Los días pasaron hasta que finalmente llego nuevamente el día de la practica, Haru se encontraba nerviosa debía practicar si quería seguir el paso de su maestro; desde aquel sueño con el barón hace unos días no volvió a soñar con él o con algo relacionado al reino de los gatos, era como si ahora su mente le negara esa fantasía
Toto: ¿lista para irnos?
Haru: Claro
Nuevamente en el aire, gracias a la experiencia de Toto llegaron rápidamente hasta la oficina de asuntos gatunos donde ya eran esperados
Barón: Bienvenida de vuelta
Haru: *emocionada* Lista para aprender
Barón: Primero ¿Qué te parece tomar una taza de té?
Haru: Claro
Al entrar encontraron a Muta afinando las cuerdas del violín, desde que supo de las clases de baile empezó a practicar a tocarlo nuevamente, aun si era un gato malhumorado quería ayudar a su amiga
Muta: *bromeando* Chiki, que será esta vez, ¿un tornado o un terremoto?
Toto: El día parece muy bueno como para que pidas desastres
Haru: Esperemos que nada suceda *tomar su té* barón, ¿se encuentra bien? parece cansado
Barón: Nada de lo que deba preocuparse, la tormenta nos quito un día de practica así que hay que aprovechar esta al máximo
Haru: *Decidida* En ese caso, comencemos de una vez
Afuera todo estaba listo, los tonos rojizos de la tarde le daban un ambiente especial, el trinar de las aves a lo lejos entregaba una dulce melodía que hacia juego con lo próximo a seguir, el barón se encontraba sin su sombrero de copa y sin su chaqueta lo cual facilitaba el moverse, se separaron de Muta para tener más espacio y una vez preparado dio la indicaciones básicas del vals, terminado empezó la practica
Barón: Muta, nos harías el favor
Muta: Ya escuche *Empezar a tocar*
Esta vez la música era lenta y suave, dando tiempo al principiante a acostumbrarse al ritmo, el barón era el dominante con la responsabilidad de guiar a Haru, dándole indicaciones puntuales para mejorar sus movimientos
Barón: Haz vuelto a estar tensa, trata de relajarte
Haru: Estoy tratando *intentando concentrarse* "vamos Haru, piensa en algo que te tranquilice"
Barón: Al contrario Haru, no dejo de pensar en ti
Haru: "¡Eso no!" *sonrojada*
Aquella distracción paso factura con una pisada al pie del barón que lo hizo detenerse
Haru: Perdóname, no quise hacerlo *preocupada* ¿Se encuentra bien?
Barón: Es normal cometer errores *aguantando el dolor* le pido no distraerse
A lo lejos la voz de Muta llamo la atención de los dos, claramente se divertía por lo sucedido
Muta: ¡Primera pisada del día! jajajaja
Toto: Ten algo de simpatía
Muta. Esto es mas divertido *susurrando* ¿lograste enviar el mensaje?
Toto: *susurrando* Esta dispuesta pero no se sirva de algo
Ambos voltearon a mirar a la parejita, el barón volvía a repetir las indicciones de los pasos a Haru quien parecía mas atenta que antes
Barón: De nuevo
Las horas pasaron mas rápido de lo que uno esperaría, Haru no sentía las piernas de tanto practicar a diferencia del barón quien no sentía los pies después de las pisadas, ciertamente aquello era un desafío pero no se rendiría fácilmente
Muta: *divertido* Tienes talento chiki, nunca había visto tantas pisadas a un solo pie
Toto: *consolándola* Solo necesitas practicar más
Haru: Gracias por tus palabras Toto
Muta: *molesto* ¿y que hay de las mías?
Barón: Esperar que uno aprenda de inmediato es una fantasía, pero has mejorado
Haru: Es bueno saberlo
Barón: Esto amerita una bebida helada, las traeré
Haru: *alegre* Le ayudare
La noche había llegado y con ello un cielo nocturno cuyas estrellas parecían brillar más intensamente que nunca, aquello parecía darles la escusa perfecta a Muta y Toto de quedarse afuera para tomar aire fresco, mientras Haru ayudaba con las bebidas junto al barón
Barón: Este es té de limón, use té negro para hacerlo
Haru: *beber* Sabe muy bien
Barón: Me alegra escucharlo, si lo desea puedo- *detenerse*
Haru: ¿Se encuentra bien?
Barón: *cubrirse los ojos* Solo me sentí mareado
Haru: No ha dormido, ¿verdad? Muta dijo que se encontraba ocupado con el papeleo
Barón: Descansare cuando me vuelva una estatuilla, por el momento debo seguir trabajando- *dolor de cabeza*
Haru: Eso es todo *tomar de la mano* va a dormir
Mientras las miradas sorprendidas de Muta y Toto se veían al borde de la ventana, habían decidido dejarlos un tiempo a solas pero al ver que se tardaban decidieron dar un pequeño vistazo, no podían escuchar nada pero parecía que algo que dijo el barón hizo que Haru lo sujetara de una mano para llevarlo al piso de arriba
Toto: ¿Acabas de ver lo mismo que yo?
Muta: Pero que chica mas agresiva
Toto: No es muy pronto para hacernos ideas, talvez ¿solo quiere una practica privada?
Muta: *Mirando a Toto* Acabas de hacerlo peor
A su vez, Haru llevaba al barón hasta una de las habitaciones, una vez llegaron ella le hizo entrar para luego cerrar la puerta, dejando al gato dentro y ella afuera
Haru: *Decidida* No abriré la puerta hasta que haya dormido
Barón: Te comportas como una niña, abre la puerta
Haru: y usted como un gatito
Barón: *sorprendido* "¿Me ha dicho gatito?"
Haru: ¿Por que no quiere dormir? ¿Es tan importante ese papeleo?
Barón: Si termino mi trabajo podre tener tiempo para usted *vista nublándose* "esto es malo"
Haru: Pero si se excede tampoco tendrá tiempo
Parecía que habían quedado en un punto muerto, Haru nunca se imagino discutiendo con el barón, pero sabía que en ocasiones podría exigirse de más. Pasaron unos minutos en completo silencio hasta que un sonido sordo sobre salto a Haru
Haru: *abriendo la puerta* ¡Barón!
Lo encontró el suelo, parecía haberse desmayado por la falta de sueño, al intentar auxiliarlo una de sus mano la sujeto
Barón: Atrapada *sonriendo triunfal*
Haru: Me ha engañado
Barón: Y usted intentaba encerrarme *divertido* sea más astuta para la próxima
Haru: Pensé que realmente le había pasado algo malo *lagrimear*
Barón: Haru.. no llores, prometo cuidarme mejor
Haru: ¿Lo promete?
Barón: Lo prometo
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El gato del bastón (Haru en el reino de los gatos)
RomanceHa pasado un tiempo desde aquella emocionante aventura en el reino de los gatos, todo ha vuelto a la normalidad en la Oficina de Asuntos Gatunos, oh eso parece, ya que el barón no puede dejar de pensar en cierta joven, sin saberlo se ha metido en el...