-¿Como que estás embarazado?- exclamó el castaño levantándose como resorte del sillón.
-Yo tendré al bebé solo, me iré a vivir con mi madre a Holmes Chapel y tu puedes seguir con tu vida.- habló Harry resignado, pero seguro de su decisión.
Dónde H...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
El lunes por la mañana, Louis no quería levantarse, no quería ver a Harry, no quería saber nada de nadie. Todo el fin de semana estuvo escondido en su cuarto, no le contestó a su hermana y tampoco le abrió la puerta a su amigo.
Tuvo que pararse de su cama, después de que Tom le dijera que seguía en Australia y tardaría más. Ya había sufrido en silencio por lo que se dio un baño, puso su mejor cara y le sonrió a su sobrino cuando subió a su auto. El pequeño no tenía la culpa y él y su hija serían su motivación para seguir sonriendo día a día.
Dejó a su sobrino en la escuela, el cual, en cuanto vio a su maestro, corrió hacia él. Harry al darse cuenta de que Parker había llegado, esperaba que Louis viniera detrás de él, pero cuando volteo en su dirección, vio cómo el castaño ya iba de regreso al estacionamiento.
Al salir de clases fue algo parecido, Harry lo llamó cuando vio venir a Louis y ese fue su error. El ojiazul vio salir al niño y se quedó en su lugar, esperando por él. El rizado lo vio a lo lejos, como le sonreía.
-¿Puedo ir a despedirme de Darcy?- preguntó Parker inocentemente.
-Si, pero solo un momento- lo acompañó al salón de la niña, evitando totalmente mirar hacia el otro lado del pasillo.
-Hola, Louis- saludó Clara.
-Hola, señorita prima de la rubia- contestó Louis, haciéndola reír.
-Supongo que ya les dijo, Niall- Louis asintió- Bueno, no era un secreto, pero si, somos primos.
-Hola, Lou- Darcy llegó a saludarlo, abriendo sus brazos para que él la envolviera con los suyos.
-Hola, princesa- besó su mejilla- ¿como estás?
-Bien, ¿Te divertiste en la fiesta de mi tío, Ni?- preguntó ilusionada. Louis no tenía el corazón para darle una respuesta negativa.
-Por supuesto, te vi a ti y vi a la rubia- le sonrió tierno.
-Y a mi papi también- su sonrisa flaqueo un poco, ella no debía verlo débil.
-Si, también a él- su sonrisa seguía forzada- Ya nos tenemos que ir, Parker despídete- el niño se abrazó a Darcy.
Dijeron adiós y Parker tomó a Louis de la mano, se despidieron de Clara y caminaron al estacionamiento. Todo esto bajo la intensa y confundida mirada de un rizado de ojos verdes.
