harry se giró para mirar a Fleur a los ojos, ya que ella era la única presente que probablemente entendería todas las implicaciones. "¿Esa casa en la colina?" hizo un gesto en voz baja. "Probablemente sea la propiedad de Riddle".

Los otros dos campeones estaban desconcertados, pero los ojos de Fleur se agrandaron y su agarre sobre él se hizo más fuerte. "¿Estás seguro?" ella preguntó.

"Eso es lo que dijo una de las lápidas. Dudo que sea una coincidencia".

Fleur la soltó y comenzó a maldecir en francés con tanta fluidez que Harry imaginó que casi literalmente podía ver cómo el aire se volvía azul.