El nacimiento de Pain

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No he terminado todavía–diría un tipo

¡Por aquí!–diría Jiraiya saliendo por detrás pero este sería golpeado por una lagartija gigante

El destino nos llevo directamente a los Sannin de la Aldea de la Hoja. Finalmente los encontramos. Encontramos a Jiraiya sensei. Pero yo no podía aceptar verdaderamente a un ninja de la Hoja. Estoy seguro de que entenderás porque–dijo Nagato

Enséñanos Ninjutsu. Tú eres un ninja de la Aldea Escondida entre las Hojas, ¿verdad?–diría Yahiko

Gracias. Esto es para usted–diría Konan mostrando una flor de papel

Voy a matar a estos niños–dijo Orochimaru

¿Qué…?–diría Yahiko

He visto a muchos huérfanos de guerra. Es lamentable. Sería lo mejor para ellos. Es lo mejor para sacarlos de la miseria de este mundo–diría Orochimaru

Orochimaru, es suficiente. Sigue adelante con Tsunade. Me quedaré aquí y cuidare de ellos durante un tiempo. Es lo menos que puedo hacer–dijo Jiraiya

Mis padres fueron asesinados por ninjas de la Hoja–dijo Nagato

Gracias por la comida–dijeron los tres pequeños

Pescado asado a la parrilla en un instante. Con mi Jutsu Estilo Fuego–diría Jiraiya

Pero Jiraiya sensei parecía un poco diferente que ellos–decía Nagato

Sensei, he picado un pez–dijo Yahiko

¿Ah, sí? Te estás convirtiendo en más y más prometedor–diría Jiraiya

La convivencia de nosotros cuatro apenas comenzaba. Poco después, un cierto incidente ocurrió–dijo Nagato

¿Incidente?–pregunto el saiyajin

Un ninja nos atacó y casi mató a Yahiko. Entonces fue cuando ataque y maté a ese ninja. Y lo hice… sin darme cuenta–diría Nagato

¿Te encuentras bien, Yahiko?–pregunto Jiraiya

Parece que poseía un poder especial. El Jutsu Ocular conocido como Rinnegan. Por consiguiente, Jiraiya Sensei, quién se había encargado de nuestro entrenamiento, comenzó a enseñarnos ninjutsu. Dijo que nos estaba enseñando para que pudiéramos defendernos. Pero creo que, en mi caso, era para que yo pudiera controlar el poder del Rinnegan. Pero tuve miedo de mi poder. El odio me había hecho perder los estribos. Pensé que lo que hice estuvo mal y fui consumido por la culpa. Pero el Sensei me sacó de esas profundidades–decía Nagato

¿Se trata de ese incidente?–pregunto Jiraiya

Ese día… Cuando ese hombre hirió a Yahiko, estaba tan enojado. Todo se puso blanco en mi cabeza. Yo no sabía lo que estaba haciendo. Antes de que me diera cuenta, el hombre estaba muerto. Después de eso, tuve mucho miedo. Este odio me hizo descontrolarme… y maté a alguien. Lo que hice estuvo mal. Tiene que haber otra manera–decía el pequeño Nagato

Nagato. Realmente no sé si estuvo bien o mal. Pero gracias a ti, Yahiko no murió. Protegiste a tu amigo. Esa tuvo que ser la elección correcta. Nadie te puede culpar por ello–dijo Jiraiya

Antes de darme cuenta, ya había aceptado al sensei–diría Nagato

Cuando estás herido, aprendes a odiar. Por otra parte, cuando lastimas a alguien, lo llegas a resistir. Y llegas a sentirte culpable–diría Jiraiya

Como sea, entendiendo semejante dolor te hace capaz de entender el de los demás. Sabiendo que el dolor nos ayuda a crecer, a madurar. Y crecer significa ser capaz de pensar y tomar tus decisiones por ti mismo. De conocer y reflejar el dolor, y tener tu propia respuesta. Jiraiya sensei parecía estar preguntándose lo mismo. Él tampoco había encontrado una respuesta. Así como tú tampoco. En aquel entonces, yo era capaz de dar una respuesta inmediata–decía Nagato

Mi Nueva Vida (Parte ll) - RemasteredDonde viven las historias. Descúbrelo ahora