El subterráneo de la PM era oscuro y húmedo, con los muros y el piso manchados de sangre, lo único que se apreciaba eran una mesa, tres sillas, varias cadenas pegadas a la pared y un estante con elementos de tortura. Pero había algo más que sólo sabían los ejecutivos: si girabas el quinto destornillador, se abría una puerta en el piso de un rincón, bajabas una larga escalera y llegabas al piso -2.
-Mori llegará pronto -dijo Dazai con la voz y actitud fría que lo hacían tan temido en la PM-. Lo más probable es que se asegure que son ustedes y los mate acá mismo... Aunque no estaría mal divertirse antes. - Sonrió enfocando su vista en los ojos del ruso que no demostraban miedo, sino más bien una preocupación camuflada. Los ojos de un tono granate cambiaron su foco y, cuando llegaron al pequeño, perdieron todo rastro de brillo. Avanzó un poco, agarró fuerte aquel cabello anaranjado y lo acercó a él para ver directamente esos ojos capri que, en secreto, le fascinaban-. Te di una gran oportunidad Prototipo-258. No debiste intentar vivir como un humano...siendo mi perro y eliminando todos esos "sentimientos" de tu cabeza eras feliz.
-De paso podrías pedir que extraigan los tuyos ¿no? Después de todo, cuando me intentaste besar hace unos días se notaba tu desesperación y frustración por no volver a tenerme.
Los dos guardias que protegían al captor y el ruso intentaron disimular su asombro, pero no pudieron, nunca imaginaron al temible ejecutivo más joven implorando cariño. De un segundo a otro, se escuchó un fuerte sonido, seguido de un chorro de sangre. El puñetazo que le dio Dazai en medio de la cara logró romper la nariz y el labio de Chuuya, quien solo sonrió satisfecho.
Se oyeron pasos de tres personas por lo que el alto retrocedió limpiándose la mano.
-¡Ah, Dazai-kun! Al parecer nunca seguirás mis órdenes. Te dije que necesitaba preguntarles algunas cosas antes de...-No necesitó terminar la frase.
Detrás del guardia que acompañaba al Jefe, se oían pasos delicados y femeninos bajando apresuradamente y, antes de llegar al penúltimo escalón, se detuvieron por un instante. Unos ojos color cereza derramaron dos lágrimas, algo que se prometió jamás hacer. La pena, la lástima e incluso la culpa que sentía por fallar en la crianza de lo que para ella era lo más cercano a un hijo. Bajó los dos últimos peldaños rápidamente.
-Mi niño lindo, ¿por qué lo hiciste? -Quería acariciar su rostro, pero Mori la detuvo.
-Kouyou, sabes lo que sigue, no importa quien sea, traicionó a la Port Mafia y estas son las consecuencias.
-Por favor Mori, no lo mates. No me arrebates a mi pequeño. -Rompió en llanto. Solo podía observar a la persona que tanto amaba encadenado, colgando de la pared con su fina cara ensangrentada y ese cabello tan único que a ella le fascinaba cepillar, ahora todo enmarañado-. ¡Todo esto es tu culpa! ¡Maldito malnacido! Intentaste matar a Kyoka y ahora lo usas a él ¡¿Por qué no solo atacas directo a la Port Mafia?! Eres un puto cobarde. -Pasó de llorar como una niña a provocarle un corte en el cuello con su Demonio Dorado.
-¡Basta! Contrólate o deberás subir -dijo el Jefe molesto.
Fyodor la miraba atento, con una mirada fija que no demostraba emociones, parecía que no entendía nada. Por desgracia para él, sí lo hacía.
-Mori-san ¿por qué solo le dejaste esposas anuladoras a Fyodor? ¿Confías en que un traidor y un enemigo no te atacarán? Mis esposas son comunes y corrientes.
El otro solo sonrió y respondió contemplando aquellos ojitos que aún guardaban un toque de inocencia-. Sé que tú no lo harás. Y si él intenta hacer algo, hay tres metralletas de 50 balas, cada una apuntándole directamente. -Sonrió esperando que ocurriera-. Ahora bien, vamos al punto-. Se situó frente al traidor y comenzó a interrogarlo-. ¿Cuándo y dónde se conocieron?
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Crimen y Castigo
FanfictionUn criminal y un Mafioso enamorados de la misma persona ¿A quién escogerás, Chuuya? Datos que deben saber para leer este fanfic: -Fyodor no tiene anemia. -Chuuya tiene más resistencia al alcohol. -Dazai nunca abandonó la PM. -Contiene spolilers del...