La Omega que no quería a su predestinada [Adaptación Satzu]

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La alfa líder iba de un lado a otro, estaba sumamente preocupada, su omega había estado teniendo episodios demasiado extraños, se sentía muy intranquila, el verla casi a cada momento rechazar algunos alimentos además de vomitar de vez en cuando la estaba poniendo sumamente alarmada.

— Sana, tranquila—habló Mina que veía como su líder se la pasaba casi mordiendo sus uñas—, está bien, Jihyo la está revisando.

La alfa líder soltó un suspiro.

— Puede que no esté bien, puede que sea mi culpa, puede que incluso sufra una enfermedad, no quiero que algo le pase.

— Alfa líder debe encontrarse tranquila —habló Jeongyeon, jamás había visto a la alfa líder tan preocupada, ni siquiera en los entrenamientos, siempre la había visto con un semblante serio ante los problemas.

Momo comprendía lo que pasaba, pues al tener de omega a Dahyun, también había sentido más la necesidad de protegerla y de no apartarse de su lado, el lazo sí que hacía que sintieras todo lo que siente tu pareja destinada, pero era un problema a veces, debido a que si la omega se sentía enojada, ni siquiera te respondía el porqué de su enojo. Los omegas son complicados, pero muy hermosos.

Escucharon los pasos de Jihyo aproximarse hacía ellas, y entonces Sana dejó de caminar de un lado a otro para mirar hacia Jihyo.

— ¿Se encuentra bien? —preguntó Sana de inmediato, Jihyo sonrió al ver la preocupación en el rostro de Sana.

—La princesa está bien, Sana, debes dejar de preocuparte, debo darte una felicitación.

— ¿Qué? —Sana no lo entendía, por medio del lazo sintió como su omega le mandaba prácticamente alegría, no entendía lo que estaba pasando.

—La princesa Tzuyu está esperando un bebé.

Sana se quedó estática al escuchar aquello, ¿sería madre? ¿Tzuyu y ella serían madres de un hermoso cachorro? ¡No lo podía ni siquiera creer! Se sentía tan emocionada, quería salir corriendo por todo el pueblo y gritarle a todos que iba a ser madre, que Tzuyu y ella tendrían un hermoso cachorro, estaba más que contenta al respecto.

— Puedes ir a verla, está recostada.

Indicó Jihyo, a lo que Sana a duras penas pudo dar un asentimiento y caminar hacia donde se encontraba ahora su omega.

Con pasos casi sigilosos y con duda, entró a la respectiva habitación en dónde su omega se encontraba, aún recostada y con una sonrisa que no podía ni siquiera borrar, al mirar a su alfa soltó feromonas para indicarle que su aroma tenía un tenue cambio, pues este era más dulce.

— Seremos madres —Tzuyu soltó una suave risa al escuchar a su alfa, parecía que aún no lo podía ni siquiera creer—, ¿en verdad lo seremos?

— Sí, alfa, lo seremos — Sana por fin pudo sentirse relajada, escuchar a su omega decir tales palabras solo la hacía sentirse mucho más feliz que nunca.

— ¿Qué crees que sea? —preguntó Sana acercándose para poder estar al lado de su omega y acariciar la mejilla de la princesa.

—Jihyo me lo ha dicho, pero... será una sorpresa para ti, mi alfa.

— Eso no es justo, mi omega.

Tzuyu le dio un beso en la mejilla.

— Te amo, alfa.

— Y yo a ti, omega.

FIN.

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Aún falta el epílogo.

¿Qué creen que sea la Bendi?