Classroom of the elite: Alter - Self-Test

Vol. 1: Capítulo 4.2 - Hermano

"Entonces, seguiré adelante cerca del lugar para el club de baloncesto. Nos vemos mañana, si no más tarde, Ayanokouji". Sudou me saludó con la mano.

El área de recepción se abrirá un poco más tarde, pero supongo que Sudou quería merodear cerca de ellos para registrarse temprano.

"Sí, claro. Buena suerte", respondí.

"Está bien. Tú también, Horikita". Sudou saludó a Horikita antes de darse la vuelta para correr.

"No te metas en peleas, Sudou-kun. Yo-" Rápidamente puse mis manos frente a Horikita. Cuando ella me miró confundida, simplemente sacudí la cabeza en respuesta.

"¡No lo haré!" Sudou gritó sin mirar atrás.

"Tienes suerte de que Sudou estuviera demasiado emocionado por el club de baloncesto. Tu comentario injustificado lo habría enojado", le dije.

"Solo le estaba recordando-"

"No tenías que hacerlo", interrumpí, mirándola a los ojos.

No tuve que explicar nada. Dado lo aguda que es, Horikita debería entender lo que mis ojos estaban diciendo: "Lo conozco más que tú", "Tampoco puedes decirle qué hacer". No sabía si mi tono era duro, pero sentía que no necesitaba endulzar demasiado las cosas cuando estoy con Horikita.

"Ya veo... Lo siento..." Esta fue la primera vez. Esperaba que se disculpara con un tono desafiante. Pero en marcado contraste con mis expectativas, Horikita parecía genuinamente apologética. Ahora estoy obligado a darle una explicación o de lo contrario, me sentiré mal.

"Sé más que nadie cuánto puede dañar Sudou a la clase si se sale de control. Estoy haciendo todo lo posible para evitar que algo de eso suceda. No digas ni hagas nada innecesario o simplemente te interpondrás en mi camino", regañé.

"Así que la razón por la que estás... ¿Quién eres tú...?" Horikita murmuró, perplejo.

En este momento, Horikita probablemente concluyó que estoy tratando de "arreglar" a Sudou bajo el pretexto de ser amigos. Realmente quiero hacerme amigo de él, ¿sabes?

Caminé hacia adelante antes de hablar una vez más. "De todos modos, hay más gente aquí de lo que esperaba".

Casi todos los estudiantes reunidos allí eran estudiantes de primer año. Había alrededor de un centenar de personas esperando. Nos paramos cerca de la parte trasera de la habitación y esperamos a que comenzara la feria. Mientras esperábamos, echamos un vistazo al folleto que los estudiantes recibieron al ingresar al gimnasio. El folleto contenía información detallada sobre las actividades del club.

"Me pregunto si esta escuela tiene clubes famosos. Por ejemplo, algo como el karate", reflexionó Horikita.

"Como era de esperar, todos los clubes parecen operar a un alto nivel". Empecé a escudriñar la feria que nos rodeaba.

Por supuesto, esta escuela no podría ser una institución de primer nivel para todos los deportes. Puedo verlo claramente.

"El equipo aquí es lujoso, avergüenza a los profesionales. Ah, pero parece que no tienen un club de karate, después de todo", dice Horikita.

"¿Estabas interesado en el karate, Horikita?" Pregunté por curiosidad.

"En realidad no. Lo acabo de estudiar hace mucho tiempo", respondió Horikita.

La forma en que dice que... Las palabras de Horikita eran adecuadas para alguien que estaba realmente entusiasmado con el club de karate. El tono y el contenido de su discurso no cuadran a veces.

"Gracias a todos por esperar, estudiantes de primer año. Ahora comenzaremos la feria de clubes. Un representante de cada club explicará su función. Mi nombre es Tachibana, la secretaria del consejo estudiantil y la organizadora de la feria de los clubes. Es un placer conocerlos a todos", anunció la pequeña de tercer año llamada Tachibana.