°capítulo 05°

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20 de mayo de 1850

Un día beomgyu salió a investigar más sobre plantas, mientras hacia eso estaba deseando que el castaño apareciese y poder hablar, ya que llevaban semanas sin verse, pero nunca lo hizo, no apareció. Al volver al Castillo se encontró con el rey, haciendo que el pelinegro se espantase al verlo.

—Qué haces? —Preguntó el rey.

—Nada... yo sólo estaba investigando, por? —Respondió beomgyu.

—Quiero que me digas todo lo que haz encontrado, ahora mismo. —Ordenó el rey.

—Claro, pero... ¿qué pasa? —Dijo beomgyu.

—Eso no te incumbe, sólo dime que has descubierto antes de que sea tarde para tú madre. —Dijo el rey.

—De acuerdo, le dire todo. —Respondió beomgyu.

—Perfecto, puedes decirmelo en la hora de la comida. —Dijo el rey.

—Bueno, ordenare todo para que puedas leer bien. —Dijo beomgyu.

—No, tú me lo dirás, no quiero leerlo. —Dijo el rey y antes de que beomgyu pueda decir algo el rey se fue.

—Ash, que grosero. —Dijo beomgyu haciendo pucheros.

Ya era la hora de comer y beomgyu no podía pensar en nada que no tuviera que ver con el castaño, pero tendría que dejar a hacerlo para poder darle al rey lo que quería sin ser castigado por hacer algo mal.

—Bueno, empieza a hablar. —Ordenó el rey que estaba ya sentado comiendo.

—Okey... bueno, qué quiere saber? —Dijo beomgyu.

—No sé, qué hay de la lavanda?, sirve para la medicina? —Preguntó el rey.

—Mmm, tal vez... La floración de la lavanda varía cada año en función de las variedades de lavanda, y también debido a razones climáticas, de altitud y latitud. En las zonas altas hace más frío y es más tardía. En general, la floración de la lavanda en la Provenza se extiende de mediados de junio a mediados de agosto. Y estamos en abril y en una zona alta, será difícil conseguirla pero puede que funcione porque sirve como; Sedante, antiinflamatoria y antibacteriana. Lo cual nos podría dar mayor oportunidad de que funcione. También podríamos utilizar la Flor de tila; Para el insomnio y el estrés.
O también pude ser la flor
Melisa; Para problemas nerviosos, estrés, insomnio y taquicardias. Tal vez eso el lo que le afecte a mamá. —Dijo beomgyu.

—No, busca algo más fuerte, tú mamá no sólo tiene un simple problema de estrés o insomnio. —Dijo el rey.

—Bueno... en ese caso seguiré buscando, intentaré tener algo para antes de marzo. —Dijo beomgyu con seguridad.

—Eso espero. —Dijo el rey.

Y con eso siguieron comiendo sin volver a tocar al tema. Al terminar de comer, beomgyu llamo a su madre.

—Mamá —hablo beomgyu llamando la atención de la señora.

—Sí? —Respondió la señora.

—Lo estuve pensando y... le diré a yeonjun lo que sentí, cuando lo vea lo haré. —Dijo beomgyu convencido.

—Muy bien, en ese caso dependiendo de lo que te diga lo podrás traer a casa, eso si sin que padre se de cuenta. —Dijo la señora. Para los ojos de beomgyu su papá era un poco malo con él y su madre, por cómo los trata y los obliga a hacer cosas que no siempre quieren hacer, pero su mamá dice que él los quiere, a su modo pero los quiere.

—Bueno mamá, tengo que irme a seguir con mi investigación, nos vemos luego. —Dijo beomgyu dándole un beso en la frente a su mamá como forma de despedida.

—Sí hijo, vuelve pronto. —Fue lo único que dijo la mamá de beomgyu.

Y beomgyu salió del Castillo, por primera vez el rey lo dejo salir más lejos de lo normal, se dirigió a un bosque que vio cuando salió con yeonjun y le enseñó a hacer mariposas de papel, todo era normal. Beomgyu anotaba todo lo que él creía necesario para su investigación, encontró tipos nuevos de hongos, hierba y unas flores. Él estaba tan metido a lo que estaba escribiendo que no se dio cuenta que desde hace un rato lo andaban persiguiendo. Cuando por fin se dio cuenta de que lo perseguían intento no actuar de manera nerviosa y fingió no haberse dado cuenta, pero algo salió mal, tropezó, haciendo que hiciera un ruido de dolor, ocasionando que la persona que lo seguía saliera de su escondite y corriera hacia él.

—Estas bien?! —Dijo la persona.

—Sí... qué haces aquí? —Respondió beomgyu.

—Larga historia, no te lastimaste? —Respondió la otra persona.

—No, estoy bien, ¿por qué hasta ahora te vienes apareciendo? —Preguntó beomgyu.

—Bueno... tuve unos problemas pero todo bien. —Dijo la persona extendiendo su mano para ayudar a beomgyu a levantarse. —Por dios beomgyu!, tu rodilla! —Dijo el chico todo asustado.

—Qué?, AAAAAHHHH!!! —Gritó beomgyu.

—Como sucedió eso?! ——Dijo el chico todo asustado.

—No se yeonjun haz algo!, haz que deje de salir sangre!!! —Dijo beomgyu muy desesperado.

—Pero cómo?!, traes algún trapito o algo así? —Preguntó yeonjun.

—Sí pero... ahí traigo unas cosas que no se pueden romper ni mucho menos tirar. —Respondió beomgyu.

—Lo que faltaba, a ver... —Dijo yeonjun mirando a todos lados en busca de una solución rápida, le preocupaba que a beomgyu le duela la rodilla. —Ya se! —Dijo yeonjun mirando su chaleco.

—Qué ya sabes? —Preguntó beomgyu atento a lo que hacía yeonjun.

—Sé como parar el sangrado. —Respondió yeonjun mientras tiraba de su propio chaleco haciendo que este se rompa y quede un trozo de tela en sus manos.

—Con eso? —Preguntó beomgyu con de desagrado.

—Sí. Perdona lo poco que es pero, no hay otra forma. —Respondió yeonjun mientras pasaba la tela por debajo de la rodilla de beomgyu y atandola con un nudo, haciendo que deje de sangrar. —Listo. —Dijo yeonjun.

—Woow, gracias... —fue lo único que dijo beomgyu porque fue interrumpido.

—Escucha... tengo algo que decirte. —Dijo yeonjun.

—Yo igual tengo algo que decirte... —También dijo beomgyu.

—Okey, puedes... hablarlo tú primero —dijo yeonjun.

—Eh, no... mejor tú primero. —Respondió beomgyu.

—Seguro? —Pregunto yeonjun.

—Sí... seguro. —respondió beomgyu.

—De acuerdo... escucha, no se como decirlo, no es como que quisiera, es decir, si quiero decirlo pero no ahora... el punto es que lo diré y tengo miedo de hacerlo. —dijo yeonjun muy rápido, y beomgyu sólo lo escuchaba con tanta atención. —No quiero que esto sea raro, es lo menos que quiero... espero esto no se te sea raro... pero quiero que lo sepas y me da miedo que no lo aceptes, el punto es que... ya, lo diré sin más. —Dijo yeonjun ya más tranquilo. —Me gustas. Me gustas demasiadl que me asusta, no sé si esto es correcto, no sé sí debería sentirme así siquiera. Pero entre más lo ignoro más fuerte se hace ese sentimiento. —Fue lo único que pronunció yeonjun y bajo la cabeza.

Yeonjun esperaba una respuesta con palabras, pero no la obtuvo. Obtuvo otra cosa a cambió, beomgyu tomo la barbilla de yeonjun haciendo que este alzará la cabeza, lo miro a los ojos y... puso sus labios sobre los de yeonjun, dando un beso tierno sin mover los labios, lo tomo del cuello y se quedó así un rato. Después se separó dejando a yeonjun confundido y a él con las mejillas rojas.

—No se mucho sobre esto, pero... mamá dijo que te lo tenía que decir, que tú lo entenderias, y bueno... aquí va, cuando te veo, siento mi corazón saliendo de mi pecho... y cuando sonríes también, nose desde cuando pero, siento algo por ti, mamá dice que eso es amor... entonces creo que... te amo. —Dijo beomgyu.

Ese día yeonjun volvió a creer que el amor existe y la prueba viviente de eso era en chico frente a él, él chico más lindo de mundo y con sentimientos increíbles.

The Butterfly Palace ʚĭɞDonde viven las historias. Descúbrelo ahora