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 -Estoy muy orgulloso de ti Taehyung, realmente eres como un pequeño hermano para mi y verte llegar tan lejos es...es.-

Jimin cerró la boca, presionando sus labios en una línea para evitar llorar, sin embargo sus ojos lo traicionaron y se llenaron de lágrimas, por lo que inevitablemente sonrió, también sintiendo sus sentimientos a flor de piel.

Ese día había sido su graduación, finalmente se había graduado de la Universidad y ahora estaba junto a Jimin, Yoongi, Hoseok y Jungkook.  Miró a los 4 chicos con alegría, enormemente agradecido con que cada uno de ellos se haya tomado el tiempo de ir a su graduación. Nadie de su familia ni Bogum habían decidido asistir ese día, ignorando por completo todo lo que este significaba, así que le alegraba no estar solo pese a todo.

Por parte de su familia tuvo sus dudas. La idea de llegar a invitarlos y probar una última vez que no era un caso perdido pasó por su cabeza, la necesidad de querer ser validado por ellos seguía en los más profundo de su corazón aún cuando sabía perfectamente que cada una de las personas de su familia lo repudiaba, pero aún así quiso hacerlo. Sin embargo, en cuando mencionó esto Yoongi se encargó de tener una charla bastante larga con él, charla que lo hizo entrar en razón de que eso no sería una buena idea por donde sea que lo viera.

"Ellos no te apreciaron, no te ayudaron, ni buscaron cuando intentabas salir adelante, ahora que lo lograste no merecen estar aquí para celebrar tus logros Taehyung."

Solo escuchar eso fue suficiente para convencerlo, por lo que al final no intentó contactar ni con sus padres ni con sus hermanos y la verdad es que no se arrepentía, ahora al menos sabía que eso era lo mejor para si mismo.

Respecto a Bogum la historia era diferente.

Tres meses habían pasado desde aquel primer golpe, tres meses desde que Bogum había roto su télefono y había cambiado completamente al punto de ser irreconocible. Aún recordaba como a los días de ese incidente Hoseok había visto el estado de su télefono e inmediatamente le ayudó con un aumento de salario temporal. No tuvo que hacer horas extras ni nada similar y aunque insistió que no era necesario Hoseok le había dicho que lo tomara como un regalo adelantado de graduación, cosa que agradeció infinitamente, aunque también lo hizo sentir avergonzado con su mayor.

En cuanto a la relación con Bogum las cosas no habían mejorado en absoluto, en realidad nunca lo hacían, pero tampoco tuvo el valor de irse en ninguna oportunidad. Cada que la idea pasaba por su cabeza la amenaza del hombre hacía presión sobre sus hombros, arrinconándolo en una situación de la que no sabía como salir. Ya no se sorprendía cuando Bogum lo golpeaba, simplemente lloraba en silencio, esperando no molestar más al mayor y que la golpiza empeorara, debido a que en ocasiones el solo hecho de que él estuviera de mal humor significaba que sería su saco de boxeo durante esa noche, cosa que odiaba.

Lentamente cosas como escuchar el sonido de la puerta siendo abierta comenzó a aterrarlo, escuchar su voz se convirtió probablemente en su peor pesadilla y el miedo lo ahogaba constantemente. De igual forma poco a poco muchas cosas dentro de si mismo se habían apagado, ya no le interesaban sus actividades favoritas, no recordaba la última vez que intentó pintar, tampoco sabía cuando fue la última ocasión en la que se animó a tocar el violín, el cual era su instrumento favorito, el cual lo acompañaba desde la infancia pero ahora estaba en su estuche debajo de la cama, completamente olvidado.

Incluso le costaba recordar los momentos donde se sentía feliz, aunque sabía que eran realmente pocos. Podía decir que esos pequeños momentos de alegría sucedían solo cuando salía con la pareja, cuando hablaba con Hoseok en sus ratos libres en la cafetería o cuando Jungkook llegaba por su típico café, aprovechando la oportunidad para charlar un poco, pero eran tan cortos que realmente no sentía que estuvieran ahí.

Aprendiendo a amar / KV [Finalizada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora