Cáscara De Nuez En El Mar

Lección del Dia

Lo peor de todo fue que al cumplir doce años tuve una clase en la escuela que me dejó completamente perplejo.
Habían dos maestros, una mujer y un hombre que colgaron carteles que señalaban partes del cuerpo humano.
Note el cartel donde enseñaban el cuerpo de una niña, ella tenía mi mismo cuerpo.

Los dos maestros hablaban con turnos, hablaban sobre la diferencias de nuestros cuerpos y los cambios que estos experimentarán.
Pero habían cosas que no podía entender.
¿Que? ¿Como que el pene no te crece con los años? ¿Todos nacieron con uno? ¿Y los que no nacieron con uno eran niñas? Pero no podía ser verdad, yo no era una niña. 

Mientras el maestro explicaba más, yo me sentía más perdió. 

La maestra explicó los cambios que pasan las niñas ante la pubertad, las niñas se veían avergonzadas, vi a niños reírse por lo bajo. Yo me sentía horrorizado.

Esa tarde volvimos a casa con mis hermanos, estaban riéndose por la clase que tuvimos pero yo no pronuncie ni una palabra.

—¡De verdad el maestro dijo "pene"! Lo dijo frente a todos! Mañana gritaré "pene" frente todo el salon ahora que esta permitido!— Decía entre risas Osomatsu, Jyushimatsu se reía con el.

—Ahora mismo estas gritando "pene" en medio de la calle!— exclamó Choromatsu, era obvio que a él también le parecía gracioso.

—Como se llamaba eso que tienen las niñas? Era un nombre complicado— dijo Osomatsu mientras se rascaba el interior de su oreja.

—¿Tetas?— pregunto Todomatsu, también entre risas.

—No no, eso entre las piernas, eso que tiene Ichimatsu.— Osomatsu de verdad dijo eso.
De verdad lo dijo frente a todos.
En plena calle.
Nadie estaba caminando junto a nosotros en ese momento.
Pero de todas maneras sentí que el mundo se vino abajo.

Yo era una niña, todo este tiempo lo fui.
Unas lágrimas empezaron a caer mientras miraba el suelo.

—Eh? Por que tan callados? Vamos, mañana podre también decirlo en clases ahora que esta permitido decir esas palabras— Osomatsu rió un poco más pero Karamatsu lo interrumpido.

—Vagina, así dijo el maestro— dijo completamente serio, sin soltar una risa ni nada.

—Aah eso, que nombre más extraño— siguieron unas pocas risas de el y de Jyushimatsu

Seguimos el camino a casa en completo silencio.

Eh compartido todo con mis hermanos, toda mi vida fue así. Misma cara, mismos ojos, misma nariz y mismos cachetes; pero no mismo cuerpo.
Nuestro cuerpo no es el mismo, ellos ya lo sabían. Nunca me sentí más miserable, realmente quería desaparecer.

¿Por que nací? ¿Por que no puedo ser como ellos?

—¿Se dieron cuenta que el profesor olvidó mencionar que pasa con los niños que nacieron con una vagina?— Todos miramos a Osomatsu

—Si, es cierto que hay niños que nacen con esa cosa, no siempre son niñas— Dijo Jyushimatsu —Quizás deberíamos preguntar en la clase de mañana— Mire a Jyushimatsu, quería decirle que no lo hiciera.

—Nah, no creo que sea necesario— dijo de forma relajada Osomatsu
Seguimos el camino a casa, siguieron bromeando por un rato más.

Me seque las pocas lágrimas que quedaban en mis ojos.
Era un niño.