Es de noche. Las aceras ya no cuentan ninguna historia de amor, el cielo vuelve a taparse con las frías sabanas que tarde o temprano acaban siendo lágrimas, la vida se ha tomado un descanso y cada niña en esta tierra desea ser mujer, y cada hombre sufrir por amor, las máquinas de escribir escasean como las cartas de amor que esperan con fechas escritas un nauseabundo y romántico recuerdo de amor.
la soledad; esa inminente presencia de la nada se hace presente, la luna; el residuo de un cortauñas nos cuenta historias de amor falsas que nadie alcanza a desmentir, y se siente escapar la vida por cada suspiro envuelto en aliento de cafe, Las horas pasan, Más como segundos que como horas y la infinidad de la noche se acaba en un momento. Que nunca llega, Veo a lo lejos una sombra de luz que se aproxima, son las seis, las montañas tratan inútilmente de detener su salida, lo veo venir, sonriente, creo inútilmente que puedes ser tú, abro los ojos como abro los brazos y te espero, el cielo se despeja y el sol sale, sólo el sol, nada más, la noche se aleja en el horizonte, y espero una noche más para esperarte una noche más, de nuevo, otra vez.