Después de todo lo acontecido anteriormente, tokito venía 1 o 2 veces cada mes, dependía de su tiempo, ya que tenía muchas misiones.
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Hoy estaba volviendo del trabajo, algo cansada.
Llegando a mi casa estaba tokito sentado, yo fui rápidamente a darle un abrazo para darle mi bienvenida.
—¿Como estás _____?— dijo tokito con un tono cariñoso.
—Muy bien, estaba viniendo de vender— dije muy feliz.
—¡¡¡Ven pasa!!!— tokito asintió.
Estuvimos un rato charlando, el me contó muchas cosas que le pasaron estas semanas de ausencia, me contó de sus batallas y sus compañeros también.
Yo me asusté en algunas ocasiones porque me contaba a detalle sus batallas con demonios, sus estrategias, era algo hermosamente aterrador.
Sin darnos cuenta ya era de noche, entonces tocaba preparar la cena. Por suerte todavía quedaba algo de arroz y otras cosas, asíque optaste por hacer onigiri.
Onigiri: Bola de arroz (de forma triangular u oval normalmente) rellena o mezclada con otros ingredientes y a veces veces envuelta en una una pequeña tira de alga. <3
Tokito me ayudo en la cocina, ya que quería entretenerse y poder ayudarme en lo que sea posible.
También veía como a veces se me acercaba mucho, o me miraba muchísimo cuando estaba distraída o concentrada en algo.
De solo pensar en eso me sonrojaba al instante, sentía maripositas en el estómago.
Ya al terminar de comer, lavamos, secamos y guardamos todo y empezé a preparar los futones.
Ya era la hora de dormir, ví que tokito estaba cepillando su largo cabello, me causo mucha ternura.
—¿Puedo cepillarlo?— dije con una voz tierna.
Tokito se sonrojo un poco —C-claro— me dió el peine y empeze a cepillar, tenía un cabello hermoso.
Ya había terminado de cepillar y Tokito se da vuelta —¿P-puedo cepillar el tuyo ahora?— Yo asentí, mi corazón se acelero y mi sonrojo se mostró.
Comenzó a cepillar, lo hacía de una manera suave y delicada, me daba una sensación placentera, cerré mis ojos y comencé a tararear algo improvisado. Hasta que tokito paro entonces abrí mis ojos.
