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PDV ANDRÉS

Llegamos al campo de fútbol donde Flex iba a jugar, ahí me encontré con Mike, aquel omega de aroma a chocolate y ojos carbón.

— Hola Mikel — lo saludé y el me miró.

— Hola

— ¿Cómo estás? — le pregunté para hacerle la conversa.

— Bien — me acerqué y lo abrazé, diciéndole que me daba gusto verlo denuevo, ya no pasábamos mucho tiempo por mi cambio de escuela.

Se separó de mí y miró a mis espaldas encontrando aquel alfa de ojos verdes esmeralda.

— Hola, soy Mike — saludó Mike.

— Ari. Mucho gusto — saludaron entre si con una sonrisa ambos.

— Ah si, ¿quieren uno? — preguntó mostrando los hot dogs que tenía en su mano.

— No gracias, mejor voy a comprar uno para y para Ari.

— Yo puedo traerlos — se ofreció el pelirrojo a mis espaldas — ¿Ketchup y mostaza?  — asentí — ¿Asado?

— a-ah

— Ya se — me interrumpió y me dejó con Mike quien había visto toda mi escena de nervios con el príncipe.

Mike esperó hasta que Ari se vaya lo suficientemente lejos para molestarme, ya sabía sus intenciones solo con su expresión.

— Okey, ¿El príncipe? — me miró con una cara divertida y burlona. — ¿Que sucede? ¿Te gusta o que? — dió una risa.

— ¿Que? ¿De que hablas? — me hice el loco.

— Tienes algo en la cara, ¿¡Te gusta verdad!? — casi grita pero yo lo intenté callar.

— ¡Shh! No... No lo sé — Mike me conocía y sabía cuándo mentía.

— ¿Asado? Lo traeré. Te trabaste y no pudiste ni terminar una oración. ¿Te gusta cierto? — no iba a parar de molestarme hasta que lo afirme.

— ¡Ya cállate que viene! — le golpeé el hombro antes que Ari llegué, pero no tardó más de 3 segundos en ponerse a mi lado izquierdo, mientras Mike estaba en el derecho.

— Ten, ya no quedaban asadas así que te traje una normal — me dió el hot dog y pude por primera vez sentir el calor de su mano, estaba calientito causando un cosquilleo desde mi espalda hasta mis pies.

— G-gracias — tartamudeé, causando una ligera sonrisa y risa en Mike.

Empezamos a animar a Flex quien jugaba bien para su equipo.

Me volví hacía Ari y el grito — ¡Vamos Bjärstad! — si se divertía.

Sentí un ligero golpe en mi brazo derecho, encontrándome con la mirada burlona de Mike, empezó a golpear ligeramente mi codo con el suyo. Molestándome.

Empezé a grabar con mi celular y por un milisegundo apunté hacia Ari, no creo que le moleste, total, vivió toda su vida en algo público, como un famoso.

[•••]

Al terminar el partido nos subimos a las motocicletas de Mike y Flex. Y para mí sorpresa Ariel también se subió, no sabía que podía ser como una persona normal.

No era caprichoso como todos los ricos egoístas de Jasbin. El era diferente, sencillo, humilde y sin llamar la atención como todos.

Hubo un punto en el que pude sentir por un segundo su mano, aún con las motos en movimiento, traté de tomarla pero no lo logré. Miré la mirada de mis amigos que conducían, uno aceleró y otro bajó la velocidad, logrando que nuestras manos se toquen denuevo.

-La corona- (Spartor - Omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora