CAPITULO 6

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Eran las diez de la noche cuando un Armando vestido de vaqueros, una camiseta deportiva que se adhería a su muy bien formado y ancho pecho, llevaba en las manos una cazadora porque a pesar de ser ya de noche el calor era apremiante y unas deportivas blancas para estar más cómodo, llevaba un pequeña maleta, salía a tomar el primer taxi que encontrara, necesitaba encontrarla cuanto antes

Durante el viaje a su cabeza llegaron miles de pensamientos funestos relacionados a su bebé, se imaginaba que ella lo abortara, o que lo perdiera de manera natural ya que también podría tener complicaciones en el embarazo y mil cosas más, así que deseaba cuidarla y mimarla como se lo merecía

Claro que antes de que eso llegara a suceder él tenía que contarle muchas cosas, más bien aclararles muchas cosas. Hizo parar el taxi y diciéndole el nombre del hotel se fue en busca de su destino, porque si ella se enojaba aún más con él era capaz de desaparecer y esta vez para siempre

Pago la carrera y bajando su maleta ingreso al hotel, solo esperaba que hubiera algún cuarto, porque con el apuro no había hecho reserva. Camino hasta donde creía estaba la recepción, cuando sin querer se fijó en una mujer morena de larga cabellera negra. Tenía una figura muy bien formada, en esos momentos llevaba un vestido entero de color azul y unas sandalias blancas de medio tacón

Sin saber porque siguió observándola, sus movimientos se le hacían muy familiares, la manera en que se acomodaba el cabello, porque al parecer estaba nerviosa o como se subía los lentes

Estaba acompañada de un tipo alto y rubio, que al parecer le estaba diciendo algo y era lo que la ponía nerviosa al parecer, pero lo que lo dejo completamente paralizado fue escuchar su risa, se reía igual que "Su Betty"

No podía creer lo que estaba viendo, esa mujer era su "Amor" pero si estaba hermosísima él lo sabía, pero ahora estaba a la vista de todo el mundo. Además aquel rubiales no dejaba de decirle cosas al oído haciendo que ella se riera y se sonrojara

Se comenzó a acercar con la clara intención de separarla de aquel empalagoso, cuando recordó que él estaba en falta y que no podía hacerle una escena de celos si quería conseguir su perdón, así que respirando profundamente un par de veces se acercó a ellos, pero en el tono de voz se notaba su enfado

A: Buenas noches ¿Interrumpo?

Betty casi se ahogó con la risa que había soltado y casi con miedo se giró. No su mente no le había jugado una mala pasada, estaba allí frente a ella y al parecer muy molesto por lo que estaba viendo

Michel no entendió el cambio de actitud de ella, es más la veía nerviosa ya que se había tomado ambas manos y se las refregaba una contra otra. Se quedó mirando a aquel tipo que parecía lo quisiera golpear, aun así saco a relucir su buena educación

MD: Buenas noches, no nos molesta, pero no tengo el gusto de saber ¿Quién es usted?
B:(no lo dejo contestar) ¿Qué hace aquí?
MD:(sorprendido) Betty ¿Lo conoces?
A: Armando Mendoza y si me conoce muy bien sobra decir (mordaz)
B: No me ha contestado ¿Qué hace aquí? ¿Es más como me encontró?
A: Mi amor te olvidas ¿Que se puede devolver la llamada?

Michel abrió los ojos sorprendido ¿Le había dicho mi amor? ¿Quién era ese tipo? un momento Armando Mendoza ¿No era el ex jefe de ella? ¿Por el que había salido de Bogotá? ¿Por el que estuvo deprimida los primeros días? ¿Qué es lo que pasaba con ellos? ¿Era el padre del bebé que esperaba? Eran muchas preguntas la que tenía, pero decidió sacarla de allí no deseaba que se alterara, es más no podía hacerlo

MD: Bueno un gusto conocerlo, pero nosotros nos tenemos que ir (tendiéndole el brazo) ¿Vamos?
B: Eh sí, por supuesto (iba a tomarlo del brazo, pero Armando no lo permitió)
A: Nos va a disculpar, pero nosotros tenemos que hablar así, que le pediría amablemente que nos deje solos
MD:(desafiante) ¿Y si no quiero que?
A: Pues lo hare entender a los golpes, pero usted no se lleva a mi mujer ¿Le quedo claro? (mirándolo fijamente)
MD: Pues lo siento, pero ella se va conmigo, como está dispuesto
A: Veo que no entiende, pues tocara hacerlo entender a las malas entonces (preparando los puños)
B: No se atreva... además yo no tengo nada que hablar con usted
MD: Ya la escucho, se puede retirar
A: Es que se va a largar o lo largo yo (ya cabreado)
MD: Inténtelo...

DOS DESTINOS UN SOLO AMORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora