January melancholy L.S

Capítulo 22 - The end

Louis llamaba todos los días como había prometido, pero por alguna razón esta vez lo estaba extrañando de más, Harry creía que podría ser la mala costumbre del ojiazul cuando lo despertaba con un beso de buenos días para luego irse y dejar pequeñas notas de amor que conservaba en una caja con notas iguales.

Con el pasar del tiempo se hacía más difícil la distancia y con ello la necesidad de enredarse entre sus extremidades hasta colmar ese vacío era atrayente.

No tenía idea de lo que el mayor se encontraba haciendo, ni si quiera sabia a donde había ido, siempre que intentaba preguntar cambiaba de conversación desviando el tema a cosas sin sentido

Harry confiaba plenamente en Louis, pero todo se había esfumado después de una de sus llamadas en la mañana, el rizado aseguraba haber escuchado la voz de una mujer, tan claro, que en ese instante Louis colgó sin siquiera despedirse, no había vuelto a llamar desde entonces.

Se sentía estúpido al sentir celos y era inevitable sentirse inseguro, en todo lo que podía pensar era en si lo habría cambiado por alguien más, porque lo admite, sería algo para lo que no estaría preparado, pero Louis siempre fue tan fiel que no sabía si debía desconfiar del todo.

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Suspiro rendido recostándose contra el espaldar del sillón para luego tomar su teléfono entre sus manos y observar varios mensajes en el chat de su grupo de amigos, como lo hicieron rutina, suele reunirse con los chicos cada fin de semana para hacer actividades fuera de la vida laboral, algo que Liam insistió a cada uno poniendo como excusa que el tiempo entre amigos era importante. Por lo que las salidas se volvieron recurrentes y hasta ahora había sido una gran idea, jugaban bolos, golf, monoply, jenga y cualquier juego en los que terminaban ebrios por alguna razón.

Harry era bueno en cualquiera de ellos, pues como decía Niall, era un don que solo él tenía el lujo de conservar, todo lo que le enseñaban lo aprendía con rapidez y ganaba la mayoría de veces.

El tiempo en amigos solo había funcionado para fortalecerlos más, de hecho, no hace mucho, Nadia y Aurora se mudaron juntas a un departamento más cerca de la cafetería, incluso llegaron a mencionar que adoptarían a un pequeño bebe y Harry no evito se sentirse feliz por ellas, aunque no compartía la idea de ser padre algún día, no era algo que le gustaría o estaba seguro que no se le daría bien.

Con Liam, al parecer, se había estado viendo con una chica que conocieron en una de sus tantas partidas de bolos, era poco sociable y tímida, casi el polo opuesto de Liam, pero ella parecía encantada con el contrario, su nombre era Oriana y Harry logró empatizar con ella al instante.

Aaron también salía con su chica, aunque Harry no recuerda muy bien cómo se llamaba, pero sí que era competitiva en los juegos. Para su sorpresa, Nohora aun estaba con el chico musculoso del bar y en cuanto a ellos, podría decirse que era pura atracción sexual, aunque el chico se comportaba como un real caballero.

Todos, absolutamente todos, estaban en pareja y eso lo hacía sentirse aún más solo, necesitaba a su Louis lo más pronto posible o su paciencia acabaría y terminaría yendo en su búsqueda donde sea que estuviera.

Sus amigos estaban confirmando su próxima salida y Aaron estaba entusiasmado en ir a un pub que se estaba convirtiendo en uno de los mejores de la ciudad a lo que todos dieron una respuesta afirmativa y Harry no vio problema en aceptar, estaba frustrado y tal vez el alcohol ayudaría un poco a soltarlo.

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El fin de semana arribo y cuando menos lo pensó estaba siendo empujado al lugar junto a sus amigos eufóricos, el ambiente se palpaba seguro y ruidoso, las luces se plegaban por todo el lugar haciéndolo todo más fiestero y la pista de baile estaba más que repleta. Para su mala suerte era el único que había ido sin compañía, sus amigos estaban con su respectiva pareja, aunque ellos hacían lo posible para no dejarlo aparte y Harry agradeció ello o su noche se habría arruinado.