(Diez)🔞 Dedo roto

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No me juzgueis XD.

Capítulo dedicado a mi bebé precioso SpringDay_1395

A
Chia291731
Y a
KookieTt9





Jimin

Me coloqué detrás de ella y acerqué mi miembro a su entrada, Emma se quejó, obviamente no estaría de acuerdo. Lubriqué mi polla con sus jugos y seguí la línea hasta su culo.
Inmediatamente, se levantó quedando con los brazos apoyados. Me miró de soslayo con miedo y una súplica para que le explicara mis intenciones.

—relájate— mandé. Mi voz casi animal que hasta a mí me sorprendió.

—Jimin, yo no— balbuceó y terminó gimiendo cuando encontré el nódulo jugoso de su clítoris. Volví a masturbarla con dos dedos dejando el pulgar libre para llegar a su pequeño esfínter.

Es tan pequeña que lo hago sin mucho esfuerzo.

Se removió cuando empujé el dígito dentro de ella, así que tuve que concentrarme en su vulva para desviar su atención y sus gemidos me iban indicando de que manera y en dónde presionar, como si literalmente fuera un instrumento musical y siendo sincero, su melodía era deliciosa.

No costó mucho dilatar su entrada más pequeña, ella estaba muy entregada y extremadamente mojada lo que ayudó.
Entonces lo hice, la embestí lentamente, fascinado con la vista en primera fila.

—idiota— gritó con los dientes apretados. Casi se me sale una carcajada. Era obvio que le dolía, literalmente estaba triturando las sábanas con sus puños y su expresión no era de felicidad. Pero gemía y apretaba tan rico que se me hacía imposible detenerme.

La volví a tomar del cabello para jalarla en mi dirección hasta que no tuvo más opción que apoyar la nuca en mi hombro y su lindo cuello quedó a mi disposición. —dijiste que querías que usara mis manos— le recordé llevando una a su todavía necesitada entrada y con la otra me deleite apretando sus tetas por debajo de la ropa.

Me moví lento detrás de ella. Atento a su estimulación más que a la mía propia. Emma respiraba profundo hasta que su cuerpo se acostumbró a la invasión y cuando lo logró se entregó a mí.

Era ella quien se movía al compás de mis manos, lo hacía espectacular dejándome hundir hasta el fondo. Claro que su intención era tener más contacto de mi mano, pero eso me estaba llevando al borde.
Su culo se frotaba contra mi pelvis en un sube y baja delicioso, mi polla lo agradecía. Mi cuerpo entero y mi mente lo hacían.

Chupé su cuello apretando uno de sus pezones, le encantó, mordía sus labios como si estuviera comiendo algo delicioso, entonces sus jadeos comenzaron a ser más ruidosos, entrecortados por el choque de cuerpos y sus piernas tambalearon anticipando el orgasmo.
Estaba que se derretía en mis manos, Literalmente sentía que sus fluidos inundarían la habitación. Quería lamerla toda, como si yo fuera el dueño de su dulce excitación. No quería desperdiciar ni siquiera una gota, todo debía ser para mí.

Mi mano ya estaba empapada, tuve que aferrar mi palma al hueso de su pelvis dejando mis dedos dentro de ella por qué su movimiento se había vuelto tan violento que perdí la concentración.

Entonces se dejó caer sobre el colchón con la respiración errática y supe que era mi turno.
Sujeté sus muñecas y comencé a penetrarla usando sus brazos para sostenerme y atraerla a mí a base de empujones. Emma jadeaba mordiendo una almohada, pero sus quejidos fueron opacados por el sonido de mi pelvis al golpear sus nalgas con fuerza.

 Un Idiota Encantador Donde viven las historias. Descúbrelo ahora