Adiós a la soltería - 4

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Pov Lisa:

No me había dado ni cuenta cuando ya me había dormido, lastimosamente desperté, tenia mucho sueño pero no pude ignorar aquella mano que se posaba en mi abdomen, al notar aquella mano mi vista siguió por el brazo para ver a quien le pertenecía aquella mano que me provocaba escalofríos.

Incrédula vi el rostro de una Jennie profundamente dormida, ella estaba abrazada a mi, con su mano en mi abdomen, su cabeza descansando en el hueco que había entre mi hombro y mi cuello, y con una de sus piernas rodeando mi cadera.

Su mano empezaba a bajar por mi abdomen y de inmediato puse la mía encima para detenerla, la castaña seguía totalmente dormida, aparte su mano de mi pero de inmediato volvía a mi abdomen, iba a sacar su mano pero me dio un manotazo antes de poder hacer nada. - Mía- dijo por lo bajo Jennie dormida.

- Jennie ¿puedes sacar tu mano?- pregunte susurrando para que no despertar y ver si me hacia caso mientras estaba dormida. - mmh... no.- contesto abrazándose más a mi, lo cual me dio mucha gracia, creo que me cae mejor la Jennie dormida que la despierta.

- ¿Me das un beso?- pregunte probando suerte. - No.- recibí de respuesta. - ¿Ni siquiera en el cuello o la mejilla?- probé suerte de nuevo, no recibí respuesta... o eso creí cuando siento los labios de Jennie tocar mi cuello.

Le mire y se podía ver una sonrisa de labios en su rostro, yo también sonreí al ver aquella imagen tan tierna, pero después de pensarlo unos segundos decidí que era mejor no aprovecharme de la situación y seguí durmiendo.

[...]

Pov Jennie:

Estaba tan cómoda, nunca había dormido tan bien en mi vida. Sin duda tenia que cambiar mi cama, estaba cálida y muy cómoda en aquella cama, que no me quería levantar.

De repente sentí como me acariciaban el pelo, al abrir los ojos tuve un déjà vu, otra vez despertaba al lado de aquella pelinegra y cuando note que estaba prácticamente encima de ella y abrazándola simplemente mi mente entro en pánico.

Me aleje de ella de un salto y ella levanto la vista hacia mi. ¡¡Estaba despierta!! ósea que es más que obvio que se dio cuenta de que la estaba abrazando... tengo que hacer algo. Pensé al verla observándome.

Lisa levanto ambas de sus manos en señal de rendición, como si la estuviera apunto de asaltar. - Yo no hice nada, te lo ju- No la deje acabar cuando ya me había abalanzado hacia ella besándola con necesidad.

Después de unos segundos Lisa reacciono y correspondió el beso, pero instantes antes estaba en estado de shock, normal ni yo estaba asimilando lo que acababa de hacer. 

¿Qué porque lo hice? bueno para confundir a Lisa básicamente, existía la posibilidad de que eso no pasara, pero lo bueno de ello es que estaba segurísima de que Lisa estaba confundida ante mis acciones, por que yo también lo estaba, y mucho.

Esto se empezó a poner interesante en el instante que Lisa poso tímidamente sus manos en mi cintura y me atrajo hacia ella, yo me puse encima de ella con un brazo al lado de su cabeza apoye mi peso y con la mano libre sujete su mentón profundizando aun más el beso.

A pesar de que yo la besaba con necesidad, ella con toda la calma del mundo se ocupaba de darle atención a cada zona de mi boca, sus acciones eran tímidas y delicadas lo que de alguna manera me desesperaba, pero a la vez me gustaba. Es difícil de explicar, no lo hacia mal en absoluto, pero quería verla necesitada.

Cuando el aire empezó a faltar, me aleje de sus labios y la imagen que divise al abrir los ojos hicieron que recuerdos llegaran a mi mente, recuerdos de aquella noche en la habitación de hotel. La imagen de Lisa abriendo los ojos somnolienta y respirando con dificultad bajo mi cuerpo, con la mirada fija en mis labios, coincidía a la perfección con el recuerdo que tenia en mente.

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