Capítulo 6.

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Cuando el joven Lee era apenas un muchachito de catorce años fue separado de su familia, había sido tomado como esposo temporal para la familia Hwang. Su familia era pobre, aún tuvieran un pequeño negocio de mantequilla y leche no se podía ni acercar a la riqueza que desbordaban los Hwang.

Su padre cometió el error de presumir a su hermoso niño omega, alegando belleza extrema. Cosa que no pasó inadvertida por el señor Hwang quién sin temer amenazó al señor Lee de mandarlo a la quiebra si no daba a su hijo, en cambio si era cooperativo le daría una recompensa.

Minho tomo la decisión de despedirse de sus padres y hermanos, no podía permitir que su familia padeciera hambre y frío. El invierno se acercaba y la amenaza era más de vida que de bienes.

Cuando miro fuera del palanquín, limpio sus lágrimas al ver la casa Hwang tan cerca. Respiro temblando, y comenzó a negar.

—Vamos, tu puedes. No será tan malo— se alentó.

Al bajar nadie lo esperaba, más que una empleada. Quién lo guió a asearse antes de conocer a la familia.

La ropa que le dieron era un gran lujo para él, tembló al ver los hermosos bordados de flores en su ropa. Y se sonrojó cuando miró el listón negro que debía poner sobre su cuello. Esto solo lo hacían los niños ricos, admitiendo que aún no tenían marca y eran castos, poniendo su persona en matrimonio a quien lo desease.

Cerró los ojos cuando se miró al espejo, al final de nueva cuenta su largo cabello fue recogido en un moño, dejando sus rebeldes cabellos adelante. Se veía muy diferente y se sentía perdido al reflejo.

Al entrar a la sala donde los padres y quién sería su alfa lo esperaban. Era una pareja de un alfa y una omega, en medio un adulto joven de aproximadamente veinte años de edad. Lo miraban y en cierta forma lo juzgaban con esta.

—Señor, señora y joven maestro, yo soy el cuarto hijo del granjero Lee, me han mandado aquí a servir como esposo a su noble casa. Mis padres me han llamado Lee Minho— Se presentó sin permitirse tartamudear y dar una inclinación.

—Eres bien educado para venir del pueblo, tranquilo niño. Aún seamos ricos no somos de la realeza.— hablo el alfa mayor, asiendo que Minho afirmará con la cabeza para después negar —Tranquilo toma asiento— pidió.

Minho de manera tranquila lo hizo, demostrando que realmente se preparaba para en algún momento casarse. Aún no fuera un noble alguien con el mismo o más rango que su padre.

—Me alegro que llegarás bien, aún no fuera un viaje largo sé que debió ser duro para ti despedirte de tu familia— el alfa trato de cierta forma dar una bienvenida cálida y un poco de consuelo, pero al final la mierda salió a la luz —Pero los omegas para eso nacieron, asi que en este momento comienza tu labor en esta casa.

—Si, señor— afirmo Minho temiendo por el trato que le darían.

—Mi señor, quiero aclarar algo— pidió la omega al alfa, cosa que se le permitió. —Joven Lee usted vino a ser concubino en esta casa, no es esposo y no llevará marca.

—¿Concubino?— murmuró sorprendido, bajo la mirada resignado y asintió —Si, señora— sus iluciones cayeron.

Al ver los ojos filosos del joven alfa le rompieron aún más el corazón.  

Concubino, al final la familia Hwang lo despreciarían por siempre.

~

Hyunjin era realmente tierno en sus caricias, aún dejara marcas en su piel estás eran sumamente cuidadosas. Ambos disfrutaban el momento de fundirse uno con el otro.
El alfa embestía de manera rápida y un tanto descontrolado, no llevaba ya un ritmo como tal.

Minho en cierto punto al decir incoherencias fue callado con un beso, uno que le daba seguridad a su omega y se dejaba controlar por ese dulce alfa.

Alfa~— chilló cuando Hyunjin separó sus labios y se ocultó en su cuello comenzó a hundirse aún más dentro de él. —Alfa...

Volvió a llamar, justo cuando sintió no poder aguantar más liberó su orgasmo.  Apretando de forma inconciente su entrada penetrada. Causando que el alfa gozará de una mayor estrechez, justo en ese momento su vientre se calento, su cuerpo se sintió liviano y el nudo comenzó a formarse.

—¡Yongbok!— gritó el alfa.

En ese preciso momento Minho salió de su ensoñación, poniendo sus manos alrededor de su cuello evitando así una marca.

—Soy Minho— susurro, sintiéndose herido.

El alfa lo miró un momento, para después negar. Quedando estático al mirar de manera detenida al omega debajo de él.

—¡¿Que haces aquí?!— gritó de igual manera saliendo de la neblina de su celo.

—¡Agh! ¡Espera!— pidió Minho cuando fue empujado. Le dolió el hecho de aún seguir juntos.

—¿Qué mierda?— Hyunjin se quedó quieto al ver que había anudado dentro del contrario.

Ambos se quedaron quietos, el omega se negaba a verlo y Hyunjin solo podía desprender su aroma de molestia.

Las maldiciones de Hyunjin no paraban, el omega con todas sus fuerzas trataba de no llorar, al final lo había lastimado de mil formas indescriptibles.

—¡Agh!— chilló Minho una vez sintió el nudo se comenzaba a desinflamar. Lo saco, no soportaba estar más tiempo frente a Hyunjin así.

—¡No seas animal! ¡Duele!— gritó Hyunjin, pero una vez separados Minho solo atinó a recoger su ropa y salir huyendo del cuarto del alfa.

Una vez llegando a la habitación de Taehyun ahí se encerró, comenzando a guardar ropa y cosas del niño.

Unos golpes en la puerta lo hicieron saltar, limpiando sus lágrimas con enojo volteó dispuesto a pelear. Cuando vio la cabellera rubia artificial de la señora Hwang solo regreso a cerrar la maleta.

—Minho— susurró la alfa apenas entró a la habitación.

—Vamos, él tiene sus supresores ya. Vamonos— tomo a Taehyun aún dormido y dejo la habitación sin mirar atrás.

Apenas salió miró como Hyunjin de igual manera iba a salir pero al verlo solo atinó a cerrar su puerta, Minho apretó los dientes para no maldecir. Atinó simple a seguir caminando.

Una vez dentro del ascensor comenzó a llorar, su omega se sentía roto. Se sentía el peor compañero, de cierta forma se sintió sucio.

Sabía que Hyunjin seguía enamorado de Yongbok, que aún esté los abandonara el alfa seguía con la esperanza de volver a ser una familia. Aún sabiendo esto dejo que su lobo tuviera el control sobre él, dejo que lo lastimara.
Tuvo que luchar más por el control.

—Papi— llamó el niño, Minho pronto trato de reprimir todas sus emociones, abrazando por los hombros a Taehyun para que no viera su rostro.

—Duerme Tae, hace frío ¿Si? Papá Hyun no se siente bien, vamos a mi casa para que estemos cómodos— Pidió, el niño se ocultó en su cuello sabía que su padre estaba triste su aroma lo demostraba al igual que su intento inútil de mandar tranquilidad por su lazo, la alfa no dejo que se bajarán del elevador al final ella también era culpable por lo que había sucedido.

Al voltear a verla ella solo negó, sacando a ambos de los edificios. Llevándolo lejos de ese lugar.

Minho miraba la nieve caer, el invierno había llegado. Sonrió, imaginando a su familia reunida comiendo algo caliente. Suspiró para seguir cociendo la cena.

Concubino, sirviente, esposo ¿Cuál es la diferencia?

Lazo Maternal [Hyunho]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora