IV

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—Ya voy—

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—Ya voy—. Sasha se ofreció, corriendo hacia la puerta para tomar la pizza que acababa de ordenar. Sus amigos habían llegado de regreso de su país natal, y Sasha estaba agradecida de que ellos pararan para verla.

Marcy no la saludó esa mañana y ella casi se siente mal por lo que dijo el día anterior... Casi.

Sin embargo, todos esos pensamientos de arrepentimiento disminuyeron cuando se encontró no con otra que su vecina de al lado, Marcy Wu, sonriendo enormemente y con dos cajas de pizza, afuera.

—¡Hola, Sasha! ¿Sabías que soy repartidora de pizzas a tiempo parcial?

La rubia negó con la cabeza, revisando en su bolsa para pagar por la comida.

—Es un hermoso día soleado hoy. Debería estar atendiendo algunas tareas y tal vez ir a la playa, pero estoy atascada aquí repartiendo pizzas. Oh, por Dios, no sabes qué emocionada estaba cuando escuché que iba a entregarte pizza a ti, estaba casi gritando, y estuve pensando que... tal vez yo podría ayudarte a comer estas pizzas, quiero decir, en cierto modo tengo tiempo y...

—¿Marcy?—La Waybright la interrumpió tomando las pizzas de sus manos.

—¿Sí?

—Cállate.

—Cállate

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Sunny days | SasharcyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora