Estaba charlando con mis colegas en aquel bonito restaurante, esta noche habíamos quedado que esta sería una "noche de chicas" cosa que me parecía algo chistosa pero aún así me parecía bonito que me hayas querido incluir en sus planes pues, a pesar de todo yo seguía siendo su jefa. Aún así intento mantener una relación amistosa con todo mi personal para llevar un mejor ambiente a la hora de trabajar.
—¡Wow!—gritó Chaeryeong con asombro— ese chico de verdad la quería mucho Unnie.—decía ella mientras tomaba un sorbo de su bebida
—Si...—musité apenas con un tono bajo y suspiré
—¿y como fue su primera discusión?—preguntó una curiosa HaeWon y yo reí
¿para que quisiera saber eso?
—¿para que quieres saber eso Haewon-ah? —pregunté algo sonriente. Ella era muy mona, era la menor de todas aquí
—Es que tengo mucha curiosidad Unnie—decía ella con u puchero y yo asentí en derrota
¡Wow! Recordar esto era tan...
Es como si lo estuviese viviendo
Aquí vamos
.
Seúl, Abril del 2017
Hyunjin me besaba con ferocidad mientras me dejaba con cuidado en la mesa de aquella biblioteca, lo más fascinante de estar en una biblioteca era que debería ser callado y eso me encantaba.
Sentía la adrenalina por mis venas, sentía que en cualquier momento nos descubrirían y nos retarían pero, solo disfrutaba del momento y de su toque.
Era un beso vehemente y necesitado mientras yo tenia una mano en su nuca y el aún tomaba mi cintura, me sentía un poco confundida pero este beso realmente se sentía como el cielo. Disfrutaba cada segundo de tener sus labios regordetes moviéndome al compás de los míos cosa que me hacía delirar. Era un beso lento y un poco necesitado pero justo cuando muerde mi labio me ahogué un jadeo para evitar ser descubiertos.
Nos separamos un segundo y nos miramos a los ojos mientras yo respiraba pesadamente, nuestras respiraciones se mezclaban y aún tenía su mano en mi cintura y yo mis manos al rededor de su cuello.
Era loco pensar que hace unos segundos estábamos discutiendo como unos idiotas pero, uff sus labios. Aunque Hyunjin diga nada más que gilipolleces deseaba sus labios junto a los míos cada vez que discutíamos porque es que joder, es muy guapo aunque no tenga nada de cerebro. Sin embargo, solo era sed de sentir sus labios y los míos.
Luego con su otra mano libre tomó mi mentón y me atrajo de nuevo a sus labios comenzando esta vez un beso lleno de pasión y muy cargado de sentimientos. Cuando menos lo esperé una de sus manos viajaba a mi muslo acariciando lentamente cosa que me ponía nerviosa. Encendía un tipo de chispa en mí.
Mi mano disponible acariciaba, bajaba desde su pecho a su abdomen con tranquilidad y devoción mientras sentía por encima de la tela de su uniforme lo esculpido que estaba su cuerpo y eso me encantaba.
Sin embargo en esta maldita burbuja no nos podríamos quedar para siempre, no sabía lo que podría suceder después y eso me dejaba inquieta pero disfrutaba del momento. Ya luego podríamos odiarnos.
—¿q-que? —escuchamos al unísono y nos separamos rápidamente mientras yo acomodaba mi falda y bajaba de la mesa
Y luego subí la mirada para encontrarme con el rostro de nada más y nada menos que Félix, Dios mío santa mierda. Al menos Félix no nos iba a delatar pero, juro que el no podría verme. Ni siquiera sé por qué hice esto en primer lugar.
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ℳ𝓎 𝐁𝐎𝐘 |Lee Félix •En Edición •
FanfictionElla tan solo tenía una simple pregunta y esa pregunta se terminó convirtiendo en muchas pero, el destino se encargaría de asignarle a la persona indicada para responderlas, y ese era el chico de las estrellas en el rostro...