¿Cómo No Amarte? [S×S]

XVII. Por su culpa

El castaño entró en la cocina después de haber llevado a la esmeralda a casa de su hermano. Saludó a Mei Ling quien preparaba algo para almorzar.

Mei Ling: Escuché que le llevaste al templo antes de ir con su hermano mayor... (Shaoran asiente).

Shaoran: Escuchaste bien, ya era momento de que fuéramos juntos (Contesta). Tengo que ir a los sembradíos, es temporada de siembra y por lo tanto surgen más cosas por supervisar (Comentó mientras se estira en su lugar), pero antes de irme, quería pedirte un favor.

Mei Ling: ¿Qué ocurre?

Shaoran: Necesito que muevas tus influencias y averigues algo...

Mei Ling asintió.

Después de su charla, Shaoran tomó sus cosas y se fue a los sembradíos.

Sin duda le prepararía una linda sorpresa a su amada esposa.

Al anochecer, Shaoran regresó a su hogar un tanto cansado después de un largo día, y cuando entró, se encontró con Mei Ling y Jia, quienes le miraron con angustia.

Shaoran: Buenas noches, ¿Sucede algo?

Jia: Shaoran... (Le llamó) Presiento que algo malo va a pasar... (Menciona asustada).

Shaoran: ¿A qué te refieres?

Jia: Llegué aquí con la esperanza de encontrarte a ti y a tu mujer, ¿Dónde está tu esposa?

Shaoran le miró con confusión.

Shaoran: Ella fue a quedarse en casa de su hermano unos cuantos días.

La chica palideció y soltó un jadeo.

Jia: Hace unos días mi esposo me dijo que debía advertirles sobre un posible ataque que mi padre estaba planeando contra ti, pero debido a que mi pequeño enfermó, no pude venir yo misma a decirte, hasta ahora.

Mei Ling: Shaoran, Jia me comentó que su esposo salió desde la mañana junto con su padre sin mencionar a dónde irían, y que no han regresado desde entonces. Ella está muy preocupada...

Shaoran abrió grande los ojos dándose cuenta de inmediato. Tomó su chaqueta y salió corriendo de la casa, mientras escuchaba como ambas mujeres gritaron su nombre queriendo detener su repentino arranque de desesperación.

Del otro lado de la sala, Tomoyo se encontraba detrás de la entrada principal, escuchando a escondidas mientras cubría su boca con horror, dándose cuenta también de lo que sucedía.

Tomoyo: No podrá hacerlo solo... (Murmuró alejándose a toda prisa).

Por otro lado, cuando apenas el sol comenzaba a ocultarse...

Sakura se encontraba lavando y planchando un tanto de ropa que tenían por entregar, mientras que su hermano mayor se encontraba en el jardín terminando de arreglar unas carretas que le habían encargado.

Touya: Esto es realmente agotador... (Mencionó con cansancio).

Y de repente, observó como de la nada, alguien se posaba en la entrada de su jardín. Un hombre mayor con ropas aparentemente finas le miró con seriedad. Le pareció conocido de algún lado.

Touya: ¿Qué se le ofrece?

Sakura comenzaba a acomodar la ropa que acababa de planchar, cuando de repente escucho un estruendoso ruido provenir de afuera.