Bloody love | Jasper Hale

006

Butterflies
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Viernes | Mariposas

Una pequeña Anne salía por la puerta de su casa en dirección al bosque, con una sonrisa impregnada en sus labios, llevaba un hermoso vestido azul claro y su cabellera rojiza atada a un listón del mismo color de su vestido, llevaba el lindo collar de una mariposa Morpho colgando de su cuello. Miro hacia atrás asegurándose de que nadie la siguiera y volvió su mirada hacia al frente, empezó a caminar rumbo a encontrarse con su querida amiga pelirroja y mostrarle el objeto que le había regalado su madre.

Cuando llego al lugar donde siempre veía a la hermosa chica y sentarse en el tronco que había en el suelo, se sentó en el esperando a la chica que era su única amiga, Anne no recordaba cuanto tiempo espero, de lo que si se acuerda es que ella nunca llego, decepcionándose y poniéndose triste, sus emociones negativas se mezclaban y las lagrimas bajaban por sus mejillas mientras caminaba rumbo a su hogar.

Habían pasado muchos días desde ese accidente, Anne despertó a los ocho días, los doctores no le dijeron mucho, ellos solo hablaban con su hermano y tia, quien por cierto los había encontrado, la recuperación de Anne era muy difícil, tenia pesadillas del accidente y a veces perdía las esperezas de recuperarse. Un día ella salió a dar un paseo por el hospital en la silla de ruedas y pudo escuchar la conversación de su tía y su hermano.

—Ella se va a recuperar —La voz de su hermano era un poco triste —Ella esta perdiendo las esperanzas.

—Lo sé, Will yo también tengo ojos y lo puedo notar —Dijo su tía se veía cansada por el tiempo que estuvo en el hospital sin descansar.

—Pero lo que dijo el medico, el golpe en la cabeza y ese corte en la barriga —La voz de el chico iba aumentando cada vez mas.

—Baja la voz Will, ella se va a mejorar y lo vas a ver.

Anne no entendía muy bien sobre el golpe de la cabeza, si sabia del corte en su estomago que le va a dejar una gran cicatriz, aunque se sintiera mal por eso y fingía no estar triste por eso, no era así, ya empezaba a frustrarle todo, su cicatriz, su recuperación y ahora sumarle ese supuesto golpe en la cabeza. Mientras ella estaba sumergida en sus pensamientos, cierto chico alto había agarrado la silla y la había jalado hacia atrás sobresaltándola.

—Escuchar conversaciones ajenas es de mala educación —Su suave voz la hizo calmarse, aunque seguía un poco confundida.

—¿Qué haces aquí? —Pregunto ella con media sonrisa en la cara.

—Vine a ver a mi papa —Dijo el pero Anne se sintió triste.

Pensó que por fin le importaba a alguien, alguien que no fuera su hermano y tía, aunque para ocultarlo un poco sonrió.

—Una pregunta —Soltó haciendo que el la mirara. 

—Dime.

—¿Por qué tienes esa cara de estar sufriendo?

—Esa es mi cara, ¿Pero por que lo preguntas?

—Nunca te vi sonreír —Dijo ella con una sonrisa —Pero te verías mas guapo, aunque tu ya eres guapo.

—¿Soy guapo? —Hablo el haciendo que ella se pusiera roja al darse cuenta de lo que dijo —Te ves demasiado adorable cuando te pones roja.

—Gracias, pero tengo que irme —Dijo ella evitando las miradas divertidas del chico.

—¿Te llevo? 

—No gracias, yo voy solita —Dijo ella haciendo que el sonriera.

Pero el ya la estaba llevando hacia la habitación de ella, el escuchaba atentamente las direcciones que le dio ella, se la pasaron platicando en el camino, el dio ánimos, le decía cosas muy lindas que hacían sonrojar levemente a Anne, lo cual ella agradeció, cuando el se fue Ally llego con una sonrisa de oreja a oreja.  

Las mariposas que sientes en el estómago cuando estas con esa persona que te hace sonrojar por las palabras bonitas, esa persona que te acelera el corazón, esas eran las palabras que Ally le decía a Anne y la dejo pensando esas palabras. Se encontraba sentada leyendo un libro de la mitología griega que le había dado Ángela cuando fue a verla.

El día estaba nublado, pero eso no quitaba las ganas de salir a explorar la belleza del bosque, pero lamentablemente ella no podía ir a explorar.

—¿Algún muchacho lindo que te guste? —Hablo su tía quien tomaba café.

—No se si me gusta, realmente no se como se siente estar enamorada —Dijo ella —Además no hablamos mucho y con esta cicatriz nunca le voy a gustar.

—La cicatriz no te hace menos hermosa, eres preciosa cariño, si ese chico no ve lo hermosa que eres es muy ciego y tonto —Dijo ella con una sonrisa impregnada en sus labios —Además la belleza no importa, tienes un gran corazón y una muy bonita personalidad —Agrego ella abrazándola levemente.

—Realmente gracias tía —Anne borro su sonrisa al acordarse —¿Te vuelves a ir?

—No cariño, ustedes ya tienen una vida aquí y no quiero que se separaren de este lindo lugar —Respondió ella haciendo que Anne volviera a sonreír —Voy a traer mi tienda a Forks y como soy ahora su tutora legal, viviéremos juntos.

—¡Que bien! —Dijo una muy emocionada Anne.

—¿Por que no descansas un rato?

—Estoy bien, ¿Will porque no llega?

—Fue a dejar a Ally a su casa, no quería que se fuera sola —Lucy se agacho y agarro la pequeña flor de papel tirada en el suelo —No me había dado cuenta que se cayo esta flor, ¿La hiciste tu?

—Que yo me acuerde no, seguro se le cayo a Ally o Ángela cuando vinieron —No le dio mucha importancia —¿Me ayudas a hacer mariposas de papel?

—Claro que si cariño.

Cuando terminaron de hacer las mariposas, Anne salió a dar vueltas y le entrego las bonitas mariposas a las enfermeras que la habían ayudado en ese proceso de recuperación, ellas agradecían el detalle y la abrazaban, pudo divisar al doctor que la atiende y lo llamo.

—¡Doctor Cullen! —No hubo necesidad de repetir dos veces, el la volteo a ver y sonrió mientras caminaba en su dirección.

—¿Te sientes mal?  ¿Algún dolor? —Pregunto el quien no quitaba su sonrisa de los labios y Anne realmente lo admitía el era demasiado guapo.

—Hice estas mariposas, me sobraron nueve... Son para usted y su familia —Estiro sus manos con las mariposas en ella —Quería agradecerle por salvarme la vida.